Desde que descubrimos que el acelerado ritmo de vida actual puede afectar la salud de las personas y su desempeño laboral, los medios de comunicación parecen haberse llenado de artículos con consejos para reducir el estrés, evitar el síndrome de burnout y vivir de una forma mucho más relajada.
Empresas y organizaciones han emprendido diversos esfuerzos por prevenir estos problemas entre sus trabajadores y estimular su nivel de satisfacción; de ahí el nacimiento de las políticas de horarios flexibles, vacaciones ilimitadas y otras prácticas que a todos nos gustaría que fueran adoptadas en nuestros centros de trabajo.
Por otro lado, también es cierto que sin importar el número de días de vacaciones que hayas podido tomar, una vez que vuelves a la oficina tu cabeza se llena nuevamente con pendientes, fechas de entrega y nuevos proyectos, por lo que es difícil evitar el estrés durante mucho tiempo más. Es por ello que la integración de programas de mindfulness o atención plena se ha vuelto una práctica común dentro de las organizaciones que se preocupan por el bienestar de sus colaboradores.
Empresas como Google, Intel y General Mills ya han comenzado a trabajar con esta técnica, ofreciendo a sus colaboradores cursos especializados de forma constante e integrando actividades que los ayudan a mejorar su concentración. Sin embargo, no todas las compañías cuentan con los recursos necesarios para ello, por lo que a continuación hemos identificado algunas prácticas que pueden adoptarse con facilidad para aprovechar el mindfulness y mejorar la calidad de vida de tus trabajadores.
1. Respiración consciente
Enseña a tus colaboradores a tomar descansos periódicos de un par de minutos a lo largo de su jornada de trabajo para realizar un ejercicio de respiración consciente. Es decir, centrar toda su atención en la forma en que el aire entra y sale de su cuerpo. Esto ayudará a que la maraña de ideas en su cabeza desaparezca, permitiéndole concentrarse en cada una de forma mucho más ordenada.
2. Caminatas al aire libre
Además de ser una excelente oportunidad para poner este ejercicio en práctica y realizarlo mejor al interior de la oficina, las caminatas al aire libre constituyen una alternativa sencilla para integrar el mindfulness a las prácticas de RSE de una organización, ya que ponen a los trabajadores en contacto con la naturaleza y consigo mismos.
Para ello, las personas deben centrarse únicamente en el acto de caminar, el movimiento de sus piernas, el contacto de sus pies con el suelo y lo que existe en su entorno, como el sol, la brisa, y los sonidos ambientales. Esto ayudará a relajar su estado de ánimo y apagar la corriente interminable de pensamientos que generalmente se encuentra en su cabeza.
3. Pensamientos dirigidos
Promueve que los miembros de tu equipo sean conscientes de su propio cuerpo, la postura que adoptan en su silla, la forma en que eso los hace sentir y la forma en la que el estrés se manifiesta a nivel físico. Esto ayudará a que sepan identificar el momento oportuno de tomar un descanso y les permitirá ser más productivos, ya que no tendrán que lidiar con el dolor de cabeza o espalda cada vez que se sienten frente a su computadora.
4. Espacios positivos
Impulsa a tus colaboradores a repetirse algo positivo sobre ellos mismos varias veces al día. Puedes comenzar por colocar una frase con su mejor cualidad a la vista dentro de su espacio de trabajo; elige un mensaje corto y siempre redactado en positivo. Es decir, en lugar de escribir «nunca llegas tarde», coloca «eres puntual todos los días».
Este ejercicio les ayudará no sólo a sentirse reconocidos, sino a sentir un mayor control sobre sus actividades diarias. Además, la frase correcta también ayudará a incrementar su nivel de confianza.
5. Estrés interrumpido
Aprende a identificar el momento en el que tu equipo se siente demasiado abrumado, ya que es justo cuando debes poner en práctica la atención plena. Impúlsalos a dejar de hacer lo que están haciendo por un par de minutos y permitir que sus pensamientos viajen a su técnica de minfulness favorita: respiración consciente, caminata, pensamientos positivos o sensaciones corporales.
Unos pocos minutos pueden hacer gran diferencia para aquietar su mente, mejorar su desempeño y permitirles alcanzar resultados óptimos, al tiempo que incrementa su satisfacción laboral.