Como cada año, la Marcha del Orgullo Gay 2018 se realizó en la Ciudad de México en donde acudieron más de 250 mil personas. Todos ellos con un fin: celebrar la libertad, la diversidad y el logro de los derechos obtenidos en la Ciudad de México.
Sin embargo, no todo es celebración. Todavía hay algunas personas que ocultan su orientación sexual con el fin de conservar su trabajo y no ser despedido o sancionado.
De acuerdo con la encuesta Diversidad y Talento LGBTTTI en México, que fue elaborada por la Alianza por la Diversidad e Inclusión Laboral (ADIL), revela que el 54% de las personas de la comunidad oculta su orientación sexual o identidad de género en el trabajo por temor a la discriminación o algún otro tipo de represalia.
Ellos, temen ser despedidos o sancionados y por ello prefieren ocultar su orientación sexual.
Por si fuera poco, los resultados también dicen que las personas trans son el sector más grande de la comunidad que carece de empleo y que 39.5% se encuentra buscando uno. Únicamente el 29.1% tiene un empleo formal y el 31.4% no tiene pero tampoco lo busca.
A pesar de los avances en inclusión dentro de las empresas, todavía existe una cifra enorme dentro de la comunidad LGBT, quienes enfrentan más obstáculos para poder obtener un trabajo digno y remunerado.
Es probable que una persona que desde niño se identificaba como trans, haya sufrido violencia y discriminación durante toda su etapa de crecimiento y educación.
A pesar de los avances en inclusión dentro de las empresas, todavía existe una cifra enorme dentro de la comunidad LGBT, quienes enfrentan más obstáculos para poder obtener un trabajo digno y remunerado.
De acuerdo con un informe llamado Violencia contra personas Lesbianas, Gay, Bisexuales, Trans e Intersex en América, lanzado en 2015, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dijo que la «violencia, los prejuicios y la discriminación prevalentes en la sociedad en general, y, en el interior de la familia, disminuyen las posibilidades de las mujeres trans de acceder a la educación, servicios de salud, albergues seguros y mercado laboral formal. Situación que también genera mayor susceptibilidad de las personas trans a diferentes tipos de violencia».
En México, uno de cada diez casos de discriminación laboral, recibidos entre 2011 a 2017, tuvieron como origen la orientación sexual o la identidad de género, según datos del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred).
Ocultar orientación sexual en el trabajo
Es importante que exista diversidad e inclusión en las empresas, ya que esto además de generar una buena reputación de las organizaciones, tendrán un personal más productivo y con más fidelidad a la firma.
«Cuando las personas tienen que fingir algo que no son y viven con el miedo a ser juzgados, discriminados y no incluidos se generar caídas de productividad, falta de amor a la camiseta y rotación de personal», dijo Francisco Robledo, socio fundador y director de ADIL.
En el mercado laboral, las personas de la comunidad LBGT son las más vulnerables, por ello la marcha 2018 definió como objetivo principal el fortalecer la visión de diversidad e inclusión en el trabajo.
La comunidad, se desarrolla en empresas privadas con 61.3% según ADIL. En el sector público se encuentra 23.8% mientras que en la economía del tercer sector, como asociaciones y fundaciones, trabaja 4.6%. Únicamente el 8.3% se ocupa en el sector informal.
Para aumentar la cantidad de miembros de la comunidad LGBT en el mercado laboral, es necesario que las empresas tengan políticas de inclusión y diversidad, además de que sus políticas no sean discriminatorias.
Por ello Robledo dice que «las empresas desde sus códigos de ética carecen de políticas de no discriminación, entonces, cuando no esta clara la relación entre empleador y empleado, y entre iguales, es muy difícil que exista confianza para dar pasos hacia adelante».
En México se entregó una certificación llamada HRC Equidad MX 2018 a 32 empresas, entre ellas Walmart y Petróleos Mexicanos (Pemex).
La finalidad de esta certificación es que las empresas tengan una mayor comunicación y trabajen con cada colaborador para lograr una sociedad incluyente. Para su obtención, es necesario cubrir tres puntos importantes:
- Políticas de no discriminación, claras y por escrito. Ellas deben hablar de orientación, identidad de genero y expresión de género.
- Compromiso institucional y responsable de velar por el cumplimiento de estas políticas y su puesta en marcha.
- Compromiso social y visibilidad pública que se puede dividir en acciones de mercadotecnia, filantropía y atracción de talento.
A pesar de los avances que se han logrado para la comunidad LGBT, todavía falta mucho por hacer. Sin embargo, es tarea de las empresas incluir a los miembros de la comunidad y ser más diversos e inclusivos.