Para aquellos que no han visto Cars 2 y tengan intención de verla, les pedimos no leer este post porque contiene spoilers. Dicho esto, pasaremos a una ligera reflexión de la cinta que llama mucho la atención.
El término Teoría de la Conspiración es usado comunmente para explicar un evento o cadena de eventos (comúnmente político-sociales) a partir de la ocultación de sus verdaderas causas al público por parte de un grupo de personas u organizaciones poderosas e influyentes que permanecen en la sombra. Según estas teorías muchos eventos importantes en la historia han estado dominados por conspiradores que manipularon acontecimientos detrás de escena. Ejemplos de sucesos que se han intentado explicar así son el asesinato de JFK, el surgimiento del SIDA, el ataque del 11-S y recientemente, el calentamiento global.
Nadie niega la existencia del calentamiento global, lo que algunos señalan es que lo erróneo es situar a los seres humanos como los generadores de éste, ya que de acuerdo con ellos, se trata de un fenómeno cíclico natural. Segun ellos se culpa mayormente al uso de combustibles fósiles en las actividades humanas y se dice que la solución reside en abandonar el uso de estos para que todo se resuelva dentro de 100 años. Con el hecho se impulsaría toda una industria de productos verdes y energías renovables que moverían la economía mundial en un nivel sin precedentes; y es que recordemos que la guerra siempre fue un gran negocio pero al término de la guerra fría, este motor parece perder impulso.
No nos corresponde juzgar si en esto hay verdad o es simplemente una absoluta tontería. Lo que podemos afirmar es que el contexto y la teoría encajan bien y con ello han creado una historia que a muchos fascina, y es curioso porque Cars 2, una cinta de Disney está apoyada en un concepto así.
En la cinta, un petrolero genera un combustible orgánico que anuncia como la panacea para jamás volver a usar gasolina. Él mismo desarrolla en secreto un complot para que los autos con esa mezcla ecológica fallen peligrosamente, haciendo que vuelvan sus ojos nuevamente a los productos devenidos del petroleo. Claro que toda esta conspiración ecológica se le ocurre tras hallar el mayor yacimiento petrolero hasta entonces.
Como mencionamos anteriormente, no es nuestro papel juzgar nada… sin embargo, como bien dijimos, es una historia fantástica… la cinta de Disney, claro, cuyo guión es de Lasseter, Lewis y Dan Fogleman. Cualquier parecido del cine con la vida real es mera coincidencia.