Constellations Brands se convirtió en la primera empresa cuya inversión podría ser sometida a consulta popular en México. La demanda de agua que generará la planta cervecera en Mexicali permitió a un grupo de ciudadanos presentar una petición ante el órgano electoral del estado para someter a consulta la continuidad del proyecto industrial.
Aunque aún no se define si procede o no el plebiscito e incluso, de realizarse y resultar contrario, la empresa buscaría irse a otro estado, vale la pena analizar cuál es el impacto real que tiene la planta para la comunidad de Mexicali, incluyendo aspectos ambientales, sociales y económicos.
Huella hídrica
La empresa ya ha negado que su consumo de agua amerite la consulta y, más aún, considera que “el volumen que requiere la planta es marginal comparado con la cantidad de agua que recibe Mexicali cada año, como parte del Acuerdo Binacional que se tiene con Estados Unidos”, de acuerdo con Edgar Guillaumin, vicepresidente de Asuntos Externos de Constellations Brands.
Si bien no niega que sean “grandes usuarios de agua, cuando se pone en el contexto del volumen que hay en el Valle de Mexicali, el impacto hídrico es mínimo”, aseguró.
Un estudio realizado en mayo de 2018 por el Instituto Mexicano de Tecnología del agua (IMTA) concluye que “los habitantes de la ciudad de Mexicali no sufrirán afectación en la cantidad de agua que hoy reciben” con la instalación de la planta de Constellations Brands.
Esto es así, refiere el IMTA, aun en el escenario de que la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Mexicali (CESPM) envíe 100 litros por segundo o 3.15 hectómetros cúbicos de agua cada año a la planta.
Hay que decir que 3.15 millones de metros cúbicos equivalen a una cifra 75% mayor a los 1.8 millones de metros cúbicos que la cervecera ha dicho que requiere para su capacidad de producción de 5 millones de hectolitros anuales.
“En condiciones futuras de crecimiento urbano, la posible afectación sólo se podría manifestar de manera poco significativa en términos de reducir el tiempo de uso de la reserva de derechos de agua a 2 años, pero debido a que la cervecera está obligada a restituir el volumen de agua suministrado por CESPM, el impacto en el servicio de agua a Mexicali sería nulo”, cita el estudio.
La recomendación del IMTA es que la planta cuente con una estrategia para evaluar la viabilidad de su operación, con y sin incremento de producción, considerando autoabastecimiento para dar mayor certeza a la empresa.
“La planta en Mexicali cuenta con la más alta tecnología, hemos aprendido lecciones en Nava y Obregón, donde tenemos nuestras otras plantas en México, y tenemos experiencia en la producción de cerveza, lo que nos permite que esta tercera planta sea altamente eficiente en el uso de los recursos naturales y con una visión sustentable de principio a fin”, consideró.
Asegura que en los últimos años han venido mejorando su eficiencia hídrica por unidad producida y actualmente requieren 2.8 litros de agua para producir un litro de cerveza en sus plantas.
“Estos números están por debajo de la media nacional e incluso son muy competitivos respecto de estándares internacionales”, indicó.
Mexicali Fluye
Con su llegada a Mexicali, la empresa firmó un convenio con la organización Sonora Institute para desplegar el programa Mexicali Fluye, que consiste en la recuperación ambiental y social de los canales naturales existentes en la ciudad.
“Hoy son tiraderos de basura y queremos convertirlos en zonas limpias, espacios donde la gente pueda caminar, tener actividades al aire libre y generar una dinámica social que los convierta en centros de convivencia y vinculación con el medio ambiente, nuestra meta es que la gente asuma un sentido de propiedad de sus canales”.
Constellations Brands, anticipa Guillaumin, busca también replicar en Mexicali mecanismos de colaboración con el gobierno y organizaciones sociales como los que le permitieron en Obregón, Sonora, donde tiene otra planta, reconstruir tres represas y generar un ahorro de 25 millones de metros cúbicos de agua al año, con un beneficio de 5 mil personas y la contención de riesgos, al tratarse de infraestructura vieja.
Inversión social
A nivel social, la fase de construcción de la planta, proyectada entre 2017 y 2021, ha permitido implementar acciones en Mexicali en los tres pilares sociales que tiene la empresa en México: educación, salud y deporte.
