Sin importar si se trata de empresas dedicadas a la moda rápida o de marcas de lujo, cada vez es mas frecuente que la industria de la moda sorprenda con esfuerzos responsables que reduzcan su huella ambiental o impacten de manera positiva en su entorno.
1. Comercio Justo
Ya sea en una granja o fábrica, las marcas que participen en esta tendencia deben cumplir con rigurosos estándares en seguridad laboral, ausencia de explotación y mejores prácticas ambientales, por lo que los trabajadores reciben salarios más justos y capacitación constante.
2. Cadena de valor
Durante el primer año transcurrido desde la tragedia de Rana Plaza en Bangladesh, el accidente en el que murieron más de mil doscientos trabajadores de la industria textil ha servido de parteaguas para que numerosas empresas y organizaciones emprendan esfuerzos por impulsar políticas responsables en torno a la seguridad de los trabajadores, buscando cadenas de suministro más éticas y transparentes.
3. Emisiones de Carbono
EL crecimiento de una empresa no siempre es directamente proporcional al aumento de sus emisiones contaminantes, Nike Inc. lo demuestra en su último informe de sustentabilidad, donde destacan sus logros en materia ambiental, eficiencia energética, aprovechamiento del agua y reducción de residuos.
Uno de los puntos más relevantes fue la reducción del 13% en emisiones de carbono por unidad alcanzada por Nike durante 2013, un avance que coloca a la compañía muy cerca de su meta de 20% para el 2015.
4. Etiquetas Ecológicas
Las etiquetas ecológicas deberían contener información ambiental o social sobre un producto, a fin de facilitar a los consumidores una decisión responsable respecto a su compra y promover mejores hábitos de consumo. Sin embargo parece que al igual que en la industria alimentaria, la moda ha abusado del mensaje ecológico, por lo que de no ser reguladas pronto, estas etiquetas podrían encontrarse en riesgo de perder la credibilidad que aún conservan.
5. Nivel de sostenibilidad
El indice Higgs es una herramienta de la sustentabilidad que permite a las compañías de ropa medir el impacto de todos sus productos a lo largo de su cadena de valor.
Lanzado en julio de 2012 por la Sustainable Apparel Coalition (SAC), este indice ha penetrado poco a poco en todos los niveles de la cadena de valor en la industria de la moda cobrando cada vez mayor relevancia entre las empresas.
6. Participación de los consumidores
Una encuesta realizada en 2013 por el Instituto de Tecnología de Massachusetts Sloan Revisión y el Boston Cosulting Group, reveló que las empresas tienen 80% más probabilidades de aumentar la participación de sus clientes por medio de la sustentabilidad.
Es por ello que algunas marcas han optado por involucrar a sus consumidores en sus esfuerzos a favor del medio ambiente, invitándolos a donar ropa para causas sociales o incluso para reciclaje.
7. Participación activa
Cuando se trata de promover acciones que beneficien al medio ambiente o a la sociedad no es suficiente crear campañas para generar conciencia en un público interno o externo, por lo que la industria de la moda como cualquier otra ha tenido que comenzar a participar de forma activa en conjunto con sus consumidores y su cadena de valor para generar un impacto positivo en su entorno.
Desde luego esto incluye vigilar de cerca a su cadena de suministro a fin de evitar incurrir de forma indirecta en prácticas poco responsables.
8. Reutilización y Upcycling
De acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, solo el 15% de la ropa que se desecha es reciclada cada año, por lo que la industria de la moda ha tenido que comenzar a trabajar de la mano con distintas organizaciones a fin de crear soluciones que permitan un mejor aprovechamiento de los recursos naturales y la reducción de desechos.
9. Herramientas
Utilizar la tecnología en favor de una moda más sostenible es definitivamente una excelente opción para involucrar a las empresas y a los consumidores. Las etiquetas con códigos QR que brindan a los consumidores información sobre el origen de las prendas y su impacto ambiental constituyen sin duda una opción práctica y sencilla para incentivar el consumo responsable.
10. Fibras orgánicas
La sustentabilidad de una prenda debe estar presente desde los tejidos, por lo que el uso de fibras certificadas es una tendencia que a pesar de avanzar lentamente ha tenido una gran aceptación en el mercado,penetrando incluso en algunas marcas dedicadas a la llamada moda rápida.
Con información de Triple Pund It
