De acuerdo con Daniel Lim, director sénior y miembro de Inteligencia Artificial en el World Economic Forum, a medida que las nuevas tecnologías, como la inteligencia artificial (IA), la computación cuántica y los sistemas complejos se generalicen al igual que sus usos prácticos, se crearán innumerables oportunidades de negocio.
Con demasiada frecuencia, la tecnología puede tener implicaciones no deseadas; el software de reconocimiento facial utilizado de forma inadecuada, o los datos de los clientes vendidos con fines de lucro sin el conocimiento del usuario, pueden crear un entorno de desconfianza entre los fabricantes, vendedores y compradores.
Asuntos de confianza
Una investigación realizada por Edelman muestra que el 66% de las personas se preocupa porque la tecnología haga imposible saber si lo que están viendo o escuchando es real. Los consumidores también creen que la privacidad de los datos es crítica. Según la investigación de Deloitte, el 53% de los consumidores globales encuestados nunca utilizarían los productos de una compañía si sus datos se venden con fines de lucro.
Comportarse éticamente es importante cuando se crea un valor sostenible.
De hecho, el concepto de capitalismo de las partes interesadas nació de la idea de que las empresas pueden crear un valor duradero para la sociedad alineando sus prácticas con las necesidades de todas las partes interesadas, incluida la comunidad en general.
La ética añade valor
El uso ético de la tecnología permite a las empresas crear confianza y aprovechar las oportunidades, al tiempo que se mitigan los posibles daños. Considerar la ética de cómo se utilizan las tecnologías no es sólo una discusión filosófica o una cuestión de cumplimiento legal.
Las organizaciones están aprendiendo que los lapsus éticos relacionados con el desarrollo, el despliegue y la adopción de tecnología pueden ser costosos, y que los compradores y en algunos casos, los reguladores están convirtiendo sus preocupaciones en acciones a través de boicots de consumidores.
En un informe publicado por el Foro Económico Mundial en colaboración con Deloitte y el Centro Markkula de Ética Aplicada de la Universidad de Santa Clara, titulado » Ethics by Design – An Organizational Approach to Responsible Use of Technology«, se examinó cómo las organizaciones que incorporan con éxito la ética en su uso de la tecnología están creando empresas más fuertes y sostenibles que benefician tanto al balance final como a la sociedad en su conjunto.
Se encontraron cinco rasgos compartidos por organizaciones que utilizan la tecnología de manera ética y están dispuestas a considerar el daño potencial a los seres humanos y a la humanidad como parte de su proceso de toma de decisiones. Te los compartimos a continuación.
5 cualidades de las organizaciones que usan la tecnología con responsabilidad
1. Conocimiento técnico
Las deliberaciones éticas suelen comenzar con los principios y valores de la sociedad (por ejemplo, los derechos humanos, la equidad, etc.). Sin embargo, para evaluar plenamente las repercusiones de una nueva tecnología es necesario que una parte de la fuerza de trabajo de una organización tenga una sólida comprensión de los conceptos tecnológicos fundamentales.
La combinación de conocimientos técnicos con voces de diversos orígenes proporciona a las organizaciones una vía para considerar el impacto de la tecnología que están utilizando. Los encargados de la adopción de decisiones deben saber qué hace la tecnología de su organización y cómo funciona.
2. Responsabilidad Social (RS)
Las organizaciones que incorporan con éxito la ética en todo su uso de la tecnología —las corrientes de trabajo y la toma de decisiones— son las que amplían su conciencia y aceptación del papel de la empresa en la sociedad más allá de las transacciones económicas. Estas organizaciones se comprometen con empresas socialmente responsables, asumen deberes sociales y se hacen responsables de sus actos.
3. Fundación de la confianza
Estas organizaciones son conocidas por crear culturas corporativas que generan confianza entre los compañeros de trabajo y los clientes. Lo logran honrando las preocupaciones éticas y los argumentos morales de todos los individuos, en situaciones en que los afectan o en las que tienen experiencia.
4. Deliberación ética
Las organizaciones que se destacan en la aplicación de la ética a la tecnología tienen un enfoque deliberado de la toma de decisiones y la formulación de políticas:
- Se basan en gran medida en datos.
- involucran a las personas que se verán afectadas por sus decisiones.
- tienen en cuenta los efectos posteriores de sus decisiones.
- Comparten el pensamiento que subyace a esas decisiones.
Al hacer participar a los interesados, a menudo se logra un consenso sobre el curso de acción correcto.
5. Compromiso de liderazgo
El patrocinio ejecutivo es esencial para el uso responsable de la tecnología. La rápida innovación tecnológica crea nuevas oportunidades y riesgos para la sociedad. Los líderes que desarrollan una práctica de modelo de liderazgo ético y enseñan empatía; crean un fuerte sentido de comunidad internamente; se adhieren a la ética profesional; y son pensadores en sistemas tienen más probabilidades de crear una mentalidad de crecimiento en la cultura de su organización y de fomentar un comportamiento ético. La deliberación ética requiere un aprendizaje constante e iterativo.
Con la introducción de tecnologías disruptivas a una velocidad vertiginosa, es esencial que las organizaciones se adelanten a las preocupaciones éticas. El fomento de una cultura basada en la ética requiere no sólo un entorno de apoyo, sino una estructura que garantice que los valores humanos se tengan en cuenta en todas las decisiones tecnológicas.
En el informe se detallan las medidas y recomendaciones que las organizaciones pueden adoptar para infundir la ética tecnológica en las operaciones mediante el uso de conceptos de economía del comportamiento, facultando a las personas de toda la organización para tomar decisiones que redunden en beneficio no sólo de la empresa sino de la sociedad en su conjunto.