Erika Barón
Especialistas en materia energética coincideron en qué el impulso de energías limpias en México no debería considerarse como un problema, sino por el contrario, es importante implementar acciones que impulsen el uso de recursos naturales para la generación de energía y qué, a su vez, garanticen el cumplimiento de compromisos internacionales como el Acuerdo de París.
“No encontramos una justificación técnica para no seguir avanzando y aprovechar la disponibilidad de energía renovable que tenemos, sin importar las encargadas de generarlas son empresas nacionales o internacionales” indicó Miguel Ángel Santinelli Ramos, director de la Facultad de Responsabilidad Social de la Universidad Anáhuac.
Luego de que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) asegurara que el exceso de energía intermitente fue la causa del apagón que dejó sin luz a más de 10 millones de mexicanos, el especialista aseguró que sí el gobierno no quiere que empresas extranjeras inviertan en el país con proyectos de energías renovables, es momento de que la dependencia gubernamental haga las inversiones necesarias para tener su propia infraestructura.
En entrevista para Expok, detalló que la solución no es limitar el uso energías limpias, como declaro la CFE, sino tener la infraestructura necesaria para poder regularla, y enfatizó en que estas acciones van en contra del Acuerdo de París, en el que México, que se comprometió a que 35% de la energía generada para 2024, y 43% para 2030, sería limpia.
Señaló que México debe aprovechar los recursos que tiene pues también “somos soberanos del sol, soberanos del aire, soberanos del agua, como lo somos del petróleo; es exactamente lo mismo”.
Antonio del Río Portilla, director del Instituto de Energías Renovables (IER) de la UNAM, señaló que el beneficio también es económico, ya que las fuentes renovables hoy en día son más baratas que las de combustibles fósiles, sobre todo en la generación de energía eléctrica; “pero todavía pensamos que estamos en el siglo pasado, cuando ese tipo de proyectos resultaba más costoso”.
Precisó que las energías renovables son el futuro y la generación del petróleo pronto pasará; “es un recurso que tiene bastante energía por unidad de masa y responde rápido a los requerimientos de potencia, pero emite Gases de Efecto Invernadero, y por su causa, los eventos extremos que se registraban cada 50 años, ahora los vemos frecuentemente”.
Manifestó que una buena alternativa es utilizar la energía solar, tanto térmica como fotovoltaica, “tenemos un promedio de 5.5 kilowatts de radiación por metro cuadrado, que nos produce al menos 0.5 kilowatts/hora al día. Con cinco metros cuadrados se abastece el consumo de una familia”.
Al respecto Santinelli agregó que México es el cuarto país con mayor incidencia solar y el tercer país con mayor posibilidad de generar energía geotérmica por la cantidad de volcanes y actividad que tenemos en el subsuelo, beneficios que sin duda deberían aprovecharse para alcanzar estos acuerdos internacionales.
“Esto no es una utopía o un paradigma que nadie haya alcanzado, países como Nueva Zelanda generan 100% de energía a través de recursos renovables, gracias a la gran cantidad de agua que tiene el país toda su energía prácticamente se genera a través de hidroeléctricas e incluso exportan energía limpia a otros países del Reino Unido”.
Gobierno vs energía renovable
Durante la conferencia matutina del pasado jueves, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, detalló que planea renovar las hidroeléctricas para producir energía limpia y barata, no sin antes revisar el marco legal en contexto; “porque cuesta mucho al Estado la compra de la energía eólica a particulares”.
En el marco de un cuestionamiento sobre el incumplimiento con los acuerdos internacionales que se tienen rumbo a la Agenda 2030, el mandatario Federal reiteró que hasta ahora sólo tiene planeado el impulso a las hidroeléctricas con las que ya cuenta CFE para evitar que “sigan saqueando a la nación”.
“Hay como 60 hidroeléctricas en el país que se construyeron a lo largo de los años que están subutilizadas, que tienen turbinas de hace 40, 50 años; entonces vamos a modernizarlas para utilizar el agua de los embalses y generar más energía con turbinas modernas, ese es un plan que tenemos para seguir avanzando en el propósito de que haya energías limpias”, destacó.
En este sentido, Greenpeace indicó que dicho anuncio debería estar acompañado de un plan de transición energética hacia fuentes renovables como el sol y el viento, para que se conviertan en una de las principales estrategias para reducir las emisiones que aceleran el calentamiento global.
La organización civil opinó que es preferible la rehabilitación de las hidroeléctricas existentes que expandir la inversión en combustibles fósiles con carboeléctricas, refinerías, termoeléctricas, gasoductos, nuevas hidroeléctricas o energía nuclear.
“Greenpeace ha sido enfática en destacar que su visión de modelo energético que dé prioridad a la generación comunitaria autogestiva, que genere cadena de valor entre las comunidades y permita combatir la pobreza energética, las altas tarifas y el aislamiento en el que muchas comunidades se encuentran a lo largo y ancho de México. Rechazamos cualquier tipo de proyecto donde impere la lógica extractivista, ya sea de energía renovable o fósil”, declaró la organización a Expok.
Por su parte la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) resaltó que la mayoría de los países que cuentan con sistemas modernos de generación están apostando de manera decidida y creciente por las fuentes renovables, México no debe quedarse rezagado, no debe cerrar las puertas a la inversión en fuentes sustentables.
“Las energías solares y eólicas ayudan a regular los cambios de frecuencia, estas tecnologías permiten estabilizar el sistema. En países como Noruega generan hasta el 68% de energía total y no han tenido problemas como estos”, estableció.
Cabe mencionar que el equipo de Expok buscó también la postura de Enel (empresa productora de energía eléctrica y de gas) pero no tuvimos respuesta hasta el cierre de esta edición, y a la empresa Ienova (dedicada al desarrollo de proyectos de infraestructura energética) quien, por el contrario, decidió reservar sus declaraciones al respecto.
