Por Corinna Acosta
El pasado viernes 14 de febrero durante una conferencia sobre los derechos de los homosexuales celebrada en Las Vegas, la joven actriz Ellen Page se unió a las filas de los deportistas, cantantes y actores que han declarado abiertamente su homosexualidad. Los medios de comunicación han convertido esta declaración en la frase más trascendente de un discurso de más de ocho minutos, en los que la actriz más que hablar sobre su homosexualidad, hizo una alusión directa a los estándares de Hollywood y habló sobre lo difícil que es ser diferente.
“Aquí estoy, una actriz representando en algún sentido a una industria que crea estándares aplastantes sobre nosotros”, declaró. Admitió también que los estándares de belleza, buena vida y éxito que dicen a todo el mundo como deben vestir y quiénes deben ser, la han afectado y destacó lo duro que puede ser buscar la autenticidad lejos de los estándares marcados por la industria.
Con un tono más relajado la protagonista de “Juno” contó una anécdota en la que un periodista cuestionaba de forma sexista su manera de vestir: “¿por qué esta belleza diminuta insiste en vestirse como un gran hombre?” escribió.
Señaló que existen fuertes estereotipos sobre la masculinidad y la feminidad que definen la forma de actuar, de vestir y de vivir de las personas. «Cualquiera que transgreda esa norma se convierte en alguien a quien criticar, y la comunidad LGBT lo sabe muy bien” aseguró.
En su discurso, Ellen Page menciona por primera vez sus preferencias sexuales, pero también habla de los roles de género sexistas que se mantienen no sólo en la industria del entretenimiento, sino en la mente de una sociedad que insiste en rechazar aquello que es diferente. Habla de que esta cansada de ocultarse y del daño que ha sufrido su mente y sus relaciones, pero también sobre la importancia de ver las cualidades del otro para convivir de forma más armónica.
Durante el fin de semana los periódicos y la web fueron invadidos con titulares como «Ellen Page admite su homosexualidad» o «La protagonista de Juno es gay», estas frases hablan de medios de comunicación que otorgan un peso mayor a la identidad sexual de una persona que a su mensaje social y sus valores. Por desgracia, también habla de los intereses de la audiencia.
Hoy Ellen Page es blanco de comentarios que van desde las especulaciones sobre la identidad sexual de sus futuros personajes, hasta las felicitaciones de otros miembros de la industria cinematográfica y admiradores de la actriz, quien con su discurso ha recordado una vez más que el respeto y la no discriminación más que ser derechos de homosexuales o heterosexuales, son tema de derechos humanos.