«¡Y la bandera estrellada triunfante ondeará sobre la tierra de los libres y el hogar de los valientes!» fue el último verso que se escuchó del himno de Estados Unidos durante la toma de posesión del nuevo presidente de EE.UU. Joe Biden y su vicepresidenta Kamala Harris. Líderes que más allá de recibir un cargo, tienen en sus manos el futuro de una de las naciones más poderosas a nivel mundial.
Este duo se ha popularizado no solo por la batalla que enfrentaron y ganaron ante la reelección de Trump, sino por el tipo de ideales y gobierno que han prometido implementar en Estados Unidos. Uno que asegura dejar de lado la ideología de discriminación, desigualdad y hasta de odio que en muchas ocasiones mostró el ahora expresidente Donald Trump.
Si bien hay mucho que decir sobre todo lo que se espera desde el inicio de este nuevo mandato, hubo 3 puntos responsables en la llegada de Biden – Harris, ¿los notaste? Si no fue así, te los compartimos.
3 puntos responsables en la llegada de Biden – Harris
1. Una lucha que da resultados hoy para Kamala Harris y las mujeres
19 años tenía la madre de Kamala Harris, Shyamala Gopalan Harris cuando arribó a Estados Unidos proveniente de la India, sin imaginar que un día su hija sería la vicepresidenta de ese desconocido país y que representaría una nueva trayectoria para las mujeres.
La ahora vicepresidenta es la primera mujer negra de origen asiático en ocupar este puesto, y quien sostuvo durante la toma de poder que este título se logró gracias a la lucha de generaciones de mujeres negras, asiáticas, blancas, latinas, nativas americanas que han peleado y sacrificado mucho por alcanzar derechos fundamentales como la equidad, la libertad y la justicia para todas.
Harris también hizo hincapié en la fuerza de las mujeres negras que han soportado acciones de humillación y demostrado ser la columna vertebral de la democracia estadounidense. Y recordó a todas aquellas que pelearon por el derecho al voto y levantar la voz.
Harris se caracteriza por compartir sus políticas de centroizquierda con Biden en un momento de cambio progresivo, quien busca enfocarse en grupos históricamente marginados como las mujeres, las personas de color y los estadounidenses de bajos ingresos.
Creo que nuestro país quiere y necesita un liderazgo que proporcione una visión del país en la que todos puedan verse a sí mismos.
Kamala Harris, vicepresidenta de Estados Unidos.
2. El fin de la construcción de un muro que divide más que fronteras
Una de las propuestas más polémicas pero atractivas para muchos estadounidenses durante la primera campaña de Donald Trump fue la creación de un muro fronterizo entre México y Estados Unidos que detuviera el paso de los migrantes mexicanos, siendo que Trump consideraba quienes migraban eran lo «peor de México».
Si bien muchos expertos en el tema afirmaron que dicha construcción sería un proyecto imposible de lograr por razones desde arquitectónicas como de economía, Trump se empeñó en sostener hasta el final la construcción del famoso muro. Hoy confirmamos que quienes opinaron al respecto tenían razón y que este proyecto simplemente no pudo ser una realidad.
Biden está convencido que tal idea es mala y afirmó a pocas horas de su llegada a la Casa Blanca que cancelará el muro fronterizo y anunciará un proyecto de ley que abrirá un camino hacia la ciudadanía para miles de migrantes que se encuentran en EE.UU. de manera ilegal.
Entre sus iniciativas sobre el tema, también firmará 15 decretos ejecutivos, de los cuales seis se encargarán de la migración. Sus acciones involucran el levantamiento de las prohibiciones de viajes de algunos países como los musulmanes y revertir la orden del expresidente que impide que los migrantes que viven en EE.UU. sean contabilizados cuando los distritos electorales del Congreso sean redefinidos.
Por si fuera poco, Biden se encargará de firmar un memorando que ordenará al Departamento de Seguridad Nacional y al fiscal general que preserve el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), que protege a los migrantes que llegaron al país cuando eran menores de la deportación.
3. Adiós a la supremacía blanca
Se conoce como «supremacía blanca» a una creencia que sostiene que las personas blancas son superiores en muchos sentidos a las personas que pertenecen a otras etnias por lo que los blancos deben dominarlas. Esta se enmarca en los movimientos de extrema derecha.
La política de Biden considera, al contrario de Trump, que esta creencia debería eliminarse, por lo que durante su discurso inaugural como presidente de EE.UU prometió terminar con dicha ideología.
Estados Unidos enfrenta el surgimiento del extremismo político, la supremacía blanca, el terrorismo doméstico, que es algo que debemos confrontar y que vamos a derrotar.
Joe Biden, presidente de Estados Unidos.
Cabe destacar que algunos rasgos característicos de la supermacia blanca y nueva extrema derecha son:
- Diversidad: La extrema derecha se configura a través de la suma de una multitud de grupos, con distintos centros de atención, agravios percibidos o alegados y reivindicaciones.
- Teorías de la conspiración: Se apoyan en la existencia de grandes conspiraciones judías, comunistas o que buscan un nuevo orden mundial.
- Inmigración: Los inmigrantes son percibidos como una amenaza. De un lado se alude a que limitan las posibilidades de empleo, de otro, que al ofrecerse a desempeñar funciones a menor coste que los ciudadanos nacionales reducen las posibilidades y la calidad de vida de estos últimos, además de beneficiarse de los sistemas de seguridad social.
El 20 de enero Biden y Harris sembraron grandes expectativas de un cambio en la historia de Estados Unidos, país que puede ser el ejemplo para el resto. ¿Estaremos ante una nueva era que dejará de lado pensamientos retrógradas?
«Kamala Harris» by Gage Skidmore is licensed under CC BY-SA 2.0
«Joe Biden» by Gage Skidmore is licensed under CC BY-SA 2.0
«Donald Trump» by Gage Skidmore is licensed under CC BY-SA 2.0