¿Eres de los que llega a la oficina minutos antes de su hora de entrada y parece no tener un horario de salida? Piensa en cuántas horas a la semana pasas dentro de tu espacio de trabajo; una vez que llegas a casa, ¿continúas revisando pendientes?
Si es así, seguramente tu smartphone se ha convertido en uno de tus mejores aliados, tienes activadas las alertas de tu correo electrónico de trabajo y pocas cafeterías de la ciudad te han visto entablando una charla con alguien que no sea tu tableta o tu laptop. Es muy probable que te consideres una persona sumamente productiva y creas que tu desempeño profesional está muy por encima de la media. Lamento mucho decepcionarte, pero te equivocas.
Tras años de investigación, el especialista Jullien Gordon, quien por cierto es un adicto al trabajo en recuperación, logró identificar la diferencia entre un alto nivel de productividad y esta necesidad obsesiva de estar conectado al escritorio el mayor tiempo posible. «La gran diferencia es la forme en que el individuo se siente en el interior sobre cómo es él respecto a su trabajo», asegura.
Una persona altamente productiva trabajará de una forma sana y sostenible que le permitirá sentirse feliz e inspirada, mientas que un adicto al trabajo se sentirá todo el tiempo estresado e infeliz, ya que tiene la idea de que jamás está haciendo suficiente.
En una publicación reciente en Business Insider , Jacquelyn Smith logró identificar tres diferencias fundamentales entre estos dos tipos de rendimiento, nosotros las retomamos y comentamos a continuación.
1. Las personas productivas conocen su valor, los adictos al trabajo permiten que otros lo definan por ellos
Al conocer su propio valor y el valor de su trabajo, las personas productivas pueden funcionar con un sentido de libertad único, hacer autoevaluaciones periódicas y mejorar su desempeño de forma constante en lugar de esperar comentarios de otros para hacerlo.
Por su parte, quienes son adictos al trabajo basan su percepción en la validación externa de colegas, jefes y clientes, por lo que esperan las evaluaciones semestrales o anuales para entender sus aciertos y equivocaciones
2. Las personas productivas dan el 100% en el momento correcto, los adictos al trabajo dan el 110% todo el tiempo
Las personas con un alto nivel de desempeño saben cuando es necesario invertir el 100% de su energía y cuando deben reservar lo que tienen para esas ocasiones porque saben que dar el 110% todo el tiempo es sencillamente insostenible.
Están centrados en el desarrollo de sus habilidades y buscan mantener el equilibrio entre sus actividades profesionales y su crecimiento personal, ya que saben que esta forma de trabajo les ayudará a ser mejores también a nivel laboral, mientras que un adicto al trabajo es incapaz de priorizar y se mantiene estresado de forma permanente.
3. Las personas productivas hacen negocios, los adictos al trabajo siempre están ocupados
Las personas altamente productivas se centran en hacer negocios y miden su desempeño con base en resultados. Saben que al igual que la economía, el ritmo de actividades de una empresa varía por temporadas y que hay que estar preparado para cuando llega a su máximo nivel.
Un adicto al trabajo tiene como objetivo número uno estar ocupado (o parecerlo) en todo momento, por lo que llena cualquier espacio libre y se siente inseguro cuando no tiene ninguna actividad.
Gracias expok estoy aprendiendo mucho.