ESG es un acrónimo que significa Environmental, Social, and Governance (Medioambiental, Social y Gobernanza). Es un conjunto de criterios que las empresas, organizaciones e inversores utilizan para evaluar el impacto de sus actividades en el medioambiente, la sociedad y su gestión corporativa. Los criterios de adaptación de ESG tienen como propósito fortalecer la confianza de inversores, especialmente aquellos que buscan oportunidades sostenibles. El enfoque ESG trae grandes beneficios, ya que ayuda a las instituciones financieras a priorizar proyectos con el propósito de aumentar el acceso a mejores inversiones y con ello, un mejor capital.
Aquellas empresas que incorporan estos criterios a su estructura proyectan un compromiso ético y sostenible, lo que mejora su reputación ante clientes, socios y comunidades. Al mismo tiempo, puede abrir oportunidades en mercados sostenibles y con consumidores conscientes. Su adaptación consciente promueve el desarrollo sostenible, protegiendo el medioambiente y mejorando el bienestar social.
De acuerdo con el informe de McKinsey Quarterly, la inversión orientada a los factores ESG ha experimentado un ascenso meteórico. La inversión sostenible global ya supera los 30 billones de dólares, un 68 por ciento más que en 2014 y diez veces más que en 2004. La aceleración ha sido impulsada por una mayor atención social, gubernamental y de los consumidores al impacto más amplio de las corporaciones, así como por los inversionistas y ejecutivos que se dan cuenta de que una propuesta ESG sólida puede salvaguardar el éxito a largo plazo de una empresa. En este sentido, te presentamos 5 beneficios de ESG para el crecimiento empresarial ¡Sigue leyendo!
5 beneficios de ESG
1.- Crecimiento de ingresos
Una sólida propuesta ESG ayuda a las empresas a acceder a nuevos mercados y expandirse a los existentes. Cuando las autoridades gubernamentales confían en los actores corporativos, es más probable que les otorguen el acceso, las aprobaciones y las licencias que brindan nuevas oportunidades de crecimiento.
Se ha concluido que las empresas con actividades de compromiso social son percibidas como beneficiosas por los actores sociales y públicos tienen más facilidad para extraer esos recursos, sin necesidad de una planificación extensa ni demoras operativas. Estas empresas lograron valoraciones demostrablemente más altas que sus competidoras con un capital social más bajo.
Los beneficios de ESG son reales. Por ejemplo, cuando Unilever desarrolló Sunlight, una marca de líquido lavavajillas que utilizaba mucha menos agua que sus otras marcas, las ventas de Sunlight y de otros productos de ahorro de agua de Unilever superaron el crecimiento de la categoría en más de un 20% en varios mercados con escasez de agua. Y la finlandesa Nestlé, fundada como una empresa tradicional de refinación de petróleo hace más de 70 años, genera ahora más de dos tercios de sus ganancias a partir de combustibles renovables y productos relacionados con la sostenibilidad.
2.- Reducción de costos
La implementación eficaz de criterios ESG puede ayudar a combatir el aumento de los gastos operativos (como los costos de las materias primas y el costo real del agua o el carbono), que, según la investigación de McKinsey, pueden afectar las ganancias operativas hasta en un 60%. En el mismo informe se crearon métricas (la cantidad de energía, agua y desechos utilizados en relación con los ingresos) para analizar la eficiencia relativa de los recursos de las empresas dentro de varios sectores y encontraron una correlación significativa entre la eficiencia de los recursos y el desempeño financiero.
Un ejemplo concreto es el caso de 3M, que ha comprendido desde hace mucho tiempo que ser proactivo en relación con el riesgo ambiental puede ser una fuente de ventaja competitiva. La empresa ha ahorrado 2.200 millones de dólares desde que introdujo su programa “prevenir la contaminación es rentable” (3Ps), en 1975, previniendo la contaminación desde el principio reformulando productos, mejorando los procesos de fabricación, rediseñando equipos y reciclando y reutilizando los desechos de producción. FedEx, por su parte, tiene como objetivo convertir toda su flota de 35.000 vehículos a motores eléctricos o híbridos; hasta la fecha, se ha convertido el 20% lo que ya ha reducido el consumo de combustible en más de 50 millones de galones.
3.- Reducción de las intervenciones regulatorias y jurídicas
Una propuesta de valor externo más sólida puede permitir a las empresas lograr una mayor libertad
estratégica, aliviando la presión regulatoria. De hecho, en muchos casos, en distintos sectores y geografías, hemos visto que la solidez de los criterios ESG trae beneficios como reducir el riesgo de que las empresas sufran acciones gubernamentales adversas. También puede generar apoyo gubernamental.
El valor en juego puede ser mayor de lo que se piensa. En muchas industrias, una gran parte de las ganancias corporativas están en juego gracias a la participación externa. Por ejemplo, subsidios gubernamentales, regulación de energías renovables y regulación de emisiones de carbono.
4.- Aumento de la productividad de los empleados
Una propuesta ESG sólida puede ayudar a las empresas a atraer y retener a empleados de calidad, mejorar la motivación de los empleados inculcándoles un sentido de propósito y aumentar la productividad en general. La satisfacción de los empleados está correlacionada positivamente con los retornos para los accionistas. Por ejemplo, Alex Edmans, de la London Business School, descubrió que las empresas que se alinearon a estas estrategias salieron rankeadas en la lista de las “100 mejores empresas para trabajar” y generaron retornos de acciones entre un 2,3% y un 3,8% más altos por año que sus pares durante un horizonte de más de 25 años.
Estudios recientes también han demostrado que el impacto social positivo se correlaciona con una mayor satisfacción laboral, y los experimentos de campo sugieren que cuando las empresas “devuelven” sus esfuerzos, los empleados reaccionan con entusiasmo. Por ejemplo, los empleados seleccionados al azar de un banco australiano que recibieron bonificaciones en forma de pagos de la empresa a organizaciones benéficas locales manifestaron una mayor y más inmediata satisfacción laboral que sus colegas que no fueron seleccionados para el programa de donaciones.
5.- Inversión y optimización de activos
Una propuesta ESG sólida puede mejorar la rentabilidad de las inversiones al asignar capital a
oportunidades más prometedoras y sostenibles, por ejemplo, energías renovables, reducción de
residuos y depuradores. También puede ayudar a las empresas a evitar inversiones estancadas que
pueden no dar resultados debido a problemas ambientales a largo plazo (como depreciaciones
masivas en el valor de los petroleros). Para tener en cuenta adecuadamente la
rentabilidad de las inversiones, es necesario partir de una base adecuada.
Si bien las inversiones necesarias para actualizar sus operaciones pueden ser sustanciales, elegir esperar puede ser la opción más cara de todas. Las reglas del juego están cambiando: las respuestas regulatorias a las emisiones probablemente afectarán los costos de la energía y podrían afectar especialmente los balances de las industrias con uso intensivo de carbono. Y las prohibiciones o limitaciones a cosas como los plásticos de un solo uso o los automóviles propulsados por diésel en los centros urbanos introducirán nuevas restricciones en múltiples empresas, muchas de las cuales podrían verse en la necesidad de ponerse al día.