Actualmente, la sociedad enfrenta un gran problema: la limitación de alimentos. Una de las razones de esta restricción es la sobrepoblación. Según el artículo de Capital Group, los gobiernos, organismos reguladores, compañías y consumidores deben revisar la manera en que se producen y consumen los alimentos, pues cada vez son más escasos debido a la falta de recursos.
Los conflictos actuales, fenómenos meteorológicos extremos, aumento de precios y crisis económica han generado preocupación entre expertos por la nutrición de las personas. Se estima que para 2050 la población mundial aumentará a casi 10 mil millones de habitantes, resultando en un desequilibrio alimentario del 56% entre las calorías producidas y las requeridas. Por ello, presentamos las 6 tendencias alimentarias del futuro.
Además, la Organización Internacional del Trabajo estima que más del 25% de los empleados a nivel mundial trabaja en industrias agroalimentarias, lo que ocasiona que los sistemas alimentarios sean responsables de un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero, el 80% de la pérdida de biodiversidad y el 70% del consumo de agua dulce, según datos de las Naciones Unidas. Por lo tanto, es importante innovar en la alimentación y adoptar las tendencias surgidas debido a las consecuencias del cambio climático, los métodos de producción y la sobrepoblación.
6 tendencias alimentarias del futuro
1. Innovación de semillas
Con el aumento de la población, la tierra cultivable se reduce. Según datos de las Naciones Unidas, casi el 40% de la tierra está degradada por deforestación, uso excesivo de agua y construcción de infraestructuras. Los científicos proponen estrategias para innovar semillas y aumentar su rendimiento, mejorando así la seguridad alimentaria. Utilizar entre el 10% y el 15% de semillas innovadas podría aumentar la rentabilidad.
2. Fertilizantes de menor impacto
El uso de fertilizantes es responsable de casi el 5% de las emisiones globales. Disminuir su uso beneficiaría a la sociedad, ya que la mitad de la población mundial se alimenta de productos fertilizados, lo que daña la salud y el medio ambiente. Se contempla el uso de tecnologías para reducir su aplicación excesiva, considerándose una tendencia alimentaria.
3. Agricultura de precisión
La industria agrícola es una de las mayores emisoras de gases. Planificar una agricultura de precisión optimizaría las operaciones con tecnología, mejorando los rendimientos y mitigando las consecuencias climáticas. Se estima que para 2030, una agricultura de precisión generaría ingresos de casi 24 millones de dólares.
4. Agricultura regenerativa
Implementar una agricultura regenerativa mejoraría la salud del suelo, la biodiversidad y el impacto ambiental. En 2022, el Foro Económico Mundial estimó pérdidas de 400 mil millones de dólares debido a la degradación de tierras agrícolas. Usar cultivos de cobertura y eliminar pesticidas inorgánicos podría tener efectos positivos.
5. Proteínas alternativas
Adoptar proteínas alternativas y reducir el consumo de carne podría reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 74%. Esta opción apoyaría la crisis climática y podría generar ganancias en los mercados emergentes dedicados a esta producción.
6. Gestión y reducción de residuos
El Fondo Mundial para la Naturaleza estima que el 40% de los alimentos cultivados nunca se consumen, generando 2.500 millones de toneladas de residuos anuales, equivalentes al 10% de las emisiones de gases de efecto invernadero. Reutilizar y reciclar estos residuos en proteínas alternativas, biocombustibles y bioplásticos es crucial para activar tendencias alimentarias y mejorar las limitaciones de alimentos.
Estas opciones podrían beneficiar social y ecológicamente, permitiendo un avance para enfrentar las limitaciones actuales debido al calentamiento global y la sobrepoblación.