La vida laboral se puede ver desde dos perspectivas diferentes: cuando eres un empleado y cuando eres empleador.
Cuando eres un empleado y estás comprometido con tu trabajo las cosas te salen bien, pero no siempre todo es lo mejor ya que como persona mantienes problemas o situaciones personales que se «se salen de tus manos».
El empleado, además de cumplir con su horario de trabajo también necesita tener otro espacio para dedicárselo a su vida personal, tal como es la familia, los hijos, los hobbies, entre otras cosas.
Cuando un empleado decide hacer crecer su familia y tener hijos, es normal que esto represente una carga mayor a su vida y es posible que renuncie a su vida laboral.
La renuncia normalmente la realiza la mujer, debido a que ellas sienten más responsabilidad del cuidado de sus hijos, de acuerdo con Gabriela Alatriste, residenta de Cuido a mi bebé, una asociación que se dedica a fomentar políticas de conciliación, se trata de «Un tema grave y que, desafortunadamente, no está en la mesa de discusión”.
Cabe mencionar que en materia legal, en México, la licencia por maternidad es de 12 semanas, frente al promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que es de 20.
De acuerdo con el secretario general José Ángel Gurría, es importante la necesidad de incrementar el periodo a 14 semanas y que la licencia de paternidad aumente de los cinco días actuales a al menos ocho semanas.
“Es crucial tomar medidas que faciliten la reconciliación entre trabajo y vida personal, tanto en el sector público como en el privado, y que den acceso a servicios de guardería para los niños de menos de cuatro años», explicó Gurría.
Esta acción es importante porque como empleador es importante que cada uno de sus colaboradores se encuentre bien en ese ámbito de su vida ya que este impacto positivo no influye únicamente en lo familiar, también hace que en la empresa se tenga una mejor productividad.
«Hay un dato que incluso señala que aquellos que no reciben el beneficio porque no son papás lo valoran, porque su equipo es más productivo”, explica Rebeca Estrada, directora de Crecimiento para la Ciudad de México de la firma de guarderías Advenio.
En la empresa Cuido mi bebé inició hace dos años la certificación para empresas Amigable con Mamás (AMA), que valora las iniciativas que tienen las compañías para mejorar las condiciones de sus empleados con hijos.
Esta certificación evalúa parámetros como el permiso de ausencia por maternidad y paternidad, cómo es el regreso a la vida laboral de ambos y las iniciativas que la empresa ha puesto en marcha para mejorar lo que exige la ley.
“Es tan poco lo que la ley exige que hay muchas compañías dispuestas a mejorarlo, porque tienen conciencia de cómo aumentar la productividad. Saben que para eso necesitan que los colaboradores tengan una vida equilibrada y feliz”, sostiene Alatriste. En dos años, hay cinco empresas certificadas, entre ellas, el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit).
Algunas iniciativas como dar la tarde libre a los padres el día del cumpleaños de su hijo o tener una mayor flexibilidad de horarios empiezan a ser más frecuentes.
“La empresa se ha dado cuenta de lo que gana, porque aumenta el compromiso del empleado, que ve que la empresa valora la importancia de la familia», explica la directora de Crecimiento en Advenio.
Según una encuesta de Horizon Workforce Consulting, que ofrece el servicio de guardería corporativa en Estados Unidos, 87% de los 3,100 padres consultados consideró que había incrementado su productividad al contar con esta prestación y 84% afirmó que fue un factor clave a la hora de aceptar el trabajo.