De la mano de Copase, organización ciudadana que promueve la mejora de la educación en Baja California, Constellations Brands ha “adoptado” tres escuelas de educación básica cercanas a la planta (menos de 4 kilómetros), mejorando en un primer momento sus condiciones de infraestructura: salones, bibliotecas, sanitarios, canchas de futbol, ventanas, aire acondicionado y pupitres.
Esta primera intervención ha beneficiado de manera directa a los 476 alumnos y maestros de esas escuelas.
“Pero no queremos quedarnos ahí, ahora buscaremos llevar el desempeño académico de esos centros escolares a un nivel alto y de excelencia académica, a través de capacitación a los maestros, apoyo y cursos a los padres de familia así como formación en valores para los estudiantes”, aseguró.
Y como en Mexicali el deporte por excelencia es el beisbol, la empresa se ha acercado a la Liga de Beisbol de Menores en comunidades rurales para impulsar la práctica de este deporte a través de apoyos en uniformes y equipo deportivo.
“Creemos que los chicos deportistas con chicos alejados de muchos problemas y por eso apoyamos a jóvenes de recursos limitados para que no dejen de hacer ejercicio por falta de dinero”, comentó.
En el tiempo de construcción que lleva la planta se han apoyado a 43 niños y jóvenes con estos apoyos.
En materia de salud, Constellations Brands ha aportado 400 mil pesos a la Fundación Mujeres que Viven, beneficiando alrededor de 170 mujeres que viven con cáncer de mama.
“Las empresas suelen llegar a una ciudad, instalarse, construir y ya operando comienzan a aplicar sus programas de vinculo con la comunidad. En nuestro caso ha sido antes, nos hemos adelantado porque creemos que es importante tener este tipo de comunicación con la comunidad”, dijo.
Desarrollo económico
Quizá el impacto más conocido es el económico, por la inversión prevista de 1,400 millones de dólares durante la fase de construcción de la planta en Mexicali.
De acuerdo con un análisis del impacto económico de la planta, realizado el Colegio de la Frontera Norte (Colef) en abril pasado, se generarán 5,068 empleos en Baja California durante el periodo 2017-2021, de los cuales 4,025 corresponden a empleos directos y 1,043 a indirectos e inducidos.
Lo anterior significa, refiere el estudio,138.2 millones de dólares por ingresos laborales. Además, en la fase de construcción se generarán 5.1 millones de dólares en ingresos fiscales tanto para la entidad como para el resto de México.
Una vez que la planta esté operando (a partir de 2022 y con una producción de 5 millones de hectolitros anuales), el impacto económico total de la planta alcanzará 617 millones de dólares al año, del cual 63% será para Baja California, con ingresos laborales que ascenderán a 36.6 millones de dólares e impuestos anuales por 4.7 millones de dólares.
Además, se crearán 3,798 puestos de trabajo indirectos e inducidos en Baja California, y 3,291 empleos indirectos e inducidos en el resto de México.
Guillaumín anticipa que durante la operación se generarán al menos 500 empleos directos con la planta además del impulso a proveedores locales.
“Nuestros proveedores de vidrio y cartón son de Mexicali, que contratan gente local y que en ambos casos ya están ampliando sus plantas para incrementar su capacidad productiva y satisfacer las demandas que requerimos”, explicó.
De acuerdo con el entrevistado, el efecto multiplicador alcanza a contratistas de la construcción, proveedores locales de servicios, ferreterías, hoteles, restaurantes, negocios de renta de vehículos, entre otros.
“Si pones en la ecuación el volumen de agua que requerimos, la inversión social realizada y la potencial, nuestra derrama económica, empleos y la vinculación que hemos hecho con organizaciones de Mexicali la balanza es favorable para la planta”, concluyó.
Relanzarán comunicación
El próximo 18 de enero, los consejeros del Instituto Electoral de Baja California decidirán si procede o no la solicitud de consulta. De resultar procedente, se realizaría una etapa de consulta entre distintos grupos de la sociedad de Mexicali sobre la pertinencia de realizar el plebiscito (grupos empresariales, cámaras, académicos, especialistas, entre otros).
Después de eso, de acuerdo con una entrevista ofrecida a Notimex por el consejero vicepresidente de Constellations Brands, Julio Portales, el organismo electoral deliberaría si va o no va el plebiscito el próximo 30 de marzo.
Por lo pronto, Edgar Guillaumin anticipa que en las próximas semanas harán un relanzamiento de su comunicación en Mexicali para asegurar que la comunidad y sus grupos e interés conozcan la información sobre el consumo de agua que tendrá la planta cervecera así como su impacto para el desarrollo local.