El sector sanitario y el medio ambiente serán los que concentren los nuevos empleos que genere la economía de Estados Unidos la próxima década, según un informe que publicó ayer la Casa Blanca.
La crisis económica ha llevado al Gobierno del presidente Barack Obama a promover, entre otras medidas, un plan de inversión y gasto público valorado en 787.000 millones de dólares para reactivar la economía y generar nuevos empleos.
Con un informe, titulado “Preparando a los trabajadores de hoy para los empleos del mañana”, el Gobierno ha analizado las capacidades que deberán tener los empleados para poder acceder a esos puestos y adecuar los sistemas educativos.
“Se prevé que aumenten más rápido las ocupaciones que requieren mayor nivel de estudios que aquellas con menores requisitos de formación”, sobre todo las que requieren un título asociado, un postgrado o un curso de especialización de formación profesional, señala el documento.
En el ámbito sanitario, en concreto, no sólo hace referencia a médicos y enfermeras, sino a especialistas en gestión de información médica y técnicos de laboratorio, dentro del plan de reforma que se propone acometer.
Sectores emergentes
Otro eje central de la recuperación económica propuesto por Obama es la inversión en la mejora del medio ambiente y la promoción de energías renovables que permitan a Estados Unidos reducir su dependencia económica.
Ahí se abre una oportunidad para ingenieros medioambientales, científicos y técnicos especializados en medio ambiente. Estos empleos crecieron más que otras ocupaciones entre 2000 y 2006, y, según las proyecciones del informe, se espera que sigan creciendo hasta 2016.
La Casa Blanca prevé, además, que la caída de la industria manufacturera se modere y repunten algunos subsectores como el aeroespacial y el farmacéutico.
En este periodo se espera un eventual repunte de la construcción, lo que abriría las puertas de nuevo a profesionales que tendrían una oportunidad en la inversión de infraestructuras públicas.
