Tratándose de informes de sustentabilidad, no es nueva la crítica de que existen diferentes marcos o normas para llevarlos a cabo y los iniciados en el tema -e incluso quienes no lo son tanto- no saben a cuál recurrir.
Reportes integrados (que fusionan la información financiera con la de sustentabilidad) o que cumplan con los indicadores de Global Reporting Initiative (GRI) o alineados a la ISO 26000, guía de responsabilidad social o a la metodología de Sustainability Accounting Standards Board (SASB) son algunas de las opciones que las organizaciones tienen para reportar su desempeño en sostenibilidad.
Aunque ninguna herramienta está peleada con las otras, para las organizaciones resulta más sencillo apegarse a una sola para realizar sus informes y, en general, toman en cuenta la materialidad de su operación para decantarse por el marco que mejor atienda ese aspecto.
Las organizaciones detrás de cada uno de esos estándares parecen haberse dado cuenta de esta complejidad y dieron lo que se anticipa como el primer paso para alinear las diferentes guías existentes, en beneficio de quienes son la razón de ser de esos reportes: los grupos de interés.
Paisaje cambiante
El pasado 17 de junio, en el marco de la conferencia anual de la Red Internacional de Gobierno Corporativo realizada en Ámsterdam, se lanzó la iniciativa Diálogo de Informes Corporativos (Corporate Reporting Dialogue), que agrupa a las organizaciones con mayor presencia en el paisaje internacional de las memorias empresariales.
A convocatoria de International Integrated Reporting Council (IIRC), el nuevo esfuerzo de coordinación agrupa a GRI, ISO, SASB, Carbon Disclosure Project (CDP), International Accounting Standards Board (IASB), International Public Sector Accounting Standards Board (IPSASB) y Climate Disclosure Standards Board (CDSB).
De acuerdo con la comunicación emitida por IIRC, el primer objetivo que se han planteado los participantes es realizar un diagnóstico actual del reporteo corporativo e identificar los puntos en que conectan los distintos marcos.
Para IIRC, lo anterior permitirá avanzar en la promoción de una mayor coherencia, consistencia y comparabilidad entre las normas y estándares para elaborar informes corporativos.
Al asumir la presidencia del Diálogo de Informes Corporativos, Huguette Labelle, también directora de Transparencia Internacional, destacó que el reporteo corporativo ha fracasado en el intento de las organizaciones para conectar con sus grupos de interés, por lo que confió en que este esfuerzo permita lograr la cohesión necesaria para reequilibrar los informes en favor del lector y los stakeholders.
¿Será que con la nueva iniciativa las organizaciones de reporteo dan patadas de ahogado o estarán pensando más bien que los ‘informes, unidos, jamás serán vencidos’? Habrá que seguir el Diálogo de Informes Corporativos muy de cerca.