Si padeces estrés crónico o estás muy cerca de sufrir el síndrome de burnout, es muy probable que cada vez que el lunes de acerca te encuentres molesto por la idea de tener que asistir a la oficina, que al llegar el viernes sientas una enorme sensación de alivio y que esta sensación termine demasiado pronto como consecuencia de que has notado que tienes una gran cantidad de pendientes por concluir, varias deudas sin cubrir y el fin de semana no será suficiente.
En términos generales existe una búsqueda que los seres humanos, sin importar nuestro género, origen étnico o creencias religiosas tenemos en común: la felicidad. Cuando la vida es feliz, nos gusta tanto que emprendemos una búsqueda adicional de longevidad. Así que a fin de que encuentres esta añorada calma y evites que el estrés se apodere de tu vida a tal grado que te resulte imposible concentrarte en el trabajo, Jacqueline Whitmore ha compartido algunos consejos a través de su más reciente publicación en Entrepreneur.
1. Asiste a una conferencia
Elige un evento que resulte motivador para romper con la rutina diaria en el trabajo, una conferencia sobre temas relacionados con tu industria puede ser una alternativa enriquecedora y podrá revivir tu interés en el campo.
Además puede convertirse en una excelente oportunidad para conocer nuevas personas, aterrizar nuevas ideas y volver más tarde con un entusiasmo renovado a la oficina.
Las empresas, por su parte, necesitarán promover este tipo de prácticas con frecuencia a fin de mantener a su personal motivado y ayudarlo a alcanzar su máximo potencial, así que ¿por qué no impulsar estas actividades en tu organización?
2. Más de lo que te gusta
Pregúntate si realmente están invirtiendo suficiente tiempo y energía en realizar actividades que realmente te apasionan o las estás olvidando para concentrarte en aquellas que, si bien tienen prioridad, podrías delegar o hacer en menor tiempo. Hacer una lista dividida en columnas puede ser de gran utilidad para identificarlas y tomar acción, ya que esto no sólo puede estar resultando agotador, sino que también puede llevarte por un camino distinto al que deseas.
3. Delegar
Una vez que has identificado cuáles son aquellas tareas que consumen tu tiempo y que podrías delegar a otros, simplemente hazlo. Siempre habrá una persona que se apasione por aquellas tareas que a ti no te interesan tanto, como la contabilidad, las redes sociales o cualquier otra. Invierte tu tiempo en tareas que generen ingresos, pero también procura hacer más de aquello que amas; y si ambos factores se presentan al mismo tiempo seguro no tendrás por qué estar estresado nunca.
4. ¿Qué hay fuera de la oficina?
Probablemente hace un tiempo que lo has olvidado, pero hay todo un mundo por descubrir más allá de las paredes de tu oficina, así que haz un tiempo en tu agenda para ir por él. Actividades deportivas, artísticas o incluso de trabajo voluntario pueden ser excelentes pasatiempos y hacerte disfrutar un poco más tanto de tu vida personal, como de tu empleo.
5. Algo diferente
Aun cuando busques actividades fuera del trabajo, no debes dejar que la rutina se apodere de tu día a día, tal vez sea momento de cambiar algo en el proceso y encontrar formas más eficientes de realizar tus actividades. Puede ser un cambio tan sencillo como reorganizar tu espacio de trabajo o poner colores a las carpetas de archivos; o algo tan complejo como atacar un nuevo mercado o buscar un nuevo puesto.
6. Un nuevo camino
Si realmente no has podido encontrar aquello que puede hacerte salir del estrés, tal vez sea momento de buscar nuevos horizontes para aplicar tus conocimientos, como la docencia o el ámbito editorial.