Las minorías sexuales son objeto constante de declaraciones «de odio» en las escuelas japonesas, a veces por parte de los propios profesores, denunció el viernes la organización Human Rights Watch (HRW) en un informe.
«La retórica de odio anti-LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y transgénero) es prácticamente omnipresente en las escuelas japonesas, confinando a los alumnos LGBT en el silencio, el odio hacia sí mismos y en algunos casos en la violencia hacia sí mismos», afirmó la organización de defensa de los derechos humano con sede en Nueva York.
El estudio se basa en entrevistas de decenas de alumnos de minorías sexuales, así como con profesores quienes a menudo son, según la oenegé, un elemento clave del problema.
«La ausencia de información asociada a los comentarios de odio generalizados tanto entre los alumnos como entre los profesores hacen que estos niños sientan vergüenza y asco», continúa el informe.
Casi la totalidad de las personas encuestadas «dijo haber oído comentarios anti-LGBT en su establecimiento, como ‘asqueroso’, ‘homo’ o cosas como que ‘esas criaturas no deberían haber nacido nunca'», recoge el informe de HRW.
La ONG destaca que esta discriminación no es exclusiva de Japón pero que el archipiélago está a la zaga en materia de derechos de los homosexuales en comparación con Estados Unidos u otros países occidentales.
Con todo, se ha constatado una mejor aceptación de las personas homosexuales, bisexuales o transgérnero en el país en los últimos años, añade.
Según Kyle Knight, uno de los autores del informe, es crucial trabajar con los profesores e incluir cuestiones relativas a las minorías sexuales en los programas escolares.
«Lo más importante (…) es darle a los profesores informaciones apropiadas para que los temas que impliquen a personas LGBT sean incluidos en los planes de estudio», dijo durante una rueda de prensa en Tokio.
Según HRW, el acoso es un fenómeno muy extendido y a veces muy violento en las escuelas japonesas, pero las políticas gubernamentales para combatirlo no tratan específicamente la cuestión de los alumnos LGBT, que son los más vulnerables.
Fuente: lainformacion.com