Hablar de marihuana a la fecha todavía remite en muchos lugares a hablar de un tema tabú. Sin embargo, gracias a sus usos medicinales, terapéuticos y recreativos de forma moderada, dicha percepción se está quedando atrás.
De acuerdo con datos del World Drug Report 2018, los principales países consumidores de marihuana son:
- Israel 27%
- EE.UU 17%
- Chile 15,1%
- Canadá 14,73%
- Nigeria 14,3%
- Nueva Zelanda %13,89
- Francia %11,1
- Bermudas (R.U) %10,9
- Australia 10,4%
- España 9,5%
Uno de los debates principales de esta mezcla gris-verdosa de hojas y flores secas y trituradas del cannabis sativa, la planta del cáñamo que se conoce más como marihuana, es si su uso debe ser legal o ilegal.
El debate se encuentra aún vigente, empero, en países como Canadá y Uruguay ya tienen una legalización completa, mientras que en otros lugares aún se encuentran en el camino hacia la despenalización o legalización parcial o total en su consumo. Y mientras esto sucede, hay quienes se han preocupado por los empaques que utiliza este producto. ¡Veamos de qué se tratan los empaques de marihuana sostenibles!
El embalaje de la marihuana
De acuerdo con Green Entrepreneur, las empresas de cannabis que ya se encuentran dentro de los parámetros y permisos para su funcionamiento, han luchado con el embalaje excesivo que deben usar sus productos, empleando capas adicionales de plástico y papel para garantizar que los productos de flores o vaporizadores sean a prueba de niños y no caigan en las manos equivocadas, preocupación fundamental en el sector. Sin embargo, esa lucha podría estar llegando a su fin:
Nuevas opciones de envases de plástico y papel de origen vegetal están llegando al mercado a un precio comparable al de los envases convencionales. Todo eso es gracias al ingenio de algunas mentes innovadoras que están trabajando para usar el cáñamo y los desechos de la marihuana para hacer que el cannabis sea bio-circular.
Las plantas provienen de la tierra y los residuos que sobran se pueden utilizar para crear productos ecológicos como el papel de cáñamo que se pueden reciclar varias veces en lugar de ir directamente a un vertedero.
Y las empresas de cannabis están aquí para ello, dijo Erica Halverson, fundadora y directora ejecutiva de Tiny ePaper, una empresa con sede en Long Beach, California, que fabrica papel 100% cáñamo. Halverson dijo que el interés y la necesidad de empaques de marihuana sostenibles en la industria del cannabis era la luz verde que necesitaba para lanzar su empresa.
Estamos vendiendo este medicamento, estos productos curativos, pero lo estamos vendiendo de una de las formas más irresponsables posibles. Así que la industria del cannabis, en particular, ha llegado al punto de que está pidiendo soluciones de envasado sostenibles.
Erica Halverson, fundadora y directora ejecutiva de Tiny ePaper.
El shock económico causado por la pandemia de COVID-19 reveló las debilidades en la cadena de suministro global. También ha creado un momento fortuito para las empresas de envases ecológicos de América del Norte, y los ejecutivos dicen que hay cuatro razones por las que ahora es el momento adecuado para que las marcas de cannabis se cambien a soluciones ecológicas.
4 razones para que las marcas de cannabis se cambien a soluciones ecológicas
1. Reducir el desperdicio al tiempo que aumenta el uso y las ganancias de cannabis
Las alternativas de envasado sostenibles deseadas durante mucho tiempo que incorporan cannabis han sido esquivas debido a la legalidad del cáñamo y la marihuana. Además, los obstáculos de la cadena de suministro se interponen en el camino de las empresas que convierten los residuos en materia prima utilizable.
2. Detener la contaminación por desechos
Tradicionalmente se ha requerido la destrucción del cannabis durante la eliminación de desechos. En consecuencia, gran parte de este material biodegradable se ha arrojado a vertederos, lo que agrega otra carga financiera y ambiental para los cultivadores y procesadores de cannabis.
En cambio, los productores y procesadores podrían entregar sus desechos a empresarios que pueden rescatarlos para otros usos y eliminar dos problemas a la vez, todo mientras adoptan envases sostenibles.
3. Los requisitos biocirculares son el futuro
El uso de los residuos que están fácilmente disponibles para crear productos respetuosos con el medio ambiente, como las botellas de plástico de origen vegetal, frente a los producidos a partir de combustibles fósiles, puede hacer que la industria sea biocircular y posicionar a las empresas para los próximos años.
Tal cambio seguramente será parte de la próxima revolución verde, según Tarek Moharram, fundador de Moharram Ventures, con sede en Londres, Ontario, y la firma de bioplásticos True Green Plastic.
