Sin importar cuánto talento tengas o lo lejos que hayas llegado en tu carrera, lo cierto es que todos hemos incurrido alguna vez en errores que dañan nuestra vida profesional y afectan nuestra reputación, a veces de forma permanente.
Estas equivocaciones no siempre tienen que ver con romper las reglas, con comportarse de forma poco ética o con convertirse en uno de esos jefes que lejos de guiar a su equipo de trabajo a un buen resultado parecen sabotear su productividad al máximo; en algunas ocasiones pueden parecer pequeñas e inofensivas, pero su impacto a mediano o largo plazo puede ser devastador.
El portal Fox News dio a conocer recientemente una serie de errores que los profesionistas responsables deben evitar a toda costa si desean blindar su reputación y construir una carrera realmente prometedora.
1. Traicionar a un compañero
Cuando un colaborador traiciona a un compañero de trabajo, comete una falta contra todo un equipo. La desconfianza, la ausencia de apoyo e incluso el sabotaje son consecuencias esperadas una vez que esto ocurre, por lo que los profesionistas deben tener mucho cuidado de no incurrir en esta equivocación incluso de manera accidental.
2. Difundir rumores
Hablar mal sobre otra persona a sus espaldas no hará que tus compañeros de trabajo te perciban como un mejor compañero y mucho menos como un profesional responsable; al hacerlo no sólo dañarás los sentimientos de otra persona, sino que harás heridas irreparables en la confianza que tus compañeros tengan en ti.
3. Tomar el crédito del trabajo de otro
¿Quién no ha experimentado esa terrible sensación en el estómago al enterarse de que alguien más le robó una idea o tomó el crédito por su trabajo? Se trata de un acontecimiento que sin duda afecta la confianza que una persona puede tener sobre sus compañeros e incluso sobre una organización, lo que a la larga puede afectar significativamente la productividad del grupo y la relación entre sus integrantes.
4. Perder el control de tus emociones
El ritmo de trabajo acelerado, la presión que parece interminable y un jefe que convoca a junta hasta dos o tres veces al día para platicar sobre el lento avance de un proyecto pueden ser cosas que le ponen los nervios de punta incluso al trabajador más paciente, pero perder los estribos de forma recurrente puede causar mucho más que un conflicto fugaz en la organización, ya que proyecta una gran inestabilidad.
5. Anunciar que odias tu trabajo
Lo último que alguien quiere escuchar en el trabajo es a alguien que se queja todo el tiempo de lo mucho que odia a la empresa. Las personas negativas tienden a afectar la moral de su equipo de trabajo dañando seriamente su productividad, por lo que se consideran elementos tóxicos en la organización.
6. Presumir tus éxitos
Presumir demasiado tus éxitos dentro de tu espacio de trabajo y dedicar una gran cantidad de energía a celebrarlos puede resultar exactamente al revés de como lo habías planeado, ya que en lugar de proyectarte como una persona de éxito, demostrarás que se trata de algo que no es común en tu vida profesional.
Un profesionista responsable sabe que la mejor forma de celebrar es compartiendo sus triunfos siempre con su equipo de trabajo y averiguar juntos el siguiente paso para cumplir con una nueva meta.
7. Decir mentiras
Aunque las mentiras pueden comenzar con la intención de protegerte a ti mismo o a un miembro de tu equipo de trabajo, el problema con ellas es que tienen una capacidad ilimitada de extenderse hasta provocar un enorme problema del que difícilmente uno puede salir con la reputación intacta.
8. Comer alimentos que huelan mal
Evitar los alimentos con olores penetrantes debe ser una de las reglas más importantes en tu lugar de trabajo, ya que se considera una falta de consideración para quienes comparten la oficina contigo y el, a menudo desagradable, aroma de tu almuerzo.
9. Descuidar tus relaciones
Una parte importante de tu crecimiento profesional depende de las relaciones que puedas construir en el camino y la forma en que las mantengas a lo largo de tu carrera. Así que, aun cuando salgas de una organización o equipo de trabajo, procura siempre dejar atrás un impacto positivo tanto dentro de la compañía como en tus antiguos compañeros.