Piensa en cuánta ropa tienes en tu armario, considera tus zapatos, tus accesorios y las características de cada uno de ellos y recuerda por qué los adquiriste. Seguramente cuando viste estas prendas en la tienda realmente te enamoraste de su diseño, aunque es probable que en más de una ocasión haya pasado mucho tiempo antes de que estrenaras una en específico. Más allá de las implicaciones sociales y ecológicas de este modelo de consumo ¿sabes cuántos enemigos de tu salud se ocultan dentro de tu clóset?
Ten cuidado con tus accesorios
Aún cuando podrían parecer inofensivos, lo aretes o piercings pueden provocar infecciones bacterianas. De acuerdo con dermatólogos de la Universidad de Northwestern, en Illinois, el 20% de las perforaciones las presentan y una mala elección de la zona a perforar puede también incrementar el riesgo de contagio incluso de enfermedades como el VIH, la hepatitis y algunas reacciones alérgicas.
Adicionalmente, los aretes muy pesados pueden desgarrar el tejido del lóbulo de la oreja.
Elige bien tu ropa íntima
Si eres de las chicas que usa pantaletas estilo tanga, debes tener mucho cuidado, ya que el uso cotidiano de estas prendas puede causar irritación y lesiones vaginales, hemorroides e infecciones serias.
El tejido de la ropa, en conjunto con la transpiración de tu zona íntima, puede generar hongos vaginales o candidiasis, padecimientos que se han incrementado en los últimos años, por lo que los médicos recomiendan limitar el uso de estas prendas, especialmente en verano, y preferir aquellas hechas con algodón.
¿Qué tan ajustados son tus jeans?
Las mujeres que visten con jeans extremadamente ajustados para lucir más sexis pueden estar atentando contra su cuerpo de forma verdaderamente violenta, y es que el efecto de compresión que estos ejercen sobre la cintura y las piernas puede causar serios daños en su organismo.
Los problemas de circulación y adormecimiento de piernas, son algunos de los padecimientos más comunes. Sin embargo, estos pueden llegar a comprimir el nervio cutáneo femoral generando una meralgia parestésica, que se caracteriza principalmente por entumecimiento y dolor en los muslos.
De acuerdo con información de CNN, los dolores abdominales y el ardor en el estómago pueden presentarse también como consecuencia de estas prendas.
Tus zapatos favoritos pueden ser tu peor enemigo
Esos tacones que te enamoraron a primera vista pueden convertirse en el peor enemigo de tu espalda, pues aún cuando te hagan sentir más alta y elegante, son la razón de que las mujeres padezcan cuatro veces más problemas en los pies que los hombres, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Auburn.
Dolores y malformaciones en las rodillas, la cadera y los tobillos, son algunas de las consecuencias de este tipo de calzado, por lo que se recomienda limitar su uso y elegir zapatos más cómodos y con mayor soporte.
Los hombres no están exentos
Si después de esto crees que las mujeres son las únicas que sufren a consecuencia de la moda, estás muy equivocado: los hombres también tienen enemigos ocultos en su armario y una prueba de ello son las corbatas.
El 67% de los hombres compra camisas que son más pequeñas que sus cuellos o utilizan corbatas muy ajustadas, lo que afecta la circulación de la sangre al cerebro, provoca fuertes dolores de cabeza e incrementa la tensión muscular.