Para evitar el contagio del virus A/H1N1 es necesario mantener la higiene en los centros de trabajo; el Gobierno ha establecido guías informativas para que los empleadores controlen la epidemia.
Ante el repunte de casos de influenza A H1N1, las empresas buscan trabajar para controlar la propagación de esta epidemia, y para ello cuentan con recursos como la Guía de Recomendaciones para Instrumentar el Plan de Emergencia en los Centros de Trabajo por la Epidemia de Influenza, «que pueden instaurar los centros de trabajo para contener la epidemia», puntualiza un reporte emitido por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud en México, el pasado 7 de septiembre se contabilizó la cifra más alta de casos nuevos, 483 en un solo día, desde el inicio de la epidemia en marzo.
Esto despertó la ‘alerta’ para que los empleadores reforzaran las acciones de prevención y promoción de salud, y se llevara a cabo una reunión con las cúpulas empresariales para reiterar que existe el compromiso de apoyar al trabajador en caso de confirmarse diagnóstico por este virus, en particular en lo referido al respeto de sus derechos laborales.
Focalizarse en las actividades que establezcan las empresas es vital «porque en estos centros a veces se facilita que los grupos de trabajadores tengan una cercanía y eso favorece la transmisión de las infecciones.
Hay que tener recomendaciones para contar con un plan, el cual debe incluir, por lo menos: difusión de las medidas útiles para prevenir la transmisión, así como información relacionada con los síntomas de la enfermedad», señala Samuel Ponce de León Rosales, director de los Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México, Birmex.
Simultáneamente, dice, la empresa debe ofrecer elementos para mantener una condición de higiene y eficiencia respiratoria, como: facilidad para lavarse las manos y desinfectarse con alcohol-gel; dar información sobre la manera de estornudar y toser, y las facilidades para no acudir al trabajo en caso de presentar signos de enfermedad.
«Las mamás que deben ausentarse del trabajo, por ejemplo, porque sus hijos están enfermos (por este virus) deben tener facilidades para cumplir con esto, sin ser sancionadas en su salario», aclara.
El especialista recordó que además del rebrote por A H1N1, las medidas de prevención deben fortalecerse ante la presencia de influenza estacional que, en los últimos 10 años ha impactado a «10% de la población mexicana».
«Debido a que las dos se transmiten de la misma forma, es importante que las compañías incrementen su difusión en temas de higiene, vacunación y alerta de síntomas.
Cualquier molestia intensa de vías respiratorias hay que revisarla con el especialista. Cabe recordar que para influenza estacional, las vacunas comenzaron a aplicarse el lunes 5 de octubre a niños pequeños, adultos mayores y trabajadores de la salud, mientras que a finales de mes empezará a distribuirse la vacuna por A H1N1 a personas con alto riesgo de complicaciones, trabajadores de la salud y niños», detalla el especialista en enfermedades respiratorias.
Alerta sin pánico
Información de la Secretaría de Salud refiere que si la persona está enferma debe ir con el doctor y si éste emite un certificado de A/H1N1 tiene que resguardarse siete días en su casa para evitar el contagio.
De acuerdo con Samuel Ponce de León, el aumento en los casos es una realidad por la magnitud de la contingencia, pero en lugar de llegar a un estado de máxima ‘desesperación’, las organizaciones deben enfocarse a informar a los trabajadores para prevenir los contagios.
«Hay suficiente información por todos lados, por ejemplo en la página de la Secretaría de Salud, los materiales están listos para imprimir y distribuirse en las empresas», añade.
Por su parte, la guía establecida por la STPS, instruye al empleador sobre cómo establecer un proyecto de Plan de Emergencia, cumpliendo con puntos muy específicos, entre éstos: que todos los trabajadores participen del programa; se respete los derechos de los trabajadores, en particular si existe un caso de contagio que pudiera ser motivo de «discriminación»; y que las organizaciones fijen un canal de comunicación para informar, continuamente, sobre las medidas para proteger su salud.
Este documento incluye 74 recomendaciones, agrupadas en seis apartados: planeación y dirección; capacitación e información a los trabajadores; medidas de prevención; medidas de protección; políticas temporales, y supervisión y vigilancia por parte de los servicios preventivos de medicina del trabajo y las comisiones mixtas de seguridad e higiene.
Para el apartado de acciones para planeación, por ejemplo, establece los siguientes aspectos:
* Designar a un responsable y a un equipo con funciones definidas, del cual formen parte los representantes de los trabajadores.
* Determinar el grado de riesgo del centro de trabajo y de exposición del personal.
* Definir los requerimientos de insumos, tales como: cubre bocas, guantes desechables, jabón líquido, toallas desechables, secadoras eléctricas, pañuelos desechables, bolsas de plástico, etcétera.
* Prever los recursos financieros para la adquisición de los insumos.
* Evaluar la disponibilidad de los servicios médicos para sus trabajadores.
* Reforzar el servicio médico de la empresa.
El documento está disponible en la página electrónica de la Secretaría del Trabajo (www.stps.gob.mx) y también se puede consultar el sitio web de la Secretaría de Salud (www.promocion.salud.gob.mx).