Para los amantes del beisbol, frases como «Un mamuuuut por el jardín izquierdo, la pelota va para atrás, para atrás, para atrás ¡Y está descansando en paz!» o «Noooo, no, no, no, no, no… dígale que no a esa pelota» son muy conocidas y motivo de alegría. Pues ahora, además de estas frases tan sui generis de los narradores, hay otros motivos para sonreir en el rey de los deportes.
Y es que ahora los bats se pintaron de rosa en los diamantes de la Liga Mexicana de Béisbol, como parte de sus programas de Responsabilidad Social.
La esencia de la campaña denominada ‘Ponchemos al cáncer de mama‘, consiste en que un pelotero de cada escuadra utilice un bat rosa, y al final del encuentro, sea subastado entre los aficionados presentes en cada parque; esto con el fin de recolectar fondos que son entregados a Fundación Cim*ab.
La meta a lograr es medio millón de pesos, cifra a la que se espera llegar con las subastas y la venta de merchandising (gorras, dijes, llaveros, pulseras).
En algunos encuentros especiales, las almohadillas que se usaron se pintaron de rosa y los jugadores de algunos equipos utilizaron muñequeras del mismo color. De igual manera, ciertas escuadras han jugado con jerseys rosas en la temporada.
Un esfuerzo interesante el modelo de las subastas, ya que obviamente entre más afamado sea el pelotero, mayor valor tendrá para el aficionado.
Cada vez son más las acciones con causa que se ven en las ligas mexicanas; esfuerzos estratégicos y bien encaminados ya que este tipo de deportes son de caracter familiar y el mensaje transmitido llega bien a los stakeholders.
