Por Kenya Giovanini
¿Has notado que durante el día experimentamos diferentes climas?
Seguramente cuando sales de tu casa el cielo esta nublado y hace demasiado frío; al medio día, el sol se hace presente con un calor intenso y por la tarde, la lluvia se apodera se la ciudad.
Estos cambios tan extremistas son consecuencia del cambio climático y aunque parezca increíble, aún existen muchas personas que piensan que la crisis ambiental es un mito o una conspiración.
¡La crisis ambiental no es una leyenda! Actualmente este fenómeno está provocando la extinción de miles de animales, plantas y los diversos ecosistemas; incluso el chocolate, la cerveza y tu trabajo pueden verse afectados por esta crisis.
Es por esto que debemos actuar rápido e intentar reparar todo el daño que las industrias y la sociedad le han hecho al ambiente, ¿cómo? Educando a chicos y grandes, fomentando la cultura del reciclaje y adoptando prácticas responsables con nuestro planeta.
Y si no les quieres dejar a las futuras generaciones, un mundo como el de la película WALL·E, es momento de comenzar a inculcar el respeto por el medio ambiente.
Si no sabes por dónde empezar… te compartimos seis consejos que no sólo les servirán a los más peques del hogar, también a los más grandes.
1-. Mantente actualizado sobre el cambio climático
Comparte con ellos todos los datos posibles. Los medios digitales están plagados con información valiosa sobre el cambio climático y las miles de iniciativas que las empresas, las industrias y la sociedad están haciendo para reducir su huella.
Fomenta el interés por cuidar el medio ambiente a través de imágenes o documentales que les ayudarán a entender más sobre la situación del planeta.
No se trata de saturarlos ni de transformarlos en activistas extremistas, sino fomentar la cultura por el reciclaje, la reutilización y el cuidado hacia todo ser vivo.
2-. Haz que valoren cada gota que utilizan
Traten de reducir el consumo de agua en sus actividades. Aprovechen el agua de la lluvia o utilicen una cubeta para recolectar el agua fría que sale de la regadera.
¡Cuidar de los recursos es algo importante!
3-. Enséñales formas de conservar energía
Con acciones tan sencillas como apagar la luz cada que se salga de una habitación, se puede generar un gran cambio.
Si cuentan con secadora, enséñales a usarla sólo en casos de emergencia para que aprovechen el calor del sol para secar la ropa.
Otro tip es mantener desconectados todos los electrodomésticos que no utilizan. Esto además de prevenir accidentes como un corto circuito, les ayudará a consumir menos energía.
4-. Fomenta la regla de las tres R (reducir, reutilizar y reciclar)
Todos tenemos en nuestro hogar, objetos que ya no usamos pero, ¿por qué no convertirlos en algo nuevo? Miles de páginas y canales en YouTube están atascados de tutoriales que les enseñan a chicos y grandes a reutilizar botellas de plástico o latas y convertirlos en macetas o en diferentes proyectos.
Y si las manualidades no son lo suyo, pueden optar por donar todas esas prendas y juguetes. Esta iniciativa además de darle una segunda oportunidad a este tipo de artículos, ayuda a reducir la cantidad de residuos en los vertederos!
5-. Únete a la cultura verde
Adquirir ropa, alimentos o productos de marcas comprometidas con el planeta, puede reducir el impacto ambiental.
También pueden comenzar a reducir el consumo de carne o buscar diferentes proyectos, como el de la diseñadora que utiliza los pétalos de las flores para darle vida a la ropa vieja.
6-. Asignen un «Green Day», aunque sea una vez al mes
Pueden incluir en sus actividades un día dedicado a la naturaleza. Esto puede incluir salir a explorar a un bosque o plantar árboles. Existen muchos programas a favor del medio ambiente que solicitan voluntarios.
Tener un green day, les ayudará a convivir desde temprana edad y de manera pacífica con la tierra, además de que promueve la concientización sobre el impacto que pueden o no ocasionar sus acciones en la naturaleza.
Recuerda que es nuestra responsabilidad hacer del lugar donde habitamos, un lugar mejor. Es momento de dejar atrás la idea del que cambio climático es una mentira y comenzar a preocuparnos por mejorar nuestras prácticas ambientales, antes de que sea demasiado tarde.
