Si abrieras tu refrigerador ahora y echaras un vistazo, quizá encontrarías varias frutas y vegetales listos para nutrirte; pero ¿te has preguntado alguna vez cuál es su origen y qué camino han tenido que recorrer para llegar a tu mesa?
Antes de llegar a nuestras manos, los alimentos que consumimos atraviesan complejas cadenas de suministro que inician con los procesos de cultivo en el campo y avanzan hasta su transportación y comercialización para finalmente llegar a la mesa.
A lo largo de este ciclo interviene una gran cantidad de personas que se emplean en distintas etapas de la cadena de suministro. Agricultores, trabajadores del campo, transportistas, pequeños productores, entre otros, trabajan incansablemente para que millones de personas puedan acceder a alimentos frescos, saludables y seguros.
El sistema alimentario mundial representa 10 % del PIB mundial y emplea hasta 1,500 millones de personas. Todas ellas trabajan incansablemente para que tú y tu familia tengan acceso a los alimentos que necesitan para nutrirse, aún en medio de la pandemia por COVID-19. ¿Cómo proteger a estos héroes y continuar garantizando el abastecimiento?
El sistema alimentario en tiempos de confinamiento y nueva normalidad
Las restricciones que diversos gobiernos han tenido que imponer, producto de la propagación de COVID-19, han representado un reto importante para la industria alimentaria: garantizar el abastecimiento adaptándose a un nuevo contexto y nuevas condiciones, para evitar que la crisis sanitaria se convierta también en una crisis de alimentación.
De cara a este desafío, decenas de empresas a lo largo de toda la cadena de suministro han tenido que mantener vivas sus operaciones, implementando nuevos protocolos de seguridad e higiene que garanticen la inocuidad de los alimentos y al mismo tiempo el bienestar de todos sus colaboradores.
Este importante reto solo puede sortearse a través de medidas de distanciamiento social y estrictos protocolos de higiene, sumados a una coordinación y cooperación global entre los sistemas comerciales de los que dependemos.
Decidida a contribuir en este proceso, en México Bayer emprendió la entrega de kits de protección personal para distribuidores, técnicos de agrícolas, agricultores y sus familias; para ayudarles a prevenir el contagio de COVID-19 mientras se suman a la lista de héroes que trabajan día con día para sortear la crisis sanitaria garantizando el abasto de alimentos.
Desde luego estos kits incluyen gel antibacterial, cubrebocas, careta y guantes, pero también un juego de mesa para promover la sana convivencia y procurar el equilibrio y bienestar en estos tiempos complicados para todos.
En total se han entregado hasta el momento 5,345 kits para beneficio de estos grupos de interés.
De este modo, la empresa busca promover la implementación de protocolos sanitarios adecuados a lo largo de toda la cadena de suministro a fin de garantizar la seguridad de los trabajadores y de los insumos y alimentos que se distribuyen.
El esfuerzo forma parte del compromiso responsable que la marca mantiene con el bienestar de las personas, en línea con el cual se ha sumado a la lucha contra COVID-19, y que integra prácticas que van desde la atención a la salud, hasta la procuración de medidas dentro de las cadenas de suministro.
“Estamos cooperando con los gobiernos y las autoridades de salud de todo el mundo para proporcionarles existencias disponibles de productos Bayer que hayan mostrado signos tempranos de eficacia potencial en el tratamiento de pacientes con COVID-19”, explica la marca a través de un comunicado.
A través de todas estas acciones Bayer busca contribuir a garantizar el abastecimiento de insumos necesarios para atender las necesidades alimentarias y de salud en medio de la emergencia sanitaria, de forma segura para agricultores, colaboradores y la comunidad en general. De este modo reafirma su compromiso con el bienestar de las personas.