La Comisión Europea ha enviado hoy una notificación a Google con un pliego de cargos por abuso de posición dominante. Acusa a esta empresa de favorecer sus propios servicios de compra en el buscador. Además, las autoridades han anunciado una investigación sobre Android, su sistema operativo para móviles, tras alegaciones de que Google obstaculiza el desarrollo de aplicaciones y servicios de sus rivales.
El gigante Google ha sido acusado formalmente por la Comisión Europa de prácticas de posición dominante y de promover su servicio de comparación de precios (Google Shopping) en las búsquedas de internet.
La empresa, que cuenta a partir de ahora con 10 semanas para responder, ha señalado que está “en total desacuerdo” con estas alegaciones y que espera demostrar su improcedencia.
Las autoridades europeas han abierto también una nueva investigación sobre el comportamiento de Google respecto a su sistema operativo para móviles Android.
La firma podría ser multada con una cantidad que podría llegar al 10% de su facturación
La comisión quiere determinar si la firma ha vulnerado las normas comunitarias, al obstaculizar el desarrollo y el acceso al mercado de sistemas de explotación, aplicaciones y servicios para móviles de los rivales de su sistema.
Según fuentes comunitarias, la empresa californiana podría ser multada con una cantidad que podría llegar al 10% de su facturación. Además, la comisión podría obligar a la compañía a hacer cambios estructurales en su buscador para poner fin al abuso de posición dominante.
Cuota de mercado del 90%
Google cuenta con una cuota del 90% en el mercado de las búsquedas de internet en la UE. Con el envío del pliego de cargos, la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, ha corregido la estrategia recomendada por su antecesor en el cargo, el español Joaquín Almunia.
Almunia, que abrió la primera investigación contra Google en 2010, intentó en varias ocasiones una solución negociada, eludiendo el envío de un pliego de cargos. Pero las concesiones ofrecidas por el gigante estadounidense fueron rechazadas tras ser declaradas insuficientes por sus competidores y por países como Alemania y Francia.
Fuente: Animal Político