Durante años, colaboradores han sido testigos y/o víctimas de maltratos en el lugar de trabajo. Sin embargo, en la actualidad denunciar estas situaciones forma parte de una cultura laboral que defiende a las minorías y evita que dichas prácticas continúen trascendiendo.
Este movimiento por construir espacio laborales sanos, encontró que aproximadamente el 33% de trabajadores sufre discriminación en su entorno de trabajo y que la edad, el género y el sexismo son los factores más comunes.
La toxicidad en el espacio de trabajo
Para Raúl Sibaja, director general de ADP para el sur de Europa, la forma de tratar y valorar a los trabajadores es sumamente importante, no solo porque la moral del equipo de trabajo es vital para una organización, sino porque la reputación de la marca podría verse afectada.
Estos son algunos de los efectos negativos que genera la discriminación en el espacio de trabajo:
- Disminución de la autoestima de los trabajadores.
- Que los trabajadores sean menos productivos.
- Una mayor rotación de personal.
- Incremento de conflictos laborales.
- Denuncias contra las empresas.
- Mala imagen de la empresa.
Las y los empleadores como directivos y gerentes, deben estar alertas en esta cuestión y abrazar un enfoque proactivo que permita garantizar la igualdad de trato para toda la plantilla de trabajo y que la compañía se encuentre operando bajo un ambiente sano.
Empero, la falta de un protocolo o procesos adecuados en las empresas evita que estas puedan aumentar la inclusión, crear una cultura de mentalidad abierta e integrar a las personas que trabajan en ellas para contribuir a evitar estas malas prácticas y actitudes.
Kim Scott, autora de Just Work: Get Sh * t Done, Fast & Fair (2021), retrata en este texto un panorama en el que explica cuatro maneras de defender a las minorías en tu trabajo y cómo construir mejores espacios de trabajo.
4 formas de defender a las minorías en tu trabajo
1. Retroalimentación pasiva
Cuando seas espectador de un comentario o actitud nocivo, en lugar de atacar a la persona que está agrediendo, puedes compartir de manera sutil el error que está haciendo.
Algo tan simple y directo como: “Creo que lo que dijiste suena sesgado”, puede ser sorprendentemente efectivo. Los espectadores pueden usar declaraciones en primera persona para que la otra persona pueda comprender la situación desde su perspectiva sin sentirse atacados.
Kim Scott, autora de Just Work: Get Sh * t Done, Fast & Fair.
Cuando haces comentarios críticos sobre cualquier tema, pero especialmente sobre uno tan sensible como el prejuicio, no es efectivo atacar la personalidad, la moralidad o el carácter de alguien.
¿Te imaginas que alguien responda sinceramente: “Oh, muchas gracias por hacerme saber que soy homofóbico. Ahora que entiendo que soy un tonto, cambiaré mis caminos?»
Kim Scott, autora de Just Work: Get Sh * t Done, Fast & Fair.
Hacer frente a los prejuicios de forma eficaz cuando te des cuenta de ellos, ayudará a formar mejores vínculos y espacios de trabajo. Además, es importante entender que cuando el prejuicio de una persona daña a otra del equipo, es difícil hacer las cosas juntos.
2. Abordar los prejuicios
¿Qué dices cuando las personas creen conscientemente que los estereotipos de los que hablan son ciertos, cuando te enfrentas a prejuicios activos en lugar de prejuicios inconscientes?
Es difícil responder a los prejuicios pero es mucho más difícil contestar cuando las personas creen que el género, la raza, la religión, la orientación sexual, la identidad de género, los antecedentes socioeconómicos o cualquier otro atributo personal de alguien los hace incapaces o inferiores de alguna manera.
Para confrontar el prejuicio se debe trazar una línea clara entre el derecho de esa persona a creer lo que quiera y tu derecho a que no te impongan esa creencia.
El uso de una declaración como: “Eso” apela a la decencia humana, “Es irrespetuoso / cruel / etcétera. . . » puede ayudar a mostrar porque ese prejuicio es erróneo y dañino.
3. Reconoce
En un nivel práctico, las personas que hacen frente a este tipo de actitudes, se encuentran en la mejor posición para intervenir porque la naturaleza del acoso es aislar al objetivo y separar al individuo del grupo.
¡Hollaback!, una organización sin fines de lucro que desarrolla capacitación para los que están al frente, ofrece un enfoque efectivo de “5D” para estar al tanto de las diferentes cosas que puede hacer para abordar el acoso. La organización recomienda cinco pasos posibles:
- Dirigir.
- Distraer.
- Delegar.
- Retrasar.
- Documentar.
Con ellos, puedes elegir qué protocolo seguir para combatir el acoso y comunicarle a la persona su mal comportamiento y el por qué es erroneo.
4. Solo di algo
Cuando somos testigos de una injusticia, es nuestra obligación encontrar de forma proactiva una forma de apoyar a las personas perjudicadas.
Ser un espectador pasivo que simplemente observa cómo se hace daño, quizás sintiéndose mal por ello pero sin hacer nada al respecto, es malo para todos.
Kim Scott, autora de Just Work: Get Sh * t Done, Fast & Fair.
Además, cuando notamos una injusticia, ya sea pequeña o grande, tenemos la responsabilidad de tomar medidas y tenemos la obligación de advertirlo: no darnos cuenta no nos da la absolución.
Es cierto que no siempre podemos resolver el problema pero siempre podemos mostrar solidaridad con la persona que está siendo lastimada, y ese reconocimiento de que “algo anda mal aquí”, es invaluable.
¡Debes defender a las minorías en tu trabajo!
Kim Scott comentó que gran parte por la que escribió el libro fue para agradecer y reconocer a todas aquellas personas que defienden a sus compañeros de trabajo.
Por cada mala experiencia que he tenido como mujer en el lugar de trabajo, he tenido múltiples buenas experiencias con personas que estuvieron allí para ayudarme a navegar estos momentos y apoyarme después.
Kim Scott, autora de Just Work: Get Sh * t Done, Fast & Fair.
Para ella, estas personas son líderes y superan con creces a las personas que causan daño. Los espectadores alimentan el optimismo de que podemos resolver el problema de la injusticia en el lugar de trabajo.
El equipo de trabajo es esencial para brindar retroalimentación clara a la persona que causó el daño de una manera que minimiza la actitud defensiva y maximiza las probabilidades de que el infractor haga las paces.
¿Qué otras formas conoces para defender a las minorías en tu trabajo?