Casi mil días han pasado desde la aprobación, en septiembre de 2015, de la agenda global establecida por los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para cumplirse en 2030.
Entre los 193 países firmantes de los 17 ODS está México, que a decir de Antonio Molpeceres, coordinador residente del Sistema de Naciones Unidas y representante residente del PNUD en México, “es uno de los más avanzados del mundo en términos de institucionalizar, desde el gobierno, los mecanismos que permiten dar seguimiento a la agenda 2030”.
Entre estos mecanismo, explica, existe un consejo nacional que desde Presidencia monitorea el avance de los compromisos establecidos por México y el cumplimiento de los ODS.
También hay, a la fecha, 24 consejos estatales que se encargan de lo propio a nivel entidades federativas.
“El Plan Nacional de Desarrollo está vinculado a la agenda 2030 e incluso el presupuesto nacional está relacionado con los ODS”, asegura.
¿Esto es suficiente? Lamentablemente no. Aunque es “muy importante” hay algo que apunta como esencial: la participación del sector privado, “sin esto no vamos a cumplir los ODS”.
“El sector privado tiene que darse cuenta que el mundo va cambiando y que para mantenerse competitivo tiene que apostar por la innovación y asumir que existen tendencias a nivel global que deben incorporar a sus negocios”, consideró, luego de inaugurar el XI Encuentro Latinoamericano de Empresas Socialmente Responsables (ESR), en el cual se reconocerá a las empresas con Distintivo ESR 2018.
A manera de ejemplo, Molpeceres compartió el caso de la Unión Europea, que para recibir importaciones exigen a las empresas el cumplimiento de ciertos estándares, “muchos de los cuales tienen que ver con responsabilidad social, derechos de los trabajadores, cuidado del medio ambiente”.
Aunque evita hacer sugerencias puntuales de implementación a las empresas, porque “aprendí hace muchos años que cuando doy ideas al sector privado tengo que tocar el tema con mucho cuidado”, destaca que la agenda 2030 ha obtenido interés creciente por parte de la iniciativa privada y representa una guía para que las organizaciones incorporen una gestión más responsable.
Durante el Encuentro regional, realizado del 14 al 16 de mayo en la Ciudad de México, se reconocerá a un total de 876 empresas con Distintivo ESR 2018, en la categoría de grandes empresas.
Entre las ganadoras se encuentran empresas de todos los giros como Cemex, Grupak, Prolamsa, Grupo Fórmula, Walmart, Royal Holiday y Park Hotels & Resorts, LTH, Grupo HiTec, Red Ambiental, Grupo Modelo, Profuturo y VW Bank.
El año pasado, las empresas grandes que obtuvieron el Distintivo ESR 2017 fueron 830, lo que significa un incremento de 46 organizaciones para este año.
Mientras el año pasado, esas 830 organizaciones invirtieron 46.5 millones de pesos únicamente para inscribirse al proceso de obtención del Distintivo ESR, este año la cifra llegó a 52.5 millones de pesos, es decir, 13% más de recursos económicos.
Para obtener el Distintivo ESR, las empresas interesadas deben cubrir una cuota de inscripción, que no les garantiza obtener el reconocimiento y que varía en función de su tamaño.
La inscripción al Distintivo ESR 2017 para grandes empresas fue de 56 mil pesos, mientras que las empresas con Distintivo ESR 2018 pagaron 60 mil pesos de inscripción.
Por segundo año consecutivo, el Centro Mexicano para la Filantropía (Cemefi) –que desde 2001 entrega el referido Distintivo a empresas que cumplen ciertos criterios en ética, calidad de vida de los colaboradores, cuidado del medio ambiente y vínculo con la comunidad–, realiza ceremonias separadas para reconocer a las empresas grandes y a las mipymes ganadoras del sello.
En octubre se conocerá el resto de empresas con Distintivo ESR 2018, en las categorías micro, pequeñas y medianas.
