El trabajo desde casa o home office es una tendencia mundial, ya que permite un horario más flexible (muy apreciado, especialmente por las madres de familia) y también, en teoría, un aumento en la productividad.
Además, en grandes ciudades como la ciudad de México, la eliminación del traslado hasta el lugar de trabajo resulta en reducir el estrés, aprovechar mejor las horas del día y también en menos emisiones de carbono (aunque este último beneficio no es tan grande como se cree). En nuestro país, ya es grande el porcentaje de las empresas que ofrecen esta opción, pero también hay otras a nivel global, como Yahoo! que se oponen a implementarla.
Lo cierto es que trabajar desde casa requiere de habilidades de organización y disciplina diferentes a las que usamos en un ambiente de trabajo más tradicional. Por eso, los trabajadores deben prepararse para la transición si no quieren que su productividad decaiga. Escribiendo para Harvard Business Review, la periodista Carolyn O’Hara propone cinco medidas para un home office más efectivo:
1. Mantén un horario fijo:
El establecer un horario ayuda a dar estructura al día, pero también a mantener la motivación, afirma O’Hara. Por eso, lo mejor es hacerse de una rutina lo más similar a la que tendrías en una oficina, que incluya despertase temprano, vestirse y evitar las distracciones. Encontrar el ritmo adecuado puede tomar un tiempo, pero una vez lo has hecho, lo mejor es adherirse a ella tanto como sea posible.
2. Establece límites claros:
Una de las principales desventajas de trabajar en casa es que las líneas entre el trabajo y la vida pueden desaparecer, creando la ilusión de que siempre estás trabajando. O’Hara sugiere algunas soluciones sencillas, como tener un área separada dentro de tu casa dedicada al trabajo y explicar a los amigos y familiares cuáles son los horarios en los que pueden llamar o visitar, además de mantener un calendario con los compromisos tanto laborales como personales. Otro consejo es respetar los horarios, aunque esto signifique dejar en pausa un proyecto.
3. Toma descansos:
Es fácil pensar que trabajar de corrido, sin descansos, será lo mejor, en especial si quieres demostrar que puedes ser más productivo desde tu casa, pero tu cerebro necesita tomar ciertos descansos. O’Hara menciona un estudio reciente en el que una empresa descubrió que lo mejor para sus empleados es trabajar por 52 minutos y después tomar descansos de 17. Lo que hagas en tu descanso es tu elección: puedes leer, mirar por la ventana o hacer una llamada. Cualquier cosa que permita que tu cerebro se recupere.
4. Mantén la comunicación:
Otra desventaja del home office es el aislamiento, que a su vez disminuye la productividad y la motivación. O’Hara suguiere hacer un esfuerzo extra para permanecer conectado con otras personas, agendando reuniones con colegas, clientes o colaboradores, o involucrándote con organizaciones profesionales. También puedes ir a la oficina regularmente, ya que la visibilidad es importante para obtener ascensos. Comparte con tus jefes y compañeros los proyectos en los que estás trabajando, y las tareas que terminas cada día.
5. Celebra tus éxitos:
Trabajar desde casa significa tener otro tipo de distracciones, desde redes sociales hasta tareas del hogar. Un consejo de O’Hara es enfocarte en aquello que lograste durante el día, no en lo que te falta por hacer. Si tienes una lista de pendientes, toma un momento del día para celebrar las tareas que completaste, lo cual te permitirá crear un círculo virtuoso y mantener la motivación.
