México no está tan mal, es lo que opina Rohan Malik, socio de Ernst & Young especialista en mercados emergentes y subdirector de Gobierno y Sector Público de la consultora, cuando conversa sobre el problema del desempleo entre la gente joven en México. Entiéndase gente joven entre 14 y 30 años. La tasa es de 8.6%, justo como él expone. En este sentido, el promedio de desempleo en los países pertenecientes al G-20 es de 15%. Para él, no estamos tan mal. El detalle que debemos observar, explica, es que 22% de esa población desocupada es lo que conocemos como “nini”, los que no trabajan ni estudian.
“Si el gobierno puede lograr que ese 22% de jóvenes pueda incorporarse a las compañías como empleados o encaminarlos hacia el emprendimiento, podría lograrse una economía muy distinta. Si no lo haces, tendrás problemas sociales, como incremento del crimen, y en este sentido… no hay opción. El gobierno algo tiene que hacer”, advierte.
Ernst & Young (EY) realizó un reporte durante 2015 con base en las respuestas de más de 1,500 jóvenes emprendedores de las economías del G-20, incluyendo México. Una de las conclusiones a las que llegaron en este reporte es que, para la gran mayoría de los encuestados, es muy importante motivar la creación de emprendedores e inculcar una cultura del emprendimiento.
“La razón por la que nos hemos enfocado en la cultura del emprendimiento es porque las ciudades top en el tema de cultura de emprendimiento (Estados Unidos, Corea del Sur, Canadá, Japón y Australia) son prácticamente las mismas en donde tienen un fuerte desempeño en el ecosistema emprendedor”, dice.
Rohan tiene una importante misión en su visita a México: planear una agenda con el gobierno mexicano para realizar una serie de recomendaciones sobre cómo se podría fortalecer la cultura del emprendimiento en el país.
“Típicamente cuando hago esto en las ciudades tengo contacto con los tres actores importantes, el gobierno es una parte, los corporativos son otra y la tercera son los emprendedores. La idea es que en México tengamos unengagement, compartir el reporte y las recomendaciones”, explica durante la charla.
En el caso de México, agrega Malik, es buen momento para atacar el problema de los jóvenes que no estudian ni trabajan porque el país se encuentra en un momento de oportunidades con el proceso que conllevan las reformas estructurales.
“Yo digo que se identifiquen dos o tres sectores en donde puede existir gran potencial de inversión, porque la inversión crea lugares de trabajo. Y en esos sectores identificar los corporativos y saber cuáles son sus proyectos para revisar las oportunidades de trabajo o las oportunidades de emprendimiento”.
Un proyecto similar, explica Malik, se aplicó en India con mucho éxito. En aquel país detectaron que prácticamente un millón de personas nuevas al mes buscaban insertarse a la vida laboral, patrón que se repetiría por los próximos 20 años. El gobierno indio aplicó dicha estrategia, sobre todo enfocada en el sector manufacturero y dio resultado.
Para Rohan Malik el ecosistema emprendedor en México tiene una relación muy estrecha con el ranking Doing Business, que publica el Banco Mundial.
“Para mí, este es un gran indicador y el gobierno debería ver cómo mejorar en ese ranking porque es una de las mayores consideraciones que tienen los países para inversión extranjera, entonces ahí existen acciones muy claras que el gobierno debe atender para mejorar el ecosistema del emprendimiento”, dice. En el Doing Business 2015 México estuvo en el lugar 39 y en la edición 2014 en el 53.
Otro aspecto importante a tomarse en consideración, explica, es fortalecer el vínculo entre la educación y el empleo.
Es decir, desde muy temprana edad debería inculcarse el tema del emprendimiento en las escuelas e incluso alinearlo con las necesidades de la industria. Los jóvenes tendrían la opción de encontrar una oportunidad dentro de las empresas o la capacidad de detectar las necesidades dentro de una industria y emprender con el objetivo de satisfacer esa necesidad.
“En Reino Unido inician con el tema del emprendimiento a los cinco años, ellos te dan el equivalente a 8 dólares y te enseñan a vislumbrar cómo tendría que ser un negocio. Te enseñan a pensar en un producto, en un servicio, en cómo fijar un precio, en tener ganancias… Entonces es una muy simple recomendación, no es cuestión de teoría, es cuestión de práctica”, dice.
Lo cierto es que se podrían enriquecer los esquemas educativos en México y tener generaciones mejor preparadas en cuanto al emprendimiento concierne, pero también es cierto que existen jóvenes que quizá ya no tuvieron la oportunidad de formarse por el camino del emprendimiento, sin embargo, estarán obligados a emprender porque no les que ha quedado más remedio.
“A los emprendedores yo les he preguntado varias veces ¿qué es la única cosa que si no la tienes, no serás exitoso? Y pensé que la mayoría me contestaría que era el dinero. Inmediatamente pensé en fondos de capital, en inversionistas… etc. La respuesta me sorprendió, 60% respondió que lo único que se requería era el consejo adecuado, una buena guía, el coach correcto, el negocio correcto, la persona correcta… El problema no es el dinero, el problema son las buenas ideas, y esto es universal. Si tú tienes la mentoría correcta muy probablemente serás exitoso”, asegura.
Para Rohan el país tiene la gran oportunidad de enfocarse en la creación de emprendedores y de cómo hacerlos exitosos, de identificar a aquellos emprendedores de alto impacto, apoyarlos y crear aun más empleo. Las condiciones están dadas y quizá sea buen momento para que la población joven que no estudia ni trabaja se incorpore a la economía y convertirse en los futuros generadores de empleo.
Fuente: Forbes