El nuevo milenio ha traído consigo una serie de retos sociales y ambientales muy particulares, como lo son la seguridad alimentaria y el acceso tanto a servicios básicos y de salud, como a educación y tecnología. Pero con ellos ha llegado también el concepto de los negocios sociales, empresas creadas con el objetivo de hacer frente a estos retos al mismo tiempo que generan ganancias. Este modelo está triunfando en todo el mundo, en especial en países en vías de desarrollo, pero también se enfrenta a retos específicos. Aquí tres acciones que aumentan las posibilidades de éxito de una empresa social:
1. Pedir la opinión de emprendedores experimentados:
Cualquier emprendedor que quiera convertir su idea en una empresa viable y sustentable debe obtener experiencia y opiniones de expertos con experiencia en los negocios, en el tercer sector y en el gobierno. Descubrir cómo han tenido éxito otras personas, cuáles han sido sus errores y qué lecciones han aprendido es una forma de aprendizaje activo que te ayudará mucho.
Tener un mentor significa obtener consejos reales y ayuda a hacer más rápido el proceso, de forma que se evitarás cometer algunos de los errores típicos que suceden en las primeras etapas de un negocio social.
2. Elimina obstáculos económicos:
Un negocio social, al igual que cualquier otra empresa, requiere de una gran inversión monetaria, por lo que puede convertirse en una carga. Por eso, debes aprovechar cualquier oportunidad de recortar costos, usando espacios de oficina compartidos, aplicando a becas y competencias, etcétera. Al eliminar preocupaciones sobre dónde dormirás o qué comerás, podrás enfocarte por completo en tu emprendimiento.
3. Enfócate:
Al desarrollar un negocio social surgen muchas necesidades y presiones: se debe desarrollar un producto y una base de clientes, pero también generar estrategias de ventas y marketing, así como poner en orden los requisitos legales y contables. Muchos emprendedores deciden hacerse cargo de todo esto por sí mismos, lo que puede distraerlos de la parte social.
Lo mejor es que te asocies con despachos que se especialicen en las áreas técnicas, lo que te ahorrará tiempo y frustración. Recuerda que no tienes que saberlo todo, sino solamente crear una red de personas y recursos que te ayuden a llegar a tus metas.
Fuente:
FastCompany
