Trabajar en una oficina los cinco días de la semana ya no es la norma. Gracias a la tecnología y la conectividad global, a veces ni siquiera es necesario salir de casa para asistir al trabajo. Las compañías fomentan el home-office, las personas optan por convertirse en freelancers para trabajar a su tiempo y en su casa, y muchos startups comparten espacios de trabajo con otras pequeñas empresas, promoviendo la convivencia y el coworking. Estas iniciativas, además de transformar el concepto de oficina, ayudan al medio ambiente porque promueven el ahorro de energía y agua, y evitan que las personas usen el auto toda la semana.
Actualmente está surgiendo una nueva tendencia que va más allá de solo ir a una oficina un par de veces: ahora el trabajo te acompaña cuando viajas por el mundo. No se preocupen, esto no significa que nos tengamos que convertir en adictos al trabajo, sino que se ha encontrado una manera en la que podemos ser más productivos, sentirnos menos estresados, mejorar nuestra creatividad, y, de paso, saldremos de viaje.
A esta nueva manera de trabajar se le llama de diversas formas: “retiro de coworking”, “vacaciones de coworking” o “coworkation”, que si nos ponemos creativos al traducir podríamos llamarlo “cotrabacación”. ¿En qué consiste este nuevo estilo de vacacionar y trabajar al mismo tiempo? En general se trata de irte con varias personas (usualmente tus compañeros de trabajo) y vivir un tiempo en otra ciudad o lugar turístico, donde encontrarás un espacio de trabajo más relajado y, por la noche, te animan a que salgas a conocer la localidad en donde te encuentras y convivir con las personas que viajaron contigo.
Estas experiencias son armadas por agencias de viaje especializadas como Hacker Paradise, Remote Year y We Roam, que ofrecen paquetes a Europa, Asia y Sudamérica y puedes quedarte un par de semanas o unos cuantos meses; muchos de los viajes son todo incluido y obtienes habitaciones, servicios de limpieza, membresías, tarjetas SIM, excursiones grupales, talleres en desarrollo de negocios, e incluso clases de idiomas.
Aunque de acuerdo con The Daily Dot, estos viajes podrían ser muy buenos para ahorrar dinero en la renta de vivienda, no todos los programas de coworkation son baratos. Algunos cuestan unos cuantos dólares, pero otros llegan a valer hasta 27 mil dólares, aproximadamente 540 mil pesos. A pesar de los altos precios que tienen algunos paquetes, no ha sido impedimento para que más personas y empresas los adquieran y vivan esta singular experiencia que ha demostrado ser benéfica tanto en el desempeño laboral como en la salud, no obstante, hay un problema ¿qué tan sustentable es esta nueva manera de trabajar?
Con la afluencia de personas que se unen al coworkation, los países que los reciben pueden ser afectados en el consumo de recursos naturales. Tan solo hace unos años en Bali se detectó que el turismo estaba creando una crisis hídrica, si más personas continúan llegando el impacto negativo continuará creciendo a menos que se tomen medidas efectivas para reducir el daño. Afortunadamente, los beneficios del coworkation no se limitan al bienestar personal, esta tendencia también se ha distinguido del turismo tradicional puesto que no solamente impulsan la economía del lugar que visitan, igualmente se interesan por ayudar a las comunidades y, debido a que pueden vivir allí por varios meses, se involucran activamente en proyectos sostenibles que auxilien a los habitantes locales.
En este momento el coworkation es una de las mejores opciones para aquellos que estén interesados en promover el bienestar personal entre sus empleados y compañeros de trabajo, después de todo, irse de vacaciones para enfocarse mejor en el trabajo no suena tan mal y, asimismo, existe la oportunidad de promover la responsabilidad social y la sostenibilidad, ¿qué más podríamos pedir?
Fuente: Tree Hugger
