Mientras perdure el capitalismo como forma de producción, la responsabilidad social seguirá creciendo como un medio para disminuir la pobreza y generar desarrollo social, explicó la consultora certificada en responsabilidad social por el Cemefi.
Con más de 25 años de experiencia en docencia e investigación, Inés Guardia ha atendido a más de 25 empresas en Jalisco, entre las que figuran cuatro multinacionales, nueve familiares grandes y seis medianas; organismos públicos y otros promotores de la responsabilidad social como diversas cámaras empresariales. Por ello, en esta ocasión recurrimos a sus conocimientos para acercarnos un poco más a la responsabilidad social, y como tal, nos compartió lo siguiente:
¿A nivel global, cómo ves la Responsabilidad Social Empresarial?
La responsabilidad social es una tendencia que vino para quedarse, y como tal, aprecio un crecimiento a nivel global en las publicaciones, en las prácticas y en la comunicación. Es la nueva forma de generar riquezas con justicia social. Mientras perdure el capitalismo como forma de producción, la responsabilidad social seguirá creciendo como medio de distribuir riqueza, disminuir la pobreza y generar desarrollo social.
¿Cuál es el principal fundamento de la RSE?
Lograr la sustentabilidad de las organizaciones en la triple vertiente: financiera, social y ambiental.
¿Qué beneficios aporta la responsabilidad social a los involucrados en ésta?
En relación con los factores de éxito para la sustentabilidad, podemos mencionar que en la gestión empresarial trae beneficios en la gestión y dirección de la empresa, además del involucramiento con las partes interesadas. En lo ambiental mejora los procedimientos, así como los productos y servicios, y en lo socioeconómico genera crecimiento en la economía local, desarrollo comunitario y desarrolla a los colaboradores. En cuanto a los factores de éxito empresarial, genera crecimiento de los ingresos al crear valor de marca y reputación, permite la gestión de riesgos y aceptación social, posibilita el acceso a capitales, desarrolla el capital humano y mejora los costos y la productividad.
¿Cuál es el mejor indicador para medir la RSE?
Hay muchos indicadores. Mi respuesta iría enfocada a la importancia de incorporar la gestión sustentable e integrarla a otros sistemas de gestión existentes en las empresas, para que a partir de allí se cuente con indicadores que permitan la mejora continua. Hay que tener presente siempre que lo que no se mide no existe, y no permite evaluar ni comparar el desempeño.
¿Los indicadores han ayudado a transparentar las prácticas?
Una gestión socialmente responsable implica rendición de cuentas y transparencia. Por ello, todo este enfoque pone énfasis en buenas prácticas de gobierno corporativo, así como en conductas éticas como parte de la gestión empresarial, ya que está comprobado que se obtiene beneficios de este comportamiento como valor de marca y reputación, fidelización de clientes y una percepción de menor riesgo.
¿Los rankings son un buen reflejo de la sostenibilidad de las empresas?
No necesariamente, pero su fin es el logro de una mayor transparencia y rendición de cuentas, así que no me opongo. Creo que son instrumentos que ayudan a la profundización y comunicación de la RSE, pero no se debe olvidar que el acento tiene que estar en la gestión empresarial.
¿Que trae el 2015 en RSE?
Una profundización de prácticas en responsabilidad social, retos de teorización en la temática, mayores informes de sustentabilidad y mayor desarrollo social a partir de la causa social de las empresas.
¿Cuáles son las nuevas tendencias?
Mayores regulaciones y exigencias en responsabilidad social, de manera que se pueda comprobar la gestión sustentable en las organizaciones.
¿Qué se puede hacer para fomentar la responsabilidad social?
Seguir comunicando la importancia de la responsabilidad social, intercambiando prácticas y acciones en la temática, fomentar la práctica de elaboración de reportes de sustentabilidad y promover en centros de educación superior, en los distintos niveles y materias, que incorporen la temática y existan carreras completas que se centren en la sustentabilidad.
Fuente: El Economista