Nuestras organizaciones están hablando demasiado de responsabilidad social, pero corriendo dos serios peligros:
1. Hablando mucho, e implementando poco.
2. O, peor, cayendo en un activismo sin foco estratégico y con serias desviaciones.
Por ello, quiero invitar a reflexionar sobre lo que podría constituir la lista de los PECADOS CAPITALES en este terreno de gestión. Desde mi punto de vista, estos pecados capitales son la realidad colombiana decididamente mayoritaria y son los siguientes:
PECADO 1: Asumir la RS como una moda publicitaria.
PECADO 2: Considerar que es un asunto a delegar en una Fundación.
PECADO 3: Seguir viviendo de espaldas a las partes interesadas.
PECADO 4: Asumir que la ingenuidad de las partes interesadas es un recurso ilimitado.
PECADO 5: Pensar que es cuestión de nombrar a una persona para que se haga cargo.
PECADO 6: Sentarse a esperar a que haya leyes al respecto.
PECADO 7: Continuar instalados en el cortoplacismo, considerando que nada sustancial ha cambiado en la sociedad y en el mercado.
El octavo pecado sería cometer alguno de los otro siete. Saludos.