La explotación sexual comercial de niños, niñas y adolescentes es una práctica delictiva que degrada su integridad física y psicosocial, al tratarlos como objetos sexuales y comerciales. De acuerdo con ECPAT, organización que busca dar fin al problema, actualmente este negocio es el tercero más lucrativo del mundo, solo después del tráfico de armas y estupefacientes.
A pesar de ser un problema tan complejo y lamentable, como sociedad es importante conocer la mayor cantidad de información posible para poder detectarlo, si es que en algún momento nos llegamos a encontrar de cerca con la situación.
Existen 4 formas de explotación sexual: pornografía, trata de niños, niñas y adolescentes con propósitos sexuales, prostitución, y prostitución asociada al turismo.
¿Qué es la explotación sexual de niños, niñas y adolescentes en el turismo?
Este tipo de explotación se realiza por una o más personas, quienes se trasladan de su lugar de origen a otro, con el objetivo de establecer contacto sexual con niños, niñas y adolescentes.
Aunque los explotadores no tienen un perfil específico, ya que se han visto involucrados en esta práctica, hombres y mujeres de todas las clases sociales y niveles socioeconómicos, más del 50% tiene entre 40 y 60 años.
¿Quiénes son las víctimas?
Esta situación ocurre en todo el mundo; sin embargo, la problemática se acentúa en los países en vías de desarrollo, especialmente en aquellos con importantes regiones turísticas y con un marco legal y de protección social débil.
Las víctimas se caracterizan por estar en una clara situación de riesgo; a menudo bajo contextos de desventaja económica, carencia de hogar o pertenecientes a grupos socialmente marginados. Se sabe que en la actualidad, más de dos millones de menores son víctimas de este delito en el mundo.
Los niños, niñas y adolescentes víctimas de explotación sexual se ven afectados por graves trastornos emocionales, psicológicos y físicos; sentimientos de culpa, desprecio a sí mismos, miedo, angustia, y los cuadros depresivos que los pueden llevar al suicidio son muy frecuentes.
Una posible solución
De acuerdo con información de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, la industria del transporte juega un papel importante en la erradicación del turismo sexual de niños, niñas y adolescentes.
La aerolínea mexicana, Volaris, consciente de esta problemática y de su responsabilidad siendo una empresa de transporte, por tercer año consecutivo firmó un acuerdo con ECPAT, donde se reafirma su compromiso para evitar que sus aviones sean un medio para promover este tipo de explotación.
ECPAT es una red mundial de organizaciones en pro de los derechos de niñas, niños y adolescentes; hoy en día cuenta con 90 miembros ubicados en 82 países. En Latinoamérica, Volaris es la primera aerolínea aliada, y la segunda a nivel mundial, que busca promover un turismo sustentable y responsable.
Debido a la puntual y eficaz aplicación de acciones internas y externas en la lucha contra esta realidad, la aerolínea ha alcanzado la categoría Top Member.
Volaris es una empresa a favor de la vida y los derechos humanos, incluyendo por supuesto los de los niños, es por eso que a través de ECPAT logró implementar el código de conducta The Code, un código internacional para la protección de niños contra la explotación sexual comercial en la industria del turismo.
De esta manera y como parte de una solución, Volaris fortalece su compromiso con la vida ofreciendo información a los clientes, y capacitando a la tripulación y a los embajadores para la prevención y detección de este grave delito.
