Recientemente se ha publicado mucha información sobre alimentos denominados superfoods o en español superalimentos. Este término se utiliza para agrupar alimentos que se consideran altos en ciertos nutrimentos y cuya función ayuda a la prevención de enfermedades y favorece la salud. ¿Pero cuál es la evidencia científica detrás de estas afirmaciones? ¿Necesitamos consumir altas cantidades de ellos para obtener los beneficios?
Aún no hay una definición oficial o técnica de superalimentos. Sin embargo, el diccionario Oxford de Reino Unido indica que son alimentos ricos en nutrimentos que se consideran especialmente beneficiosos para la salud y el bienestar.
En términos sencillos, un superalimento puede ser un alimento de cualquier grupo: fruta, verdura, cereal, leguminosa o alimento de origen animal; que aporta beneficios extra o adicionales para la prevención de enfermedades.
Este tipo de afirmaciones hacia ciertos alimentos, provienen de investigaciones científicas sobre el contenido y sus nutrimentos. A continuación te mostramos una lista de los 5 principales que se consideran como superalimentos.
1.- Arándanos y granada, por su alto contenido en antioxidantes que protegen a las células del daño causado por el estrés oxidativo y agentes contaminantes.
2.- Salmón, debido a su alto contenido en omega 3 que protege la salud cardiovascular.
3.-Aguacate, almendras y pistaches, ubicados dentro de la gama de grasas buenas que proporcionan energía al cuerpo y cerebro.
4.- Semillas como chía y linaza aportan fibra y ácidos grasos esenciales y ayudan a mejorar los niveles de colesterol.
5.- Lentejas y frijoles de soya por su contenido de fibra, folato y aminoácidos.
Algunos superalimentos son relativamente nuevos o de importación, por lo que su costo puede ser alto en comparación con productos tradicionales. Afortunadamente los alimentos cotidianos también nos proporcionan nutrimentos indispensables para la salud, por ejemplo:
- Los cereales integrales como el salvado de trigo, la avena o el arroz contienen fibra y prebióticos que ayudan a prevenir enfermedades del sistema digestivo.
- Los pescados, aún enlatados o congelados, son fuente de Omega 3 y 6, como el atún y las sardinas. Además, los charales se consideran excelente fuente de calcio.
- Las verduras y frutas de temporada como las manzanas o las zanahorias tienen altos contenidos de vitaminas, minerales y fibra.
- Las grasas de origen vegetal como el aguacate y las nueces, aportan grasas saludables para el corazón y son de fácil adquisición en toda Latinoamérica.
Aunque es innegable que hay alimentos que tienen propiedades que nos ayudan a estar más saludables, los nutriólogos recomiendan no caer en los excesos. Lo importante es tomar este tipo de información como un recordatorio de la variedad de opciones en el mercado e incluirlos a nuestra dieta puede traer beneficios específicos si se consumen en la justa proporción.
Fuente: INSK