Sin una empresa tiene una gran cultura o geniales estrategias de comunicación de RSE, no sirve de nada cuando estas estrategias no están totalmente alineadas con lo que es la marca y lo que sus stakeholders pueden experimentar día a día. La autenticidad es uno de los valores más buscados pero uno de los más difíciles de lograr para las compañías, porque se necesita una congruencia total entre lo que se dice y lo que se hace. Aquí cuatro cosas que hacen las empresas que son exitosas en este sentido:
1. Reconocen que la cultura puede y debe cambiar:
Una cultura poderosa no es estática. Muchas veces las empresas creen que su cultura es fuerte porque la han nutrido desde su fundación. Pero las estrategias cambian y la cultura debe cambiar. Por ejemplo, los cambios en la sociedad demandan que actualmente las compañías le den más importancia a la colaboración que al individualismo, lo cual permite cumplir más fácilmente con las demandas de los clientes.
2. Enseñan a otros a ser arquitectos de la cultura:
Los líderes deben saber cuál es la cultura de la empresa, así como cómo construirla. A pesar de la importancia de este punto, pocas compañías lo inculyen en sus programas de desarrollo de liderazgo, creyendo que la persona encargada de los recursos humanos puede sola con la responsabilidad de lograr la cultura deseada, cuando debería ser una tarea compartida con todos los líderes.
3. Van más allá de los valores básicos:
Tres palabras escritas en la pared y en los materiales de marketing no significan que hay un entendimiento compartido de la cultura. El propósito viene de la conversación honesta y de los comportamientos diarios, los cuales significan que los valores realmente se viven. La cultura va más allá de los calores valores básicos, hacia la experiencia diaria de todo el equipo.
4. No le dan prioridad a las habilidades:
La cultura de la organización debe ser el punto de partido para diseñar el entrenamiento y desarrollo, para después, sobre esta base, evaluar las habilidades. De la misma forma en la que un proceso de contratación le envía un mensaje al candidato sobre la organización, las experiencias de capacitación envían un mensaje sobre lo que la compañía realmente valora y necesita.
Cuando todos los miembros de una empresa tienen un entendimiento común sobre la cultura y sus metas, y por qué es importante para su éxito personal y el de la compañía, las personas pueden tomar más riesgos, ser más creativas y tomar decisiones.
Fuente:
Harvard Business Review
