El año que está por culminar se encontró lleno de revelaciones sombrías y aterradoras sobre el estado de nuestro planeta, entre estas se presentaron glaciares derritiéndose, especies muriendo, bosques que ardieron en llamas y puntos de inflexión climáticos a punto de cruzarse (umbrales que, si se rompen, darán paso a un calentamiento incontrolable). En conclusión: el clima está en crisis.
Se acaba de vivir la década más cálida jamás registrada, y las Naciones Unidas ya han advertido que la contaminación por combustibles fósiles atrapadores de calor debe disminuir en más del 7% cada año para evitar los peores efectos.
La escala de acción requerida no tiene precedentes y es desalentadora. Frente a esta información, es fácil sentirse desesperado y ansioso. De hecho esta ansiedad es tan generalizada que en noviembre, psicólogos de más de 40 países firmaron una resolución reconociendo que los eventos relacionados con el clima, como incendios forestales e inundaciones, pueden tener efectos importantes en la salud mental, por lo tanto se han comprometido a aumentar la disponibilidad de servicios de salud mental para ayudar a las personas a sobrellevar la situación.
Ante esto los científicos hablan, los jóvenes protestan y los políticos redactan propuestas. Por primera vez el cambio climático ha sido uno de los principales problemas electorales en los Estados Unidos, y desde hace más de un año, activistas climáticos juveniles de todo el mundo han salido a las calles para exigir un cambio.
El panorama es confuso y en algunos casos desalentador, por tal motivo Huffpost habló con expertos en primera línea, aquellos que han dedicado su tiempo a abordar la ciencia y desarrollar soluciones, para comprender mejor lo que esperan y lo que les da esperanza.
Gina McCarthy
Gina McCarthy fue la décimo tercera administradora de la Agencia de Protección Ambiental durante el gobierno del presidente Barack Obama.
Actualmente es profesora de salud pública en el Departamento de Salud Ambiental de Harvard y recientemente fue nombrada jefe del Consejo de Defensa de Recursos Naturales. Ella comenta:
«En general, tengo esperanzas. Reconozco que los datos son inquietantes. Honestamente, creo que la mayor parte de mi energía respecto a la esperanza que tengo proviene de los jóvenes. Simplemente considero que su comprensión del problema y el desafío es notable, y lo están aceptando.
Se está exigiendo a personas de mi edad y menores que hayan tratado esto como si fuera un problema de rutina, solo una discusión científica, solo sobre el planeta, en lugar de comprender que estamos mirando fundamentalmente un desafío que podría despojar a nuestros jóvenes de la oportunidad de tener una vida plena y rica.
También espero que al mismo tiempo no solo dependamos de los jóvenes, sino que abracemos su energía y nos mantengamos tan activos como sea humanamente posible para abordar este problema. Por lo tanto estoy contenta con la juventud, me da esperanza, pero no significa que renuncie a mi responsabilidad hacia ellos, al contrario, los estoy usando para recordarme todos los días que es mi responsabilidad.
Si eres una persona de mi edad y te preguntas de qué se trata todo el alboroto con los jóvenes, pregúntales en la mesa. Pregúntales por qué están molestos, por qué están preocupados, por qué protestan, por qué les preocupa que no hagamos más. Y tal vez eso construya puentes entre generaciones que tendrán un impacto en qué tan bien respondemos todos a la crisis climática».
Ayana Elizabeth Johnson
Johnson es bióloga marina, fundadora y directora ejecutiva de Ocean Collectiv, una firma consultora para soluciones de conservación basadas en la justicia social, y fundadora de Urban Ocean Lab, un grupo de expertos para ciudades costeras. Desde su trinchera comparte:
“Tengo una relación tenue con la esperanza en estos días, pero ciertamente la estoy reforzado por el hecho de que ya tenemos todas las soluciones que necesitamos. Desde la energía renovable hasta la replantación de ecosistemas, la agricultura regenerativa, la modernización de edificios, la electrificación del transporte y la reducción de desechos: no necesitamos esperar nuevas tecnologías, solo tenemos que ponernos a trabajar. Además, gran parte de eso no requiere del gobierno federal, y hay mucho trabajo hermoso y creativo que está sucediendo a nivel local esperando ser replicado y difundido.
También estoy asombrada por lo que llamo el «renacimiento feminista del clima» que estamos presenciando. Siempre ha habido mujeres líderes en temas climáticos, pero ahora, finalmente, están comenzando a obtener los recursos y las plataformas que se necesitan para prosperar. El movimiento climático juvenil está dirigido principalmente por niñas y mujeres jóvenes, y hay dos generaciones mayores de mujeres de pie junto a ellas. Lo notable de estas mujeres líderes es cuán colaborativas y generosas son. Nunca he visto algo así en el trabajo o en un movimiento.
