En la búsqueda por encontrar una manera más amigable de hacer las cosas, las marcas han empezado a integrar técnicas y materiales más ecológicos, así como procesos más justos. En el caso de la industria textil, la sustentabilidad en la moda se ha vuelto más que una prioridad.
Sustentabilidad en la moda: ¿sexy?
Sí, la industria textil es una de las que más contamina, no solo por la cantidad de recursos que necesita o los ecosistemas que impacta, también por la explotación laboral y otras malas prácticas que han provocado que su huella sea negativa tanto con el ambiente como con las comunidades.
Algunas marcas de esta industria se han comprometido a cambiar con prácticas responsables que demuestren que la sustentabilidad en la moda se ha vuelto una prioridad.
Durante estos últimos años, y sobre todo en el 2017, la sustentabilidad en la moda tomó un papel más importante y fundamental, que incentivó a todos los involucrados a experimentar con materiales naturales, como los hongos o la cascara de la piña; a su vez, a fomentar un consumo responsable tanto al interior como al exterior de la industria.
Muchos diseñadores comenzaron a tomar en cuenta sus ciclos de producción, sus emisiones y el tipo de tela o materiales que necesitaban para migrar a una rutina mucho más sustentable. Incluso empezaron a integrar términos como economía circular para insuflar todavía más a la sustentabilidad en la moda.
Como en el caso de la marca Mud Jeans, que integró un sistema para rentar pantalones y se convirtió en la primera en adaptar su modelo de negocio en la llamada economía circular, que no solo le permite que sus productos, al terminar su ciclo de vida, vuelvan a integrarse a la cadena para producir algo nuevo, también les ayuda a aprovechar más los recursos y desperdiciar menos.
Mud Jeans no es la única marca que ha integrado la sustentabilidad en la moda. Existen otras que ayudaron a convertir al 2017, en el año más sostenible para la moda.
La sustentabilidad en la moda
La sustentabilidad en la moda ha integrado prácticas más éticas. Estas fomentan una producción de bajo desperdicio, salarios justos, condiciones de trabajo seguras, reciclaje y otro tipo de acciones que vuelven a los aspectos sociales, ambientales y económicos más relevantes.
Como muestra de ello, se resaltan algunos puntos importantes que demuestran que la sustentabilidad en la moda se ha vuelto sexy y una pieza clave.
1-. Prácticas éticas
Marcas reconocidas han decidido renunciar a las malas prácticas para integrar a sostenibilidad en cada una de sus áreas. Tal es el caso de Gucci, que renunció al uso de pieles reales.
CEO #MarcoBizzarri announced this week #Gucci will stop using animal fur, from #GucciSS2018 @FurFreeAlliance @LAVonlus @HumaneSociety pic.twitter.com/5aSmea5CNS
— gucci (@gucci) 13 de octubre de 2017
Mientras que el conocido árbitro del glamour, Tom Ford, ha estado mejorando silenciosamente sus prácticas de producción durante casi 10 años. Incluso recibió el Premio Green Carpet Fashion al mejor diseñador Internacional de Apoyo Made in Italy.
Otra diseñadora que ha llevado las prácticas a otro nivel fue Maggie Marilyn, quien equilibra inteligentemente su compromiso con la sostenibilidad con una estética amigable para Gen Z: muchos volantes, influencias de streetwear y colores llamativos.
https://www.instagram.com/p/BaXwS-8BjYx/?hl=es-la&taken-by=maggiemarilyn
2-. Pieles responsables
Aunque la piel sintética no es nada nuevo, en el 2017 se convirtió en un punto clave. Nuevas marcas encontraron otras formas de crear piel sintética desarrollada a base de materiales como el hongo.
https://www.instagram.com/p/BZGQ6OVAExK/?taken-by=burberry
Tal es el caso de House of Fluff y Maison Atia o Burberry y Diane von Furstenberg, que ahora incluyen pieles falsas en sus colecciones. Otra marca fue Clare Waight Kellerla, con su nueva colección «Pre-Fallpara Givenchy», que también incluía algunos abrigos de piel sintética increíblemente lujosos.
Se sienten mucho más moderno estar mirando al pasado en ese aspecto… Hay formas más nuevas de presentar ideas viejas, Amy Verner de Vogue.
Una pieza que resaltó que, precisamente el pelaje real ya no es un modelo in, fue el abrigo amarillo canario de Calvin Klein de Raf Simons.
3-. Alternativas en telas
El uso de alternativas para elaborar telas, se ha convertido en todo un reto para los creativos del mundo de la moda. Un reto que los ha llevado a experimentar con seda de gusano o de araña, con cáscaras de piña e incluso con excremento de escarabajo.
Este tipo de materiales han transformado a las telas alternativas en una fuerza prometedora. Como en el caso de la diseñadora británica Stella McCartney, que además de usar piel sintética, trabajó con Bolt Threads, para crear un vestido de tela de araña y se asoció con Parley for the Oceans para reutilizar los desechos plásticos recuperados del océano para hacer zapatillas.
https://www.instagram.com/p/BcYBnSpFwz0/?taken-by=boltthreads
Otra marca que ha integrado prácticas para recuperar y reutilizar la ropa vieja fue H&M. Este año también creó, en colaboración con Bionic, una serie de vestidos hechos con pequeños trozos de plásticos recuperados de canales y costas.
De acuerdo con Según PJ Smith, gerente de política de moda en la Humane Society de los Estados Unidos, algunos científicos incluso están alterando el ADN para crear pieles sin el animal, seda sin gusano y cuero sin vaca.
Este tipo de materiales podrían ser costosos en un inicio pero después pueden ser una opción viable para los diseñadores y ser tendencia no solo para el 2018 sino para los siguientes años.
4-. Economía circular
Mud Jeans fue la primera en integrar este modelo de negocio. Sin embargo, expertos en el mundo de la moda, han creado diversos artículos que señalan que uno de los grandes objetivos de la industria es producir menos residuos y cosas nuevas sin dañar al medio ambiente.
A pesar de que reconocen que, llegar a estos tiempos, será complicado, han comenzado a proponer algunas soluciones para lograrlo. En el caso de Dame Ellen MacArthur y McCartney, presentaron un nuevo plan para integrar una economía circular de textiles sin desperdicios.
Otra iniciativa fue la de Ace & Jig que reunió a mujeres de todo el mundo para cambiar las piezas de Ace & Jig que ya no usaban.
https://www.instagram.com/p/Bch4UybnMD-/?taken-by=aceandjig
5-. La moda sustentable y las celebridades
Las marcas y diseñadores no son los únicos que han compartido una postura favorable sobre la sustentabilidad. Las celebridades también están fomentando el uso de ropa sustentable y nuevos desarrollos amigables con el ambiente y la sociedad.
Como Emma Watson, quien creó una cuenta en Instagram, bajo el usuario de @the_press_tour, en la que documentó su aspecto ecológico en la alfombra roja de la Bella y la bestia.
https://www.instagram.com/p/BQv_Tr5h5DK/?hl=es-la&taken-by=the_press_tour
Ella decidió lucir vestidos de diseñadores comprometidos con la sustentabilidad y compartió en cada foto, los elementos con los que los vestidos estaban confeccionados. También señaló cuando la prenda ya había sido utilizada en algún otro evento.
Michelle Obama, también se unió a este movimiento luciendo ropa vintage en varios eventos importantes, volvió a vestir su ropa favorita y promovió marcas pequeñas y éticas como Maki Oh.
Sin duda alguna, estos cinco puntos están marcando las tendencias de la sustentabilidad en la moda para el 2018 y los años que siguen.
