Las vacas, el carbón y los autos en conjunto producen casi la mitad de los gases de efecto invernadero causado por el hombre y por lo tanto sería suficiente prohibir estas tres cosas para solucionar el calentamiento global. Si crees que esta sería una medida demasiado extrema, lee las tres políticas de distintos países que recabó el portal Corporate Knights.
No más carne de res:
En India, las vacas son sagradas, según la religión hindú, por lo que en 23 de los 28 estados del país está prohibida y e s penada con hasta cinco años de prisión. Dado que esta carne representa el 40% de las emisiones de ganado en el mundo, que a su vez representan un sexto de las emisiones de gases de carbono causadas por el hombre, todas las personas que la consumimos somos parte del problema. Tomar la idea de los estados de India (por supuesto, ignorando el nacionalismo hindú) podría ser un paso para alejarnos del acantilado del calentamiento global.
No más autos de gasolina:
Los autos de pasajeros queman combustibles fósiles que representan la mitad de las emisiones de transporte globales, que a su vez son otro sexto de las emisiones causadas por humanos. En este contexto, el recién electo ayuntamiento de la ciudad de Oslo, en Noruega, anunció en octubre su plan de prohibir todos los automóviles privados para 2019. Por supuesto, para lograrlo el gobierno tendrá que mejorar la infraestructura de transporte público, así como los carriles para bicicletas y, en suma, convertirla en una ciudad construida par alas personas, no para los autos. Para 2030, se espera que, aunque todavía existan autos en otras áreas de la urbe, sean todos cero emisiones.
Noruega es impulsada por un 100% de energías renovables, por lo que no sorprende que también sea uno de los países que más progreso han tenido promoviendo autos eléctricos por medio de estrategias como subsidios, recortes de impuestos y uso gratuito de carreteras. Todo esto ha convertido al Model S de Tesla en el automóvil más vendido de la nación.
No más plantas de energía de carbón:
El principal culpable individual del calentamiento global, que representa casi un cuarto de las emisiones de gases de efecto invernadero totales, es el carbón. En Ontario, Canadá, la respuesta fue simple: prohibir la energía generada con carbón, eliminando así 30 millones de toneladas de gases de efecto invernadero al año (equivalente a eliminar 7 millones de autos), así como los días plagados de smog que solían azotar a la ciudad de Toronto todos los veranos.
Por supuesto que las tres medidas mencionadas ocurrieron de forma gradual y en un contexto específico, pero ahora que al parecer los gobiernos y los CEO están listos para tomar acciones drásticas para frenar el calentamiento global, no es una mala idea conocerlas y considerarlas.