El estrés, una mala alimentación, poca organización, insomnio… Son muchos los motivos que nos impiden encontrar la armonía laboral y, por tanto, alcanzar nuestras metas. Con estas pequeñas ideas, conseguirás sentirte en sintonía y desarrollar mejor tu talento. Apunta.
Organiza el trabajo
Tener todo planeado es una manera de no estresarse más de lo debido. Y el uso de aplicaciones de gestión pueden servirte de ayuda. Slack, Any.DO, Evernote o Wunderlist son las aplicaciones más conocidas que te ayudarán a crear y gestionar listas de tareas pendientes, intercambiar archivos, y chatear en grupos de trabajo, todo de manera sincronizada en todos tus dispositivos. Podrás estar al tanto de lo que ocurre en la oficina y sacarás el máximo partido a tu día a día.
Haz visible tu talento
Haces bien tu trabajo pero… ¿alguien lo sabe? Adelante, que no te dé miedo arriesgar y saca todo tu potencial para que tus compañeros y jefes vean tus cualidades. Para ello intenta estar presente en las reuniones, conversaciones o actos que te impliquen (directa o parcialmente) en tu profesión, y participa en ellas aportando tus ideas. Se te tendrá en cuenta y apreciarán tu interés en el trabajo. Además, muestra tus habilidades de liderazgo. Sé empática con los nuevos compañeros y ayúdales en los problemas que les surjan; guiándolos en sus tareas te ganarás su respeto y el del resto de tus compañeros.
Fomenta la creatividad
La creatividad es un aspecto muy útil en el trabajo. Te ayuda a resolver problemas más rápido y aporta originalidad a todo lo que haces. Y aunque pienses que no tienes esa capacidad, no te preocupes porque todas tenemos un lado creativo, sólo hay que saber sacarle el máximo provecho. ¿De qué manera? Asegúrate que te rodeas de un entorno agradable en el trabajo, aleja todo lo que pueda estorbarte. Haz breves descansos para despejar tu mente y refrescar tus ideas (¿has probado los ejercicios de meditación de 1 minuto? . Y sobre todo, sé creativa en tu tiempo libre. Ponte retos, nuevos hobbies que te marquen desafíos en tu día a día y estimulen tu imaginación. Así afrontarás tus tareas laborales con otro punto de vista.
Dedícate tiempo
Eres una persona dedicada y te esfuerzas en tu trabajo, pero lo que no sabes es que si reservas un breve tiempo para ti mejorarás en productividad. Con tan solo 10 minutos de descanso ganarás energía y serás más eficiente. Así que sepárate de la pantalla de tu ordenador y practica el automasaje en los hombros o en la espalda. Realiza movimientos circulares con la punta de los dedos o con los nudillos desde la nuca hasta el final de la columna. Aliviarás los músculos cargados y te sentirás reconfortada. Y en los minutos restantes, levántate, estira las piernas y recupera energía con una pieza de fruta o un puñado de frutos secos, y sobre todo, bebe agua. Estos alimentos saludables te mantendrán motivada para seguir trabajando.
Rodéate de optimismo
Mantener una mentalidad positiva te ayudará a sentirte mejor y a ser más eficaz y productiva en tu trabajo. ¿Cómo? Por la mañana, cuando te levantes, piensa en los mejores momentos del día para ti. Una charla con tu compañera, el café de media mañana o el proyecto nuevo que tienes entre manos. De esta forma llegarás con otro espíritu al trabajo.Huye de los compañeros tóxicos que viven en la crítica y el cotilleo por sistema. Y no te olvides de sonreír y ayudar a los demás, ya que reducirás los niveles de estrés y te sentirás más feliz. De esta forma crearás un ambiente positivo a tu alrededor, que te ayudará a desarrollar mucho más y mejor tu talento.
Fuente: ELLE