Tanto para organizaciones civiles como para las empresas que quieren ser responsables, la capacidad de no solo atraer voluntarios sino de lograr un compromiso a largo plazo puede ser la clave para que sus iniciativas sociales y ambientales tengan éxito. En un texto para Harvard Business Review la autora y experta en voluntariado político Hahrie Han da sus seis secretos para lograrlo.
1. Haz realidad sus sueños:
No es necesario convencer o manipular a las personas para que se unan a tu causa. Lo que sí debes hacer es entender qué es lo que las personas sueñan obtener por su trabajo, para así hacerlo realidad. Si haces una campaña que alimente los valores y pasiones de los voluntarios potenciales obtendrás muchos mejores resultados que una que apele a la culpa.
Para conocer cuáles son los sueños que deberás cumplir, debes saber escuchar muy bien. Una táctica que sugiere la experta es simplemente tener una conversación personal con cada candidato para conocer sus creencias y valores.
2. Crear comunidad:
Las organizaciones con frecuencia le piden a los voluntarios que hagan las cosas solos, porque piensan que es un uso más eficiente y sencillo de los recursos. Sin embargo, el trabajo en solitario no conlleva a experiencias significativas que a su vez lleven a un compromiso a largo plazo. Se necesita hacer que los voluntarios se sientan parte de algo más grande que ellos.
3. Hazlo sencillo:
Muchas personas son apasionadas de un tema y tienen deseo de pertenecer a una comunidad, pero no todas actúan sobre ese deseo y se convierten en voluntarias. Han explica que las organizaciones deben ofrecer caminos sencillos para que las personas comiencen a desarrollar sus habilidades y su confianza como voluntarios. Por otro lado, también es importante darles autonomía una vez que hayan avanzado en su proceso.
4. Crea un ritmo:
Una buena campaña, como una buena novela, tiene un buen ritmo. Los organizadores deben saber cuándo aumentar y cuándo disminuir la presión para hacer crecer y mantener la emoción de los voluntarios y desde un inicio planean el proceso para que contenga cumbres y mesetas. Es decir, para que incluya momentos de mucho trabajo como protestas o recaudaciones y también días en los que se pueda descansar, celebrar y reflexionar sobre lo que se ha logrado y lo que falta.
5. Establece metas manejables:
Cuando se tiene un objetivo muy ambicioso, los voluntarios necesitan una forma más concreta de medir su avance, por lo que Han aconseja crear metas cuantificables y manejables para cada equipo.
6. La «Regla John Cusack»:
Han cuenta que, en una entrevista, el actor John Cusack dijo que cuando se desempeña como productor, su principal meta es «mantener el set libre de miedo.» Esto puede aplicarse también al voluntariado, que debe ser un espacio libre de miedo y críticas destructivas.
La experta recuerda que los datos sobre el desempeño de la iniciativa y sobre cada voluntario deben ser usados para construir una cultura de aprendizaje y colaboración y recomienda no caer en prácticas como crear rankings de logros individuales.
Llevo adelante el Voluntariado Universitario en la Universidad de Mendoza, Argentina. Me gustaría contactarme con Universidades mexicanas que desarrollen programas de Responsabilidad Social Universitaria y voluntariado.
Muchas gracias!!! Graciela