El Premio Sustania 2014 fue entregado el pasado 30 de octubre en Dinamarca. Este reconocimiento se da a proyectos y tecnologías innovadores que tienen el potencial de ayudar a construir un futuro más sustentable.
Este año se recibieron casi 900 proyectos provenientes de 84 países, en categorías como moda, alimentación, desarrollo urbano, transporte y salud. Aquí presentamos al que resultó ganador, así como a los 10 finalistas:
Wecyclers, Nigeria:
Este proyecto, presentado en la categoría de Ciudad, fue el ganador del Premio Sustania 2014, y consiste en una respuesta a la crisis local de basura, en la que el gobierno recoge solamente el 40% de los desperdicios. Por eso, Wecycle tiene una flota de bicicletas que recogen y reciclan la basura de barrios de bajos ingresos, impulsando a las familias a reciclar botellas, latas y plásticos. Por cada kilo que es recolectado, la familia recibe puntos que pueden ser canjeados por minutos de celular, alimentos o utensilios básicos del hogar.
Sustainia Award Winner 2014 – Wecyclers from Sustainia on Vimeo.
Netafim, Israel:
Es un sistema de irrigación de baja tecnología para pequeños agricultores en países en desarrollo, el cual aumenta la cosecha al mismo tiempo que reduce agua y costos, ya que administra agua y nutrientes en cantidades precisas justo en las raíces. Esto minimiza la necesidad de invertir en electricidad e infraestructura.
Spotcycle, Canadá:
Finalista en la categoría Transporte, esta app creada por la empresa 8D technologies localiza estaciones de bicicletas cercanas y comunica disponibilidad, mapea caminos y ayuda con la navegación, para así hacer más fácil el compartir bicicletas. Está sincronizada con ciudades en Estados Unidos y Canadá, Australia y Europa.
Advantix, Estados Unidos:
Los aires acondicionados usan una gran cantidad de energía (en Estados Unidos, representan el 5% del consumo total) y emiten unas 100 millones de toneladas de dióxido de carbono al año. El sistema de Advantix usa agua salada, usando así 40% menos de energía. El secreto es que su proceso pasa el aire por agua salada, por lo que quita la humedad del aire sin necesidad de volver a calentar, mientras que los sistemas tradicionales primero enfrían el aire y luego lo vuelven a calentar.
I:CO, Suiza:
I:CO permite que la ropa, zapatos y otros textiles entren a un ciclo cerrado, al recolectar prendas usadas en diversas tiendas (incluyendo H&M en todo el mundo) y ofreciendo a los usuarios diversas recompensas. Después, la ropa es clasificada y revendida, reciclada o reutilizada.
Fairphone, Países Bajos:
Esta empresa social trabaja para tener un impacto social positivo en la cadena de valor de los productos electrónicos de consumo y comenzó creando smartphones que no usan minerales en conflicto y son ensamblados en una fábrica que tiene un fondo para el bienestar de los empleados. Hasta ahora, ha vendido cerca de 50 mil teléfonos.
We Care Solar, Estados Unidos:
Más de 800 mujeres mueren diariamente por causas prevenibles relacionadas con el embarazo y el nacimiento, y el 99% de los casos suceden en países en desarrollo. We Care Solar ha desarrollado una maleta llamada The Solar Suitcase, la cual provee de energía solar para iluminación médica, comunicación móvil y herramientas médicas para áreas rurales, ayudando así a proveer de cuidados seguros y mejorando las posibilidades de sobrevivir de madres y sus hijos. Ya se está usando en más de 600 centros médicos en 20 países.
AirCarbon, Estados Unidos:
Una tecnología que convierte los gases de efecto invernadero en material plástico, la cual permite reemplazar a los plásticos basados en petróleo con un producto sustentable que es competitivo en precio y desempeño. Esto se logra en un proceso en el que se captura el carbono del aire. La tecnología ya se ha usado para hacer sillas, bolsas y protectores de teléfonos celulares.
Shidhulai Swanirvar Sangstha, Bangladesh:
Más de un millón de ciudadanos de Bangladesh podrían ser desplazados por los altos niveles del océano para 2050. Este fenómeno también causa que muchos niños deban faltar a la escuela por largos períodos de tiempo, lo cual a su vez hace más difícil que ellos escapen de la pobreza. La iniciativa Shidhulai Swanirvar Sangstha construye barcos impulsados con energía solar que recogen a los estudiantes que viven en zonas aledañas a ríos. El horario es flexible gracias a la energía solar, por lo que también se ofrecen clases en las tardes. El programa ya se ha replicado en Nigeria, Camboya, Filipinas, Vietnam y Zambia.
Opower, Estados Unidos:
Opower usa big data para ayudar a las empresas que proveen de energía a conectar con sus usuarios y a promover la eficiencia. Este software combina tecnología de la nube, ciencia del comportamiento y big data para proveer de análisis e información personalizada sobre cómo ahorrar energía. Las empresas lo usan para compartir insights con sus clientes y también puede usarse para que familias vecinas comparen su consumo energético.
Fuente:
The Guardian