Más de 126 mil millones de litros de agua embotellada se consumen en el mundo cada año, traduciéndose en toneladas de botellas plásticas contaminando el suelo y los océanos. La probabilidad de recuperarlas para su reutilización es verdaderamente baja, mientras que el daño que provocan en el medio ambiente es, por desgracia, considerable.
Algunas ciudades, como San Francisco, EE.UU., han emprendido esfuerzos para reducir el impacto del PET en el medio ambiente regulando la venta y el consumo de agua embotellada e integrando bebederos como parte de su infraestructura, a fin de facilitar el acceso de sus habitantes al agua potable; sin embargo sus iniciativas no alcanzan a erradicar el problema.
Dentro de la industria de la construcción, por otro lado, han surgido diversas iniciativas para integrar el PET en la edificación de viviendas, aunque hasta el momento ninguna ha conseguido masificarse.
Ahora, el constructor canadiense Donald Thomson ha decidido fusionar estos dos frentes para luchar de lleno contra el consumo y desecho masivo de PET, por lo que a sus 56 años de edad ha emprendido un negocio que lleva la sustentabilidad en el ADN. A través de la marca ‘A’Gua y el Centro de Diseño Regenerativo y de Colaboración, Thomson busca comercializar el agua embotellada que tanto daño hace a nuestro planeta, pero dentro de un recipiente optimizado para su recuperación y reutilización en tejados asequibles para la industria de la construcción.
Una vez que la botella, diseñada con una forma similar a la de un ladrillo tradicional es desechada, se rellena con una mezcla de hormigón y residuos de papel teñido para simular texturas de mármol o cerámica.
Para obtener como resultado este diseño único, Thomson y su equipo trabajaron de manera invertida, es decir: fue su primera teja fabricada con botellas desechadas de PET lo que definió las cualidades que la nueva botella debía cumplir para ser fácilmente reutilizable.
Como resultado, la nueva botella resultó tener una forma distintiva y llamativa para el consumidor. El modelador de plástico Mike Urquhart señaló en entrevista con Fast Company, que ‘A’Gua constituye la primera bebida comercializada en un recipiente diseñado para ser reutilizado en lugar de fabricarse con un enfoque de reciclaje, lo que le permitirá encontrar una segunda vida para los próximos 50 años.