En cuanto a 2020, estoy ansiosa por tener un nuevo presidente, uno que priorice la acción climática y nos ponga en una vía rápida a cero emisiones. Y mi deseo de vacaciones es que cada estadounidense lea el New Deal verde. El gran secreto es que solo tiene 13 páginas: ¡fuente grande y doble espacio! Así que espero que te sientas cómodo en esta temporada de vacaciones para que, como sociedad, todos podamos tener una conversación informada sobre cómo dar forma a los cambios de política que necesitamos para asegurar un clima habitable».
Marshall Shepherd
Marshall Shepherd es profesor de geografía y ciencias atmosféricas en la Universidad de Georgia. Experto internacional en clima y clima, y ex presidente de la American Meteorological Society.
«Tengo muchas esperanzas porque, a pesar de las acciones miopes como la retirada de EE. UU. Del Acuerdo de París o el cambio climático ocasional en las redes sociales, estamos viendo un verdadero momento de cambio de barco. Existe una discusión y acción significativa sobre el cambio climático a nivel local, estatal, nacional e internacional.
Las compañías de Fortune 500, las comunidades religiosas y los militares reconocen la amenaza de «aquí y ahora» y están actuando. Hay esfuerzos genuinos bipartidistas ahora en nuestro Congreso y dentro de los estados. Y los científicos finalmente están comenzando a transmitir con el sentido de urgencia apropiado por qué el cambio climático es importante para la vida de las personas y los problemas de la mesa de la cocina ahora en lugar de los osos polares o los períodos de tiempo dentro de 80 años».
Leah Stokes
Strokes es profesora asistente en el departamento de ciencias políticas de la Universidad de California, Santa Bárbara. Experta en energía, clima y política ambiental.
“¿Qué me hace tener esperanzas? El año pasado se ha prestado mucha más atención a la justicia ambiental, y eso es realmente importante porque las comunidades negras y marrones han asumido desproporcionadamente los costos del status quo de la energía sucia.
Estoy realmente emocionada de ver que las compañías de combustibles fósiles comienzan a rendir cuentas por las tres décadas de negación climática que financiaron. Las compañías de combustibles fósiles están pisando los talones ahora, ya no controlan el discurso como lo hicieron durante muchas décadas. Están comenzando a enfrentar riesgos, su licencia social para operar está siendo erosionada.
Obviamente, el movimiento climático juvenil es muy emocionante… creo que antes de que comenzara el juicio político, el cambio climático era la noticia número uno. Y eso es realmente asombroso. Eso habla del poder de Greta Thunberg, Alexandria Ocasio Cortez, y el Movimiento Sunrise. Ellos han tenido mucho éxito en cambiar el diálogo.
Siento que con los candidatos presidenciales tenemos una carrera armamentista para saber quién puede gastar más y descarbonizar la economía lo suficientemente rápido y hacerlo con la mayor equidad. Y eso no tiene precedentes en una primaria presidencial, sin embargo mucha gente va a perder mucho dinero, y no se trata solo de accionistas o personas adineradas.
Creo que es mucha gente de bajos recursos la que posee activos, casas, llanuras de inundación y la interfaz urbano-forestal, donde habrá incendios forestales y serán ellos quienes perderán sus vidas por los huracanes».
Michael Mann
Michael Mann es profesor de ciencias atmosféricas en Penn State. Científico del clima detrás del llamado gráfico de palo de hockey.
“La buena noticia es que los impactos del cambio climático ya no son negables. La mala noticia es que los impactos del cambio climático ya no son negables.
Por un lado, las tormentas sin precedentes, los incendios forestales, la sequía y las olas de calor han hecho imposible que los intereses de los combustibles fósiles y sus facilitadores descarten la amenaza del cambio climático. Por otro lado, décadas de inacción política, gracias a sus esfuerzos han asegurado que ahora estemos experimentando impactos climáticos devastadores.
Las fuerzas de la inacción se han alejado de la negación dura y, en cambio, se dedican a una forma más suave de negación, es decir, desvían la atención de la necesidad de soluciones políticas al atribuir el problema completamente al comportamiento individual.
Donde encuentro optimismo es en la energía detrás del movimiento climático juvenil y el surgimiento de personas en todo el mundo que ahora demandan acción sobre el clima.
Estamos a solo un año de una elección monumental aquí en los EE. UU., donde tenemos la oportunidad de reafirmar el liderazgo en la batalla para evitar el cambio climático peligroso votando en los políticos que están dispuestos a liderar este esfuerzo y votando a los políticos que se niegan a. Hay una gran urgencia, pero también hay agencia. No es demasiado tarde para que actuemos».
Información vía Huffpost.
