Los beneficios del consumo responsable está transformando poco a poco el mercado, ya que influye en los métodos de producción, gestión, distribución e incluso publicidad. Puesto que los consumidores de hoy en día quieren estar seguros de que lo que adquieren proviene de prácticas éticas basadas en la Responsabilidad Social Empresarial (RSE).
Y, reconociendo estos cambios en las preferencias, las empresas han tenido que adaptar sus operaciones para seguir siendo rentables en un contexto en el que el cambio climático es el centro de todas las preocupaciones. De manera que pueden ofrecer productos y servicios que van a satisfacer al público, cubriendo todas las necesidades que se les presenten.
Así, entre más empresas se alineen con el objetivo de fomentar los beneficios del consumo responsable, mayor será el impacto que tengan sus acciones en la mitigación del calentamiento global. Por lo tanto, no solo trabajan por el enriquecimiento propio, sino que buscan el bien común construyendo un futuro sostenible.
