El compromiso con los vehículos totalmente eléctricos seguirá un enfoque gradual que comenzará con el lanzamiento del primer vehículo de pasajeros eléctrico fabricado por Ford para los clientes europeos en 2023.
Además, para mediados de 2026, la compañía dice que el 100% de su gama de vehículos de pasajeros en Europa será capaz de producir cero emisiones, totalmente eléctrico o híbrido enchufable, antes de pasar finalmente a ser totalmente eléctrico para 2030. Los vehículos comerciales de Ford también tendrán capacidad de cero emisiones para 2024.
El compromiso de los Eléctricos Ford
De acuerdo con TriplePundit, estos compromisos van acompañados de importantes inversiones. Ford dice que planea inyectar 1,000 millones de dólares en su planta de ensamblaje de Colonia, transformándola en lo que la compañía llama el «Centro de Electrificación de Colonia».
La renovada planta, que ya es una de las mayores instalaciones de fabricación de Ford en el continente y que alberga la sede central de Ford en Europa, se dedicará a la fabricación de vehículos eléctricos en el futuro, incluido el mencionado vehículo eléctrico de Ford para el mercado europeo en 2023.
Esta noticia se suma a un anuncio anterior de principios de febrero en el que se afirmaba que, a nivel global, Ford duplicaría su inversión en vehículos eléctricos hasta los 22,000 millones de dólares y destinaría otros 7,000 millones a los vehículos autónomos.
Esto se aproxima a un compromiso financiero similar con la electrificación realizado por General Motors para invertir 27,000 millones de dólares en el lanzamiento de 30 modelos distintos de VE para finales de 2025. Y en una señal de que la propia industria se está electrificando rápidamente, Jaguar Land Rover también anunció que será totalmente eléctrica para 2030.
Un panorama normativo cambiante
En todos los casos, estos fabricantes responden en gran medida al endurecimiento de la legislación sobre emisiones en sus mercados más importantes. La normativa europea exige que, para 2030, los coches que se vendan allí tengan una reducción del 37.5% de las emisiones de CO2 respecto a los niveles de 2021. Por su parte, el Reino Unido tiene previsto prohibir los vehículos de combustible fósil para 2030.
Automotive News Europe informó el año pasado de que estas estrictas normas de la UE significan que todos los fabricantes de automóviles han recurrido a la electrificación en cierta medida para cumplir las próximas normas, lo que sin duda está detrás de las directivas sobre vehículos eléctricos de Ford y Jaguar Land Rover.
Sin embargo, no tanto para General Motors. GM se retiró esencialmente del mercado europeo en 2017 con la venta de sus marcas europeas, Vauxhall y Opel, al grupo francés PSA. Pero GM se enfrenta a una presión similar en otros lugares.
El mayor mercado mundial de GM es China, donde las ventas de vehículos eléctricos están floreciendo. Además, como informa Forbes, es probable que China prohíba por completo los motores de combustión en 2040, por lo que el compromiso de GM con un futuro totalmente eléctrico en 2035 es muy oportuno.
El cumplimiento es el rey, por lo que la estrategia de Ford en la UE tiene sentido. Pero a pesar de las inversiones de la compañía, el fabricante de automóviles no está trazando totalmente su propio camino. Hace poco más de 18 meses, Ford anunció que trabajaría con Volkswagen en el desarrollo de vehículos autónomos y eléctricos.
Una asociación con Volkswagen
Ford dijo en ese anuncio de 2019 que la compañía «utilizará la arquitectura de vehículos eléctricos de Volkswagen y el kit de herramientas eléctricas modulares (MEB) para diseñar y construir al menos un vehículo completamente eléctrico de gran volumen en Europa para los clientes europeos a partir de 2023, avanzando de manera más eficiente su promesa de ofrecer coches de pasajeros expresivos mientras aprovecha la escala de Volkswagen».
Podemos esperar, por tanto, que el nuevo VE de las instalaciones de Ford en Colonia para 2023 sea fruto de esta colaboración, pero los detalles de cómo se configurará el coche están por ver.
Sin embargo, sí sabemos cómo son los vehículos MEB de VW, porque este fabricante ya ha empezado a lanzar su familia de vehículos llamada «ID». El enfoque modular, que parece conceptualmente similar a la plataforma Ultium de GM, puede soportar una serie de iteraciones y clases de vehículos, por lo que Ford parece tener cierta libertad en cuanto al mercado al que aspirar.
Hasta entonces, el único vehículo eléctrico puro de Ford que se puede comprar actualmente es el Mustang Mach-E. Irónicamente, aunque la audaz apuesta de Ford por los VE es eurocéntrica, en 2020 Ford no puso a la venta ningún vehículo eléctrico en la UE, mientras que, por el contrario, los estadounidenses pudieron comprar el Mach-E desde el pasado diciembre.
¿Se desplazará la ventaja del VE de Ford Norteamérica a Ford Europa a medida que avancemos en el futuro? La respuesta probablemente dependa de cómo Ford asigne el resto de ese presupuesto de electrificación de 22,000 millones de dólares, que a su vez tendrá que responder sin duda a la normativa vigente.
