Se han escrito volúmenes sobre la generación Y o del milenio y sus diferencias con sus predecesoras. Sabemos que los jóvenes millenials nacieron entre 1977 y 1988, y que son los primeros que adoptaron la tecnología como niño o jóvenes, pero también hay características que asumimos como ciertas y no lo son.
Para una empresa, es vital conocer bien a esta demografía, ya que se trata de las personas que están comenzando a avanzar dentro del mercado laboral. Para hacerlo, antes hay que disipar algunos mitos
Son muy diferentes a como tú eras a su edad:
Si eres de una generación anterior, seguramente ves a los jóvenes de hoy y piensas que no te pareces a ellos, pero esto es simplemente porque la gente mayor no se parece a la más joven. Sin embargo, si nos fijamos en los datos duros, esto cambia: según un estudio de la universidad estatal de San Diego, que analizó las actitudes de personas de la misma edad en distintas décadas, los cambios en la forma de ver el trabajo son menores.
Quieren un trabajo con propósito:
Según este mismo estudio, y contrario a la creencia popular, los millenials no se inclinan más por «valores de altruismo en el trabajo» que las generaciones anteriores. Lo que es más: los jóvenes tienen menos posibilidades de haber donado a la caridad y tienen menos deseos de trabajar en alguna organización de servicio social.
Pero esto no significa que las empresas que impulsan el voluntariado corporativo estén en un error, sino que este tipo de trabajo altruista es valorado por todos los empleados, sin importar en la edad.
Quieren más balance entre sus trabajo y su vida personal
Esta afirmación es parcialmente cierta, ya que el estudio muestra que los miembros de esta generación valoran ligeramente más un balance entre la vida laboral y la personal: casi el doble de los jóvenes en 2006 mencionaron que tener más de dos semanas de vacaciones en su trabajo es «más importante», en comparación a las respuestas de 1976.
Pero este cambio no es tan significativo estadísticamente, y es probable que los jefes hayan olvidado que cuando ellos tenían 22 años, también les parecía importante salir temprano del trabajo para hacer otras actividades.
Necesitan un «tratamiento especial»:
Gestionar a personas de acuerdo con su edad no funciona bien, ya que hay muchas otras características que influyen más en su forma de trabajo: sus antecedentes, su raza, su género, etc. En lugar de tratar a todos los millenials igual, intenta conocer a todos de forma individual, recordando que algunos de sus rasgos de personalidad se deben a la edad, pero otros tienen causas variadas.
Recuerda también que la diversidad incluye a la edad, y que es inteligente tener a personas de diferentes generaciones en un mismo equipo, ya que no se ven como competencia y se ayudan unos a otros.
Fuente:
Harvard Business Review