Estamos pidiendo a nuestros reguladores que incorporen un requisito para decir: ‘Si usted, como industria, tiene una oportunidad bio-circular, debe tomarla o explorarla seriamente’. La biocirculación será el futuro de los productos envasados para el consumidor, porque en última instancia estamos haciendo cosas con carbono.
Tarek Moharram, fundador de Moharram Ventures.
«También tiene un buen sentido financiero. En la industria del cannabis, la biomasa es el 80% de lo que sale del suelo y no se utiliza», dijo Moharram.
Los líderes de las empresas de cannabis que cotizan en bolsa «tienen un deber fiduciario con sus accionistas, y casi el 90% de lo que se cultiva no tiene valor extraído», afirmó.
4. A los consumidores les importa
Las marcas necesitan comunicarse con los clientes sobre sus valores y luego demostrar esos valores a través de la acción, según Moharram.
“Los consumidores realmente se están enfocando en organizaciones de triple resultado”, agregó Moharram. “La gente se preocupa por la huella de la industria. Cuando le habla al consumidor y le demuestra sus valores, eso es lo que crea relaciones a largo plazo con el consumidor y clientes de por vida».
Caso Tiny ePaper
Las necesidades de la industria a menudo pueden generar oportunidades, para reflejo de ello tomemos el caso de Tiny ePaper.
Halverson fundó la empresa en noviembre de 2017 después de que una conversación con un colega de la industria del cannabis revelara que la industria no tenía acceso al papel 100% cáñamo.
Mi objetivo original era lograr que cambiaran, y luego la industria del cannabis llega a ser un modelo para todas las demás industrias al demostrar que realmente podemos unirnos y tomar decisiones realmente inteligentes y responsables y cambiar toda una industria y ser un modelo para todos los demás.
Erica Halverson, fundadora y directora ejecutiva de Tiny ePaper.
Pero rápidamente descubrió que la falta de despulpadoras y fábricas de papel estaban dispuestas a trabajar con cáñamo, ya que el cultivo en ese momento todavía era ilegal a nivel federal. Y aquellos que estaban dispuestos a hacer negocios generalmente no estaban cerca de California.
Encontrar a alguien que crea que puedo llegar al papel de cáñamo al 100% sobre una base comercial y escalable fue una tarea en sí misma.
Erica Halverson, fundadora y directora ejecutiva de Tiny ePaper.
Después de que se legalizó el cáñamo con la aprobación de la Ley Agrícola de 2018, Halverson dijo que vio una mayor disposición entre las empresas para aprender sobre el papel de cáñamo y procesarlo. Pero la cadena de suministro sigue siendo una lucha porque hay escasez de procesadores y despulpadores, por lo que la mayor parte de su costo se destina a enviar la materia prima fuera del estado y viceversa, y luego enviarla a otros fabricantes para fabricar el papel.
En última instancia, sería ideal tener un extractor, un procesador de materias primas, una fábrica de papel y una impresora en «silos» geográficos en el oeste, el medio oeste y el este.
El papel de cáñamo es notoriamente fuerte en comparación con el papel de árbol y se puede reciclar de siete a ocho veces en lugar de tres o cuatro veces para el papel de árbol. Durante los últimos meses, la fundadora y directora de Tiny ePaper ha estado ocupada probando estos conceptos en la red social LinkedIn.
Usando el mismo papel de cáñamo que utiliza para las tarjetas de visita, Halverson modificó el empaque estándar troquelado mediante ingeniería inversa desde el cannabis, incluido el empaque a prueba de niños, hasta las bebidas empaquetadas, como agua con gas, cerveza y vino.
“Mi propósito era mostrar que se puede hacer que el papel de cáñamo funcione en cualquier parte del proceso de fabricación”, dijo Halverson. “Estoy demostrando que el mismo pegamento y la misma cantidad de pegamento funcionan. … Es posible que tengan que aplicar cierta presión sobre la máquina troqueladora para cortar el papel, pero cada vez que colocan un material diferente, tienen que volver a calibrar la máquina para eso de todos modos».
Erica Halverson dijo que las publicaciones de LinkedIn han generado tanto interés que ha firmado varias cartas de intención y tiene otros clientes potenciales listos para firmar una vez que esté en funcionamiento. En julio, ella estimó que estaría lista para tomar pedidos por adelantado en los próximos 30 a 60 días, una vez que su proceso final de despulpadora y papelera estuviera completo y pudiera entregar papel a los fabricantes de productos seleccionados.
“Esto me está ayudando a construir algunos puntos de datos, así que me aseguro de hacer suficiente papel”, comentó Halverson. “Le estoy mostrando al mundo que esto no tiene que centrarse en el cannabis. Estoy (usando hashtags para) bebidas y otras industrias, tratando de abrir las mentes de las personas en este momento a las posibilidades de la planta de cáñamo. Eso también me ha dado más demanda y ha creado más seguros «.
La apasionada directora y fundadora dijo que también está investigando la propiedad intelectual adicional utilizando adhesiones orgánicas y tintas a base de vegetales en su empaque, porque está convencida de que ningún químico dañino toca sus productos.
No utilizo ningún químico ni ninguna sustancia que no pueda introducir en mi cuerpo; si no puedo beberlo, no se aplica a mi producto.
Erica Halverson, fundadora y directora ejecutiva de Tiny ePaper.
A medida que aumenta la demanda de envases a base de plantas, es probable que sea necesario reutilizar más residuos de cannabis. A pesar de las presiones regulatorias, el crecimiento sin precedentes del mercado de cannabis en todo el mundo muestra que habrá una amplia oferta por ahora, según Halverson, quien obtiene todos los desechos de cáñamo para su papel de empresas de extracción y productores de cáñamo.
Al establecer su negocio en América del Norte, ha establecido contactos en otras partes del mundo que están listas para proporcionar residuos y ayudar a desarrollar la cadena de suministro internacional de papel de cáñamo.
El siguiente paso para Halverson es dar un giro completo al cultivo y crear un suelo vivo hecho con cáñamo y desechos de papel para que los agricultores aumenten sus rendimientos, un proyecto que ya está en proceso con una empresa privada.
Plásticos de origen vegetal
Según el Fondo de Defensa de los Recursos Naturales de EE. UU., los seres humanos en todo el mundo producen 300 millones de toneladas de plástico cada año, la mitad de las cuales son para artículos de un solo uso, una cifra casi equivalente al peso de toda la población humana.
Los plásticos de un solo uso incluyen envases, botellas, envoltorios, pajitas y bolsas, que a menudo se eliminan inmediatamente después de su uso.
El tereftalato de polietileno, que es uno de los plásticos más comúnmente reciclados, se puede reciclar en productos desde poliéster hasta piezas de automóviles, aunque el 91% de todo el plástico no se recicla en absoluto. En cambio, esos desechos terminan en vertederos o, peor aún, se desechan en el medio ambiente.
Actualmente, el 99% del plástico se deriva de combustibles fósiles, lo que significa que las posibilidades de mercado para las alternativas basadas en plantas son infinitas.
Productos que marcan la diferencia
Siguiendo esta línea, dos nuevas empresas en el sector del cannabis tienen como objetivo llevar al mercado productos que marcarán la diferencia.
Uno de ellos es Knot Plastic, un fabricante con sede en Saco, Maine, se propuso en febrero crear productos de embalaje alternativos seguros y no plásticos.
Cuando golpeó la pandemia de COVID-19, los cofundadores de Knot Plastic, Ry Russell y Michael Osborne, ya habían hecho todas las herramientas y estaban listos para fabricar contenedores pre-roll de cannabis. Pero cuando los fabricantes cerraron, rápidamente giraron para desarrollar la bolsa de plástico Knot a base de plantas, habiéndose puesto en cuarentena en una fábrica para contener cualquier propagación potencial del coronavirus.
El equipo comenzó con el etanol debido a la abundante oferta de maíz y porque pensaban que había escasez de cáñamo, lo que hacía que el costo de la materia prima fuera prohibitivo. Pero cuando se enteraron del exceso de oferta de biomasa de cáñamo de la cosecha de 2019, Russell llamó a algunos agricultores locales y comenzó a experimentar.
Agregamos un 15% de cáñamo industrial y lo logramos. Ahora, estamos probando el 25% para ver cuánto cáñamo podemos agregar a nuestros polímeros y comenzar esa transición ahora.
Ry Russell.
“Incluso si no es permanente, queremos incluir cáñamo en nuestro empaque de cannabis que lanzamos este otoño. Si el próximo año la economía no tiene sentido, todavía tenemos un suministro constante de maíz no transgénico para fabricar nuestros polímeros y nuestros plásticos de alta densidad. No somos una empresa de cáñamo o maíz, somos una empresa de plásticos de origen vegetal«, afirmó Russell.
Knot Plastic puede suministrar actualmente 15 millones de bolsas por mes y ha pedido dos máquinas más para producir las bolsas, lo que al menos duplicará la producción.
Satisfacer la demanda de los consumidores
La interacción con los agricultores de cáñamo mientras se abastecían de material para las bolsas de plástico Knot dio lugar a un segundo producto: bridas biodegradables.
Debido a que los productores de cáñamo deben etiquetar todas las plantas para su trazabilidad, un agricultor dijo que estaba gastando hasta $ 11,000 por año en bridas. Después de investigar un poco el mercado, Russell presentó las herramientas y el producto debutó este verano.
Knot Plastic también lanzó un recipiente para muestras de orina a base de cáñamo, lo que demuestra la capacidad de crear envases a base de plantas para el mercado de suministros médicos. Con este éxito, Russell y sus socios están agregando porcentajes mayores de cáñamo a sus productos, y esperan integrar el cáñamo en el empaque de cannabis (un tubo pre-roll y un contenedor con tapa abatible a prueba de niños de 19 dram) este otoño.
Tenemos que escalar en cada SKU, así que vamos a introducir el 19-dram, establecer esas relaciones y luego escuchar los comentarios sobre qué otros tamaños se necesitan. El mercado nos dirá dónde debemos estar.
Russell.
Inicialmente, Knot Plastic podrá producir 10 millones de unidades por mes y ha pedido máquinas para que la producción pueda aumentar con la demanda, dijo Russell.
“Para nosotros, fue muy importante que configuráramos nuestra cadena de suministro. Somos mucho más autosuficientes en la fabricación y producción de herramientas ”, dijo Russell, refiriéndose a cómo COVID-19 paralizó gran parte del sector manufacturero internacional. “Donde tenemos una oportunidad única para productos futuros es que nunca más nos llevará nueve meses desde el concepto hasta la producción. Deberíamos poder pasar del desarrollo del producto a un producto terminado en aproximadamente 90 días «.
Ese compromiso no es solo competitivo: Russell quiere declarar la guerra al mercado de los combustibles fósiles y reemplazar esos productos con alternativas basadas en plantas.
“Necesitamos ser los más rápidos en lugar de dar tiempo para que lleguen al mercado soluciones menos éticas”, dijo Russell. “El plástico reciclado en el océano simplemente reinicia todo este proceso de nuevo; lastimamos a alguien cuando lo derretimos. Hacemos daño a alguien cuando no tenemos idea de adónde va ese producto. Por lo tanto, Knot Plastic tiene que ser más rápido y más eficiente que cualquier otra persona para ofrecer productos verdaderamente no plásticos. Ese es mi KPI «.
Biodegradabilidad personalizada
En Canadá, el esfuerzo Truly Green Plastic de Moharram Ventures, en asociación con un equipo de investigadores de Lambton College en Sarnia, Ontario, ha creado un polímero plástico biodegradable a partir de desechos de cannabis que se obtienen de titulares de licencias canadienses.
Moharram tiene como objetivo ofrecer polímeros plásticos peletizados a base de cannabis a los fabricantes. Es la misma forma en que se proporcionan la mayoría de los plásticos derivados del petróleo, lo que garantiza una interrupción mínima del proceso de fabricación.
Actualmente, la compañía se autofinancia y no fabrica plástico a escala comercial, pero en el momento de la publicación, Moharram estaba encabezando un aumento de capital para construir una instalación y comenzar la producción.
Mediante un proceso bacteriano, Moharram y sus socios de investigación convirtieron la celulosa en una película delgada y biodegradable que se puede usar sola o mezclada con otros elementos para crear compuestos únicos. La película está diseñada para descomponerse de forma natural cuando se expone a elementos orgánicos en el medio ambiente y, en última instancia, se puede adaptar para que se descomponga en horas o en un año, según Moharram.
El objetivo es utilizar el proceso para convertir los desechos de cannabis en equipos de protección personal, parches médicos transdérmicos y envases de alimentos.
«Queremos que los polímeros se adapten estrechamente a su propósito, ese es el futuro de hacia dónde vamos con el espacio de los polímeros, ciertamente plástico de un solo uso», afirmó Moharram.
Señala el ejemplo de las bolsas de plástico que se utilizan para recoger los desechos de los perros y cómo no se descomponen de forma natural.
Ese es el futuro de este cambio ecológico en nuestros patrones de actividad del consumidor. Está bien tener plástico, pero es mucho mejor si es biodegradable, se adapta a su propósito y no dura más de lo necesario.
Moharram.
Según él, la envoltura de plástico que se usa para envasar pepinos y los protectores de plástico colocados sobre las pantallas de los dispositivos electrónicos son otros ejemplos de desechos innecesarios que se desechan inmediatamente pero que duran más en los vertederos de lo necesario. Por otro lado, señaló, los productos deben poder utilizarse durante el tiempo que sean necesarios.
“En última instancia, queremos ser cautelosos a la hora de saltar por completo en la otra dirección. Mira las pajitas de papel: sabemos que no funcionan tan bien «, dijo Moharram. “Si podemos ofrecer una solución de plástico verdaderamente verde para que se biodegrade cinco días después de que se sumergió en el líquido, genial. No tiene que durar para siempre, quizás un 15% más de lo necesario, pero debería durar más de 15 minutos».
¿Qué opinas sobre estas nuevas iniciativas? ¿Y sobre los empaques de marihuana sostenibles?
