El mundo del marketing se ha saturado; se dice que durante un día común, aquellos que vivimos en las grandes urbes, recibimos más de cinco mil impactos comerciales. En un mundo así, sobresaturado de información ¿cómo puede sobrevivir una marca? La respuesta es que es necesario crear nuevas formas de interacción con los consumidores y que además, éstas sean responsables y transparentes.
Recientemente asistimos a una de las sucursales de Build-A-Bear, la marca especializada en ofrecer una vivencia lúdica para crear amigos de peluche personalizados; allí, decidimos tener la experiencia tal y como lo haría un chiquillo, y también entrevistamos a Erik Peña, el director de marketing para conocer qué acciones, una empresa así, con presencia internacional, hace en materia de responsabilidad social.
Antes de comenzar, se nos explicó el profundo impacto que los juguetes de contacto tienen en los niños, ya que sicológicamente un pequeño que abraza logra integrarse mucho mejor en la sociedad que aquellos que carecen de ese estímulo.
La experiencia Build-A-Bear
Siete divertidas y emotivas estaciones, componen la experiencia Build-A-Bear:
- “Elígeme”.- Aquí se puede escoger entre más de 30 diferentes animalitos de peluche: osos, conejos, perros, etc.
- “Escúchame”.- Se elige un sonido pregrabado para el nuevo Amigo de Peluche (risas, ladridos, frases…), o incluso se puede crear un mensaje para él con voz; aquí, algunos padres lo utilizan para formar buenos hábitos en los niños.
- “Relléname y Cóseme”.- Esto es a gusto de cada quién. Una de las partes más emotivas es cuando se cose, porque antes de este paso, se le coloca un corazón. De igual manera, se introduce un código de barras con el fin de que el nuevo amigo, en caso de perderse, pueda volver a su dueño, ya que están registrados.
- “Espónjame”.- Últimos detalles, hay que peinarlo y darle su primer baño para que esté listo.
- “Vísteme”.- Una de las más divertidas. Consiste en elegir la ropa y accesorios para darle personalidad al nuevo Amigo de Peluche. Puede ser un rockero, deportista, una princesa o una linda colegiala.
- “Ponme Nombre”.- La penúltima estación se le pone nombre para posteriormente crear su certificado de nacimiento.
- “Llevame a casa”.- La última estación. Aquí se hace entrega del certificado de nacimiento personalizado y se coloca al nuevo Amigo de Peluche en su casita para ser llevado a casa.
Responsabilidad Social
En Build-A-Bear WorkShop la mayoría del material impreso, incluidos los estuches están impresos en materiales parcialmente reciclados. La marca está intentando imprimir completamente en papel con certificación del Forest Stewardship Council. El rótulo FSC® certifica que el papel fue fabricado de fibras extraídas de bosques que cumplen con los estándares de medio ambiente del FSC.
Adicionalmente a este aspecto ecológico, Build-A-Bear también trabaja tópicos de carácter social, como lo demuestra la existencia de osos con causa, como su Cachorro de la amistad, en donde las ganancias se destinan a distintas organizaciones, principalmente a aquellas que trabajan con niños, como podría ser en este caso específico, Casa de la Amistad.
Asimismo han colaborado con la Fundación Make-a-Wish, cumpliendo deseos a los pequeños, ya que si alguno quiere vivir una experiencia como superhéroe o princesa, qué mejor que tener un amigo personal que luzca ese atuendo. En Estados Unidos, la marca ha donado más de 40 millones de dólares para este tipo de causas.
Build-A-Bear también maneja programas de reforestación; han plantado más de 300,000 árboles con la Arbor Day Foundation, gracias a clientes y asociados a través del programa Bosque de la Amistad.
Conclusión
No basta ser una gran marca hoy en día. Es necesario generar una experiencia extraordinaria con los consumidores y hacerlos sentir parte de algo mayor. Adicionalmente es clave instituir lazos fuertes con los stakeholders a través de programas de responsabilidad corporativa que refuercen la reputación y el vínculo con la sociedad. En este sentido, con marcas como Build-A-Bear ¡es verdaderamente un gusto hacer el oso!
De verdad se necesita ser creativo!!! Me encantó la idea! Felicidades!