Los libros tienen la facilidad de transportarnos a lugares fantásticos, conocer grandes personajes y empaparnos de la influencia de grandes escritores.
La lectura además de abrir nuestra mente, también nos ayuda a relajarnos y para fomentar la buena lectura, cada individuo tiene una rutina especial. Algunos se preparan una bebida caliente o se sientan junto a una ventana, y otros acuden a una librería con servicio de café.
Estos establecimientos son reconocidos por tener buena música para concentrarse y una atmósfera tranquila para leer, pero un día, la paz y armonía de una de estas librerías fue quebrada por un grupo de agentes chinos que decidió secuestrar y censurar a uno de los cinco escritores que compartían libros sobre la vida privada de los líderes del Partido Comunista Chino (PCCh).
El librero Lam Wing-kee, después de pasar ocho meses detenido por los agentes y tras ser liberado compartió que el gobierno chino quiso censurarlo y reducir la libertad de opinión de Hong Kong, aunque este no pertenezca al Partido Comunista.
Lam Wing-Kee comentó que para ponerlo en libertad, los agentes le solicitaron un disco duro con los clientes de su librería especializada en contenidos sexuales y escándalos de los dirigentes del PCCh.
La librería está en Hong Kong, un lugar donde la libertad de expresión y de publicación está protegida. Y el país (Pekín) está utilizando la violencia para destruirlo, dijo Lam a los periodistas, al tiempo que pedía a los hongkoneses que luchen por sus derechos.
Estos libros son bastantes populares y debido a la censura que existe en una parte de China, mucho de estos textos están prohibidos pero Lam envió muchos de ellos a librerías donde el Partido Comunista no puede ingresar.
Una de estas tiendas se encuentra en el centro de Hong Kong y ha vendido más de 1000 libros con pasajes tintados para luchar contra la censura. Amnistía Internacional quiere acabar con este tipo de leyes que amenaza a los libreros y a la libertad de prensa.
Es un momento crítico para la libertad de prensa y la autocensura en Hong Kong. Todos los días vemos informes de periodistas que se enfrentan a la censura, o no la cobertura de cuestiones sensibles, mientras que algunos periodistas están siendo despedidos, amenazados, o incluso físicamente atacados debido a su papel en la presentación de informes, Mabel Au, director de Amnistía Internacional de Hong Kong.
Para proteger la librería emergente, Amnistía Internacional reunió a voluntarios para ocultar las palabras o citas con marcador, pintura y cinta como forma de manifestación contra la censura, en lugar de vender directamente los libros etiquetados como polémicos.
La librería ha decidió transformar estos textos en una obra de arte y de manifestación, para recordarle a todas las personas la importancia de la libertad de expresión.
Queríamos algo más de una instalación de libros prohibidos, Convertir esta situación en arte en lugar de desafiar de manera irresponsable a las autoridades. Nosotros también sentimos que la gente quiere mantener estas piezas, como un recordatorio de la libertad y la censura.
Para reforzar esta campaña, Amnistía Internacional se asoció con el Hong Kong Free Press temporalmente. La organización también está compartiendo material visual en las paradas de autobuses, mostrando a un artista diferente, dibujando un polémica escena en Hong Kong.
En uno de estos clips aparecía el siguiente texto:
Los residentes de Hong Kong tendrán la libertad de expresión, de prensa y publicación, la libertad de asociación, de reunión, de procesión y de manifestación; y el derecho y la libertad para formar sindicatos, ya la huelga.
Para Mable Au, estos videos colocados estratégicamente, fue una idea para concientizar a las personas sobre la falta de honestidad, libertad y derechos humanos que se vive en este país y alrededor del mundo.
Actualmente esta organización se ha expandido en diferentes países ofreciendo apoyo, buscando voluntarios y luchando por los derechos humanos y contra la censura.
Hoy más que nunca necesitamos unirnos para defender los derechos humanos. ¡Únete! > https://t.co/VxV35Gwfcx pic.twitter.com/ZxyZQlgom7
— Amnistía Int. México (@AIMexico) 27 de febrero de 2017
Con nuestra minuciosa investigación y nuestro decidido trabajo de campaña, ayudamos a combatir los abusos contra los derechos humanos en todo el mundo. Llevamos a torturadores ante la justicia. Cambiamos leyes opresivas. Y liberamos a personas encarceladas únicamente por expresar su opinión, comparten en su página.
Ya sea para defender a los pueblos indígenas, para reducir los conflictos armados o para luchar contra la discriminación, la organización recluta voluntarios para hacer frente a estos y otros problemas globales que estén en contra de los derechos humanos.
