La sostenibilidad y la conservación son más que palabras de «moda» que aparecen en las declaraciones de misión de la empresa. Los consumidores de hoy se preocupan profundamente por temas como la contaminación plástica y buscan apoyar a las marcas e instituciones que lideran su industria con un propósito.
En este contexto, activistas ambientales apuntan repetidamente a la industria de los retailers, también conocidos como comercio minorista y su mensaje es importante y efectivo. Las emisiones de carbono, el alto uso de energía y los envases de plástico pueden contribuir al desperdicio en las cadenas de suministro minorista, y las empresas deben responder.
La mayoría de los retailers que buscan la sostenibilidad reconocen que es más fácil decir que hacer cambios en toda la organización. Sin embargo, establecer y comprometerse con objetivos realistas para toda la organización puede ayudar a reducir su huella de carbono y captar la atención de los consumidores con conciencia ecológica, de acuerdo con Total Retail.
¿Dónde se equivocan las marcas minoristas con la sostenibilidad?
El sector minorista juega un papel muy importante, no solo como impulsor de la economía global, sino también como el vínculo más crucial entre proveedores y consumidores. Así como en la realización de un transición hacia producción y consumo más conscientes.
Optar por la sustentabilidad corporativa no solo involucra hacer negocios de manera responsable y en equilibrio con el medio ambiente y la sociedad. También brinda crecimiento comercial a largo plazo al otorgar valor al negocio entre las diversas partes interesadas, como clientes, proveedores e inversionistas, por citar algunos ejemplos.
Sin embargo, dentro del comercio minorista, que involucra el último eslabón de la cadena de distribución, ya que se centra en la venta del producto acabado al consumidor final, establecer y comprometerse con prácticas sustentables realistas requiere dejar de lado algunas ideas erróneas.
Los minoristas señalan que, a menudo, no pueden obtener ganancias si dan prioridad a la sostenibilidad, pero el 68% de los estadounidenses dice que en realidad pagaría más por productos sostenibles.
Otra causa es la resistencia al cambio, con frecuencia algunos retailers que buscan la sostenibilidad en realidad no tienen la voluntad de hacerlo. Los ejecutivos minoristas se encuentran entre los menos propensos a utilizar nuevas tecnologías para alcanzar sus objetivos de sostenibilidad. Este pensamiento no es sostenible, ni para la salud del negocio ni para el planeta.
Para avanzar realmente en los objetivos de sostenibilidad, se deben adoptar innovaciones que faciliten su consecución, medición y evaluación. Entonces, ¿cómo los retailers que buscan la sostenibilidad pueden lograrla?
3 Iniciativas realistas para retailers que buscan la sostenibilidad
La sostenibilidad puede sentirse como una idea abstracta cuando recién se comienza. Por eso es importante basar la tarea en la realidad primero.
En lugar de comprometerse en proyectos poco realistas, será mejor comenzar poco a poco con algunos objetivos concretos y factibles. Lo que es más importante, en este camino, son las nuevas tecnologías que pueden ser clave para ayudar a lograr esos objetivos. Aquí hay tres iniciativas con las que los retailers pueden impulsar sus esfuerzos hacia la sostenibilidad.
1. Prácticas de envío sostenibles
La mitad de la producción de plástico del mundo son plásticos de un solo uso, y solo el 14% de los envases de plástico se recicla. Gran parte de este desperdicio es el resultado de envíos divididos, es decir, el uso de varios contenedores de envío para un solo pedido.
Sin embargo, un software de gestión de pedidos omnicanal (OMS, por sus siglas en inglés) puede ayudar a reducir la cantidad de materiales de envío que se utilizan. El OMS correcto brinda visibilidad de la disponibilidad del producto en tiendas, almacenes y centros de distribución, lo que permite cumplir con los pedidos desde una sola ubicación en lugar de dividir un solo pedido en varios envíos.
También se puede aplicar ingeniería inversa al proceso de envío en función de la ubicación del cliente. Por ejemplo, si un cliente envía un pedido a menos de una milla de una de la tienda, se puede enviar el pedido desde esa tienda en lugar de tener que enviarlo desde un almacén que está más lejos.
En última instancia, un OMS puede conectar los puntos entre sus pedidos, clientes e inventario para reducir los desechos plásticos y las emisiones de carbono relacionadas con el transporte.
2. Invertir en soluciones energéticamente eficientes
La iluminación, la calefacción y la refrigeración comprenden la mayor parte de los costos de energía para las instalaciones minoristas. Afortunadamente, las soluciones de eficiencia energética pueden reducir el uso de servicios públicos y los costos generales. Los reguladores de uso de agua, las películas para ventanas que bloquean el calor y el aislamiento mejorado de ventanas y puertas son algunas formas efectivas de reducir los costos de energía en los almacenes y tiendas.
Para una mejor supervisión, se puede optar por los servicios de monitoreo de energía que ofrecen visibilidad en tiempo real del uso de energía en un lugar determinado. Estos servicios facilitan la comprensión de las áreas problemáticas, como corrientes de aire y fugas.
3. Comunicación transparente con los stakeholders
Decirle a los clientes cuánto valora la organización la sostenibilidad sin tener las políticas o los resultados correspondientes es una práctica terrible. Sin embargo, ser sincero acerca de cómo se están abordando las preocupaciones ambientales, el progreso que se está logrando y el objetivo final que se está alcanzando son formas auténticas y efectivas de generar confianza y lealtad a la marca con los consumidores ecológicos.
El sitio web de la empresa, los canales de redes sociales y las listas de correo electrónico son medio útiles para mantener actualizados a los clientes. Por ejemplo, enviar un boletín informativo para informar sobre los esfuerzos para adoptar soluciones de mayor eficiencia energética en las diferentes ubicaciones, o informar sobre la donación de un porcentaje de cada venta a una causa ambiental o a una organización sin fines de lucro.
La presión proviene de los consumidores e inversores que quieren ver que la industria minorista realice mejoras en la sostenibilidad y el impacto climático. Por lo tanto, los minoristas de todos los tamaños deben comprometerse y cumplir con iniciativas alcanzables.
Afortunadamente, el envío sostenible, la gestión de ubicaciones de tiendas respetuosas con el medio ambiente y la comunicación transparente con el cliente son soluciones realistas que las organizaciones pueden implementar para marcar la diferencia dentro de su responsabilidad social.