Te encuentras en la oficina un día cumpliendo con tus responsabilidades, convives con las mismas personas que en algún momento comenzaron a parecerte tóxicas y repentinamente te descubres a ti mismo quejándote de nuevo porque consideras que tu jefe no es para nada un buen líder. Aceptémoslo: la realidad es que no estás tan satisfecho con tu trabajo como querrías.
Probablemente al principio intentarás negarlo, te mostrarás enojado y culparás a todos los elementos externos que te sea posible. Sí, es muy posible que la organización para la que colaboras deba implementar mejores prácticas para incrementar el nivel de satisfacción laboral de sus colaboradores, pero ¿cuál es realmente la razón por la que ya no te sientes feliz con el trabajo que realizas?
De acuerdo con datos del portal Entrepreneur, 52.3% de las personas espera más de su trabajo actual. Alp Mimaroglu ha identificado algunas de las posibles razones de este problema con el fin de ayudar a quienes lo enfrentan a encontrar la raíz del mismo y sus posibles soluciones.
Pregúntate si eres bueno en tu trabajo y responde con tanta honestidad como sea posible, luego cuestiónate a ti mismo sobre cuánta pasión sientes realmente por las actividades que realizas día con día. Si la respuesta es negativa para cualquiera de estas preguntas, la frustración puede ser la razón por la que no eres feliz en tu empleo actual.
La solución puede ser buscar una mejor capacitación, encontrar un nuevo empleo o esforzarte por encontrar el propósito en tu trabajo actual a fin de romper con este sentimiento negativo.
Llegar a un punto en el que tu trabajo te parece aburrido es normal, especialmente si se trata de una labor rutinaria; esto no es especialmente negativo, pero si te descubres tratando de encontrar razones para alejarte de tu escritorio o formas de matar el tiempo, es una importante señal de alerta.
Esto no necesariamente quiere decir que no tienes actividades pendientes: estar ocupado no significa que sea imposible aburrirse. La vida se trata de aprender, mejorar y cambiar, no de estancarse, así que es necesario buscar nuevos retos de forma constante.
Acercarte a tu jefe para manifestar tus inquietudes puede ser una excelente solución, sobre todo si es un líder dispuesto a escuchar.
Así como a lo largo de nuestra vida laboral nos encontramos con diferentes tipos de jefes y distintas compañías, también llegamos a convivir con una gran cantidad de compañeros de trabajo que tienen habilidades y actitudes sumamente diversas.
Desde luego, no con todos podemos entablar una relación de amistad, pero sí necesitaremos aprender a convivir y trabajar de forma cordial por el bien de los resultados laborales y con el fin de generar un mejor ambiente organizacional.
Aun si tienes un salario competitivo, compañeros agradables y un empleo que te agrada puedes sentir inseguridad sobre el progreso o el futuro de tu carrera. Tal vez hayas comenzado a tener mayores responsabilidades y continúes ganando lo mismo o sientes que tu trabajo es poco reconocido al interior de la organización. En cualquier caso, te cuesta trabajo mantenerte optimista.
Es probable que la labor que realizas a diario no te permita desarrollar y explotar todas tus habilidades; al mismo tiempo tu jefe podría no estar notando que puedes asumir responsabilidades distintas. Si es así, no dejes que no que haces actualmente limite tu desarrollo, manifiesta tus inquietudes y encuentra áreas de oportunidad que te permitan generar valor para la organización